Las deudas de la Fundación se originaron en el FIA de 2014, realizado entre el 3 y el 13 de abril. (Foto: archivo)
Una deuda de la Fundación Pro Festival de las Artes que supera los ¢50 millones impide que dicha organización pueda establecer un contrato con el Ministerio de Cultura, lo cual podría afectar la captación de patrocinadores para la realización del Festival Nacional de las Artes (FNA) del 2015.
Ana Acevedo, presidenta de la Fundación, reconoció a UNIVERSIDAD que en la actualidad “están bloqueados y varados” porque tienen dicha deuda, heredada del último Festival Internacional de las Artes (FIA).
Se estima que en el FIA realizado en abril del 2014 hubo una inversión de ¢1200 millones. Hay que recordar que esta cita tuvo como país homenajeado a Rusia y su sede principal fue el Parque Metropolitano de La Sabana.Las razones aludidas para que esa organización arrastre la deuda obedecen a que varios patrocinados se retiraron y no cumplieron con sus obligaciones, así como a la subida del dólar, lo que hizo que se encarecieran los costos de transporte y pago de grupos contratados, sostuvo la Presidenta.
“Nosotros trabajamos con patrocinios y hubo algunos que no se ejecutaron. Después se dio lo del cambio de dólar y fue cuando ya teníamos contratada gente del exterior. Teníamos que pagar tiquetes, cargas, equipos; eso se asumió con un año de anticipación, y al darse el cambio del dólar nos generó un déficit. Además, algunos patrocinadores se quitaron”, afirmó Acevedo.
También detalló que la deuda oscila entre ¢40 y ¢58 millones y mientras no se salde no podrán retomar las gestiones con el Ministerio de Cultura, pues este no firma el convenio en esas circunstancias. El dato de la deuda no lo tenía claro, porque en estos días estaban en un proceso de revisión de las diferentes cuentas.
“Nosotros funcionamos como un puente para agilizar los pagos directamente con el Festival, pero al no querer asumir Cultura, que es una situación conjunta, quedamos totalmente paralizados”, dijo.
Acevedo expresó que la gestión de patrocinios con la empresa privada es ardua y compleja, y por ahora no pueden proceder por la falta del convenio con el Ministerio. En caso de seguir dicha situación, la Fundación Pro Festival podría desarrollar proyectos por su cuenta, pero totalmente ajenos al quehacer del ámbito estatal.
Acevedo tiene un año de haber asumido su puesto y ahora tendrá que cumplir con este importante desafío, reconoció.
ESPERAMOS SE RESUELVA
Inti Picado, del Centro de Producción Artística (CPA), tendrá a su cargo la organización del FNA, FIA y la Feria del Libro. Picado aclaró que el Estado no puede hacer un convenio con una Fundación que tiene una deuda, porque ello podría generar problemas en diferentes gestiones.
“Esperamos que a mediados de agosto se resuelva, pero por ahora no se puede firmar, dado que no procede hacerlo en tales circunstancias”, acotó.
Para el Festival Nacional de las Artes, que se efectuará en abril del 2015 en Aserrí, Desamparados, Acosta y Alajuelita, el Ministerio de Cultura espera contar con un presupuesto de unos ¢1200 millones, aseveró Picado.
De ese total, una buena parte tendría que ser gestionado en el ámbito privado, por medio de la Fundación Pro Festival.
Desde el punto de vista legal, no hay una limitación para establecer el nuevo convenio con la Fundación, pero resultaría improcedente firmar con un ente que acarrea deudas, enfatizó Picado.
La situación de los patrocinios no atenta contra la realización del FNA, que en esta ocasión procura mirar hacia el sur de la provincia de San José. “El Festival Nacional siempre se va a hacer, incluso si no se resolviera lo de la Fundación, aunque esperamos que sí se solucione”, externó.
En relación con este tema, Picado destacó que habrá un presupuesto asignado al Festival Nacional, el cual se tramitará en los próximos meses.
La importancia de captar recursos por medio de la Fundación estriba en que si un patrocinador hiciese una donación y ese dinero va a las arcas centrales del Gobierno, luego, para asignarlo a un programa en particular, se requeriría de una tramitología prácticamente interminable, advirtió.
De ahí que la figura de la Fundación haya servido para canalizar recursos de una manera más ágil y oportuna. Desde ese punto de vista, Picado considera que Pro Festival no debió incurrir en deudas, como le sucedió.
