Margarita es una mirada a la infancia, a la memoria y al sistema educativo. (Foto: Katya Alvarado)
La Compañía de Cámara Danza UNA ofrecerá al público una coreografía acerca de la infancia, la memoria, los procesos educativos y la “domesticación” social, del 30 de mayo al 1 de junio.
La obra dedicada a Margarita, la niña del poema “A Margarita Debayle” –del escritor nicaragüense Rubén Darío− y símbolo del niño que todos somos, se presentará en el Teatro de la Danza (ubicado en el Centro Nacional de Cultura) el viernes y sábado a las 8 p.m. y el domingo a las 6 p.m.
El montaje, por medio de la danza contemporánea y el estilo característico de su directora Vicky Cortés, aborda la infancia y los recuerdos prestando especial atención a la educación formal y a la “adaptación o inadaptación social” que esta produce.
La puesta en escena también examina la reiteración, “no como repetición formal, sino como un reflejo que se sigue reproduciendo generación tras generación”, y los hallazgos que despiertan en los seres humanos el “impulso original de vocación existencial”, que se desdibuja a través de la normalización impuesta, según explica la Escuela de Danza de la UNA en su sitio web. Las entradas para Margarita están ya disponibles en preventa en la Escuela de Danza, a un costo de ¢2000.
UNA CONSTRUCCIÓN COLECTIVA
Vicky Cortés explicó que, aunque la dirección de la coreografía estuvo a su cargo, surgió del proceso de trabajo conjunto con los intérpretes, pues se trabajó con mucha improvisación direccionada.
“El artista contemporáneo genera desde su propio acervo, por lo que la pieza se desprende de la relación entre lo que el director propone, lo que el intérprete propone y lo que vamos construyendo juntos”, dijo.
Estos artistas y co-creadores de la pieza son Irene Araya, Yul Gatjents, Mónica Sánchez, Sofía Solís, Kimberly Ulate, Lourdes Venegas y Jerry Vindas.
Gatjents, uno de los bailarines más jóvenes de la agrupación, comentó que en efecto la construcción de la pieza les ha dado mucha libertad para experimentar, ya que casi todo se ha construido a partir de la improvisación.
“Vicky nos da una directriz y nos deja trabajar, explorar. A veces eso nos produce un corto circuito, pero es muy rico porque nos obliga a buscar más adentro de lo que estamos acostumbrados. Este proceso ha sido buscar ir más allá y no quedarnos con lo que ya tenemos”, explicó
La Directora comentó que durante el proceso de construcción de la coreografía se trabajó mano a mano con el artista Adrián Arguedas, quien diseñó la plástica escénica, Alejandro Cardona, encargado del diseño sonoro, y Antonio Cordero, a cargo del diseño de iluminación, todos considerados “protagonistas” por la directora del montaje.
Debido a que la obra no es un relato ni una propuesta cronológica o anecdótica, Cortés opinó que la interpretación que se le da a la pieza dependerá de la experiencia de cada quien. “Las resonancias de la pieza para mí son distintas a lo que es para cada uno de los artistas, y serán distintas a la interpretación del público pues es un entendimiento que se genera desde la propia experiencia”.
La mejor agrupación del 2013
La Compañía de Cámara Danza UNA, que llevará Margarita al escenario del Teatro de la Danza, fue la ganadora del Premio Nacional al Mejor Grupo de Danza del 2013.
La agrupación es un programa profesional de la Escuela de Danza de la Universidad Nacional y está compuesta por siete integrantes, además de la productora Pamela Jiménez y la directora Vicky Cortés.
La compañía, según Cortés, está pensada para servir como experiencia profesional a bailarines que recién se egresan de la misma Escuela o de otros programas de danza, siempre que sean de nivel universitario.
El grupo desarrolla su trabajo desde el compromiso con el ser humano contemporáneo y su entorno, de modo que se enfoca en “temáticas acerca de la realidad latinoamericana, la trascendencia de lo individual a lo colectivo y el compromiso social con la población costarricense y el ser humano universal”.
Durante el 2013, la Compañía presentó varias obras de coreógrafos nacionales y mexicanos, además de tres estrenos de los coreógrafos internacionales Mark Sieczkarek (Alemania), Mónica Runde (España) y Eric Handman (Estados Unidos).
Bailaron también piezas del ecuatoriano Wilson Pico, la costarricense Florencia Chaves y obras propia de la directora de la agrupación.
Para Vicky Cortés, su trabajo más importante ha sido el de extensión, en vista de que les ha permitido llevar la danza a distintos rincones del país con talleres y presentaciones.
“Hemos estado en zonas como Barra del Colorado, isla Calero, etc., profundizando la proyección, las posibilidades de ampliar los lenguajes, de dar otras resonancias, de llegar a gente que no tiene acceso a este tipo de actividades. Es una cosa maravillosa porque es un público muy sensible, muy abierto, desprejuiciado y agradecido. Eso es un regalo para nosotros”, expresó la coreógrafa.
Para este 2014, la agrupación planea fortalecer este trabajo de extensión social y cultural, así como el desarrollo de varias giras internacionales, especialmente a Centroamérica.
