Un documental que aborda los riesgos del proceso extractivo de gas natural y plantea cuestionamientos a la promoción que el actual Gobierno de Costa Rica le ha dado a este tipo de industria es la nueva producción del director Pablo Ortega.
El audiovisual fue presentado al público el pasado miércoles 21, en el marco del Día Mundial del Agua y representa la inauguración del Laboratorio Audiovisual de Documentalismo Investigativo (LAUDI), un proyecto conjunto de las escuelas de Biología y Filosofía de la Universidad de Costa Rica.
Durante 20 minutos, el filme explica con un tono satírico, el proceso de extracción del gas natural y los riesgos de los métodos que se utilizan en la industria para obtenerlo: fraccionamiento, perforación profunda en horizontal y fracking (inyección de agua, arena y productos químicos a alta presión para fracturar las rocas en que está contenido el gas).
El documental plantea que estos métodos de extracción ponen en riesgo los mantos acuíferos, ya que para llevar el gas a la superficie, se utilizan tubos que, en una de cada seis ocasiones en la industria mundial, presentan fugas que contaminan las aguas subterráneas con metano y benceno (hidrocarburo tóxico y potencialmente letal).
Incluso el documental muestra, con tomas reales, como en algunos países, el agua común que sale de los tubos de las casas está tan contaminada con estos gases, al punto que al acercarle fuego (mediante un encendedor o fósforo) se enciende en llamas.
El audiovisual muestra, también, como estas fugas pueden liberar al ambiente gas metano —que es uno de los gases más contaminantes y productores del conocido “efecto invernadero— y explica que cerca de la mitad de los químicos inyectados al suelo no pueden ser recuperados y los que son recuperados, generalmente, son desechados de manera irresponsable en ríos y lagos.
Además, el video analiza la campaña a favor de la extracción de gas natural del suelo costarricense que ha venido desarrollando el gobierno de Laura Chinchilla, especialmente el papel del exministro de Ambiente y Energía, Roberto Dobles.
Pablo Ortega, director del documental, comentó que este audiovisual no representa una oposición al uso del gas natural como fuente de energía, pues esta presenta ventajas frente al uso de otros hidrocarburos como los derivados del petróleo, sino que pretende explicar los peligros de que se extraiga en el país.
Según dijo el documentalista, “hasta ahora los proyectos de extracción de gas natural se han presentado a la opinión pública como la solución a nuestros problemas energéticos y como si fueran absolutamente seguros para el medio ambiente, y no lo son”.
Durante el video foro que procedió al estreno de “Las trampas del gas”, tanto Ortega como el director de Oilwatch Mauricio Álvarez y el abogado ambientalista Álvaro Sagot coincidieron en que el uso del gas natural como combustible presenta ventajas relativas, pero que su extracción en el país presenta riesgos reales. Por lo cual, la mejor opción es importarlo como hasta ahora se ha hecho.
Los panelistas explicaron, además, que de acuerdo con el artículo 36 de la ley de hidrocarburos, si se obtuviera gas natural de nuestro propio suelo, el Estado costarricense se comprometería a comprarlo en el mismo precio del mercado internacional. Esto hace que los proyectos de extracción ni siquiera sean rentables para la economía nacional.
Ortega aseguró que espera que este documental sea visto por buena parte de los costarricenses, para que la sociedad pueda debatir de manera informada si desea que se realicen extracciones de gas en suelo nacional.
Con este fin, el documental se distribuirá de manera gratuita a quien lo solicite en el LAUDI o en la Escuela de Biología y será subido a YouTube para que pueda ser visto por cualquier internauta.