Representantes de seis partidos políticos explicaron sus propuestas sobre el campo cultural.
Delegados del Partido Acción Ciudadana (PAC), Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), Partido Liberación Nacional (PLN), Movimiento Libertario, Alianza Patriótica y Frente Amplio que aspiran a la Presidencia de la República participaron el pasado 13 de enero en el Encuentro Arte, cultura y política, para discutir sus propuestas en el ámbito de la cultura.
La actividad, llevada a cabo en el Auditorio Cooperativo, fue organizada por la Comisión de relación con el gobierno de la Red Costarricense de Artes Escénicas, para divulgar los planes de cada partido respecto del sector cultura.
A pesar de que los candidatos presidenciales fueron convocados a este encuentro desde diciembre, solamente Eugenio Trejos -candidato del Frente Amplio- se presentó. Otros cinco aspirantes a la silla presidencial enviaron representantes de sus agrupaciones.
Así, acudieron María Eugenia Bozzoli por el PAC, el candidato a vicepresidente por la Alianza Patriótica, Dionisio Cabal y María Lourdes Cortés por Liberación Nacional. Además, participaron Flor Carreras del Movimiento Libertario, Aida de Fishman como representante del PUSC y Eugenio Trejos. De los siete grupos convocados, estuvo ausente el Partido Accesibilidad Sin Exclusión.
Roxana Ávila, actriz, directora y dramaturga costarricense, dijo durante el acto que “para el sector que produce el imaginario simbólico de este tiempo y de esta sociedad, no pasa desapercibido que en el último minuto las y los candidatos presidenciales hayan decidido no venir y mandar a sus representantes”, mostrando molestia ante el hecho.
POCAS PROPUESTAS
Aunque la Red Costarricense de Artes Escénicas instó a los exponentes a no ahondar en explicaciones teóricas o filosóficas, sino en las acciones que propone cada grupo, las propuestas concretas fueron las menos escuchadas.
María Eugenia Bozzoli, explicó que el PAC vincula el trabajo cultural con la protección y uso sostenible de los recursos naturales, la educación, el turismo y la promoción de valores.
Hizo énfasis en la necesidad de “desconcentrar la cultura”. Para esto su partido pretende crear y reforzar las Casas de Acción Cultural (hoy Casas de Cultura), apoyar los museos regionales, abrir etapas básicas de música en más lugares, restaurar de viejos cines en las comunidades y mejorar las bibliotecas públicas.
Por otro lado, la propuesta cultural de Alianza Patriótica, expuesta por el cantautor Dionisio Cabal, gira principalmente en torno al rescate de la cultura popular.
Mencionó que una acción política de su partido pretendería la realización de un inventario cultural de los recursos humanos y materiales del sector, el desarrollo de una teoría general de la cultura popular, planteamiento de una política integral de desarrollo cultural y una Ley General de Fomento de la Cultura Popular.
Se refirió a la necesidad de incorporar los estudios folclóricos y talleres artísticos en el nivel de secundaria, de apoyar proyectos culturales independientes y de promover la sindicalización de los trabajadores asalariados del arte. Además, la propuesta de la AP incluye la reanudación del Festival de Teatro al Aire Libre, la creación de festivales nacionales de cimarronas, copleros y “rock auténticamente costarricense”.
Posteriormente, María Lourdes Cortés -actual directora de Cinergia- explicó que el eje del Partido Liberación Nacional en materia de cultura es la “dignificación” del trabajo del artista. “Eso de amor al arte no lo queremos oír más, nunca. Los trabajadores del arte necesitan realizarse para crecer, producir y sobrevivir económicamente”.
Con el fin de llevar a cabo esta tarea, Cortés explicó que se deben crear industrias culturales, ya que el sector es altamente competitivo y por medio de políticas de incentivos fiscales, apoyos directos y estímulos económicos sería posible exportar lo que se produce en el país. Añadió que en un gobierno del PLN se “defenderían a morir los derechos de autor y se mantendría y fortalecería la política de adhesión a acuerdos internacionales y se reforzarían programas como ProArtes.
En tanto, para el Movimiento Libertario hay esfuerzos como ProArtes y otros programas estatales que son apenas tímidos, y demuestran la mala administración de recursos en el Ministerio de Cultura y Juventud, según explicó la productora Flor Carreras.
Para esta agrupación, lo más urgente es la modernización de esta entidad, ya que “tiene muchos años de ser el mismo, sus estructuras son cuadradas y están gastadas y obsoletas.” Carreras explicó que su partido pretende dotar de mayores recursos a la producción cultural y artística, recortando presupuesto de la “burocracia y la tramitología”.
Asimismo se refirió a la necesidad de “desconcentrar el poder del Ministerio”, ya que las decisiones de todas las instituciones adscritas a él están concentradas en manos del jerarca de turno. Recalcó la necesidad de crear buena infraestructura para sacar de San José toda la actividad gruesa de la cultura.
La intervención de Aida de Fishman del PUSC giró en torno a los logros de su gestión como ministra de cultura en el periodo 1990-1994. Se refirió a asuntos de infraestructura y presupuesto que a su parecer, no se han resuelto por falta de voluntad. “No se ocupa más presupuesto, ni más leyes. Todo se puede hacer si hay voluntad”, dijo.
Agregó que aspira al Ministerio de Cultura y Juventud porque las estructuras que un día creó “están desdibujadas y se necesita pasión para volver a encaminarlas”.
El último en exponer fue el candidato a presidente por Frente amplio, Eugenio Trejos, quien ofreció disculpas por no estar enteramente preparado para referirse a consultas específicas del sector cultura.
Advirtió “sobre los peligros que están acechando a la cultura a partir de la implementación del TLC, empezando por las leyes de protección de la propiedad intelectual”. Dijo que artículos de ciertas leyes ponen en peligro el acceso a la cultura y entraban la difusión cultural, por lo que propone reformarlas.
Al comenzar la parte de preguntas del público se hizo evidente la molestia de artistas y trabajadores de la cultura, por la falta de propuestas concretas para los problemas que los aquejan. Entre otros, la actriz Karina Mora hizo notar cuán decepcionante era no haber escuchado una sola propuesta que presentara soluciones reales al sector de teatro.