Por la falta de ¢700 millones de colones se postergarán las finales de los Juegos Deportivos Nacionales, por realizarse en Cartago el próximo año y que ahora serán desde el 4 al 10 de julio.
Hernán Solano, presidente del Consejo Nacional de Deportes y Recreación, aclaró a UNIVERSIDAD que los costos administrativos y de remodelación de las instalaciones ascienden a ¢1.000 millones, de los cuales ¢300 ya fueron dirigidos al Complejo Deportivo de Cartago, provenientes de un impuesto al cemento.
Sin embargo, la decisión de retrasar la competición, programada para enero, se debe a que el Ministerio de Hacienda todavía no gira una partida extraordinaria por el monto restante. Ello se debería al atraso de la aprobación del plan fiscal en la Asamblea Legislativa.
De esta manera el Instituto Costarricense del Deporte y la Recreación (ICODER), encargado de la organización, está obligado a reprogramar todo el calendario de las actividades de los atletas adscritos a los comités deportivos cantonales que compiten; incluyendo las eliminatorias que pasarían de setiembre de este año a enero del 2005.
La respuesta se vislumbra en adjudicar ¢1.500 millones anuales y plazas fijas para implementar un programa especializado en realizar los Juegos Deportivos Nacionales.
No obstante para que esto suceda hay que esperar a que el país alcance una época de «coyuntura económica», según explicó Solano, quien asevera que la decisión ya está tomada y solo faltan los fondos.
DESCONTENTO EN LOS COMITES
El reordenamiento de los calendarios de entrenamiento, los cambios en los montos presupuestados y hasta la desmotivación y el consecuente alejamiento de los atletas, son algunos de los inconvenientes que causa el retraso de seis meses en el calendario de los comités deportivos cantonales, según dijo Reynaldo Fernández Santana, director del área técnica del comité de San José.
Con estos motivos y ante la ausencia de una comunicación oficial del Instituto Costarricense del Deporte (ICODER), se reunieron el pasado 26 de agosto más de 20 representantes de distintos cantones que conforman la Unión Nacional de Comités.
En la cita se decidió formar una comisión encargada de esclarecer la situación de los juegos mediante una petición al ICODER sobre las fechas de eliminatorias y de finales, de manera que se puedan ajustar lo más pronto posible los planes de trabajo de los entrenadores que preparan a los atletas.
La comisión la preside José Luis Monge, vicepresidente del comité deportivo josefino, y además la integran representantes de Goicoechea y Esparza.
El aumento de las inversiones en la preparación de los atletas es uno de los obstáculos que afrontan los comités, puesto que la postergación de los juegos alarga el tiempo de preparación y presupone un adecuamiento del plan de trabajo.
Esto significa que los comités deben estirar su presupuesto por seis meses más y estarán expuestos a que muchos atletas se desilusionen por la falta de competencia y se alejen, según explicó Fernández, quien no deja de lado la posibilidad de que algunos comités decidan cerrar programas en distintos deportes por falta de dinero.
«Algunos comités cantonales por falta de recursos podrían ser incapaces de asumir la preparación y decidan interrumpir los contratos de los entrenadores; esos muchachos se quedarían sin actividad durante cuatro o seis meses», aseguró Fernández-
«Entonces durante todo ese periodo los jóvenes estarían expuestos a la deserción».
El continuo retraso de los juegos, aseveró Fernández, provoca que la competencia pierda fuelle como máximo encuentro de Costa Rica; de igual manera pierden imagen el ICODER y los comités.
FUERA EL FUTBOL
Otro motivo que molesta a los comités cantonales es la iniciativa de eliminar, después de la siguiente edición de los juegos, el deporte más tradicional de Costa Rica: el fútbol masculino.
Esta medida se mantiene en pie debido a que, según Solano, el fútbol trae muchos inconvenientes ya que los deportistas deben barajar opciones de otros torneos como juegos estudiantiles o de la Asociación Nacional de Fútbol Asociado (ANAFA).
Por su parte, la Unión Nacional de Comités, tomando en cuenta la rotunda negativa de la mayoría de sus asociados de dejar de lado el balompié, se opone a la propuesta y tratará el tema en el seno de la comisión integrada el 26 de agosto.
«Estamos en total desacuerdo», aseguró Claudio Oramas Rodríguez, director deportivo del cantón de Alajuela, refiriéndose al tema. «Creo que detrás de esto hay algunas federaciones interesadas».
De igual manera, Reynaldo Fernández considera que esta disciplina constituye el principal atractivo de los juegos para la prensa y la afición, de manera tal que su eliminación de la competencia significaría disminuir la atracción del evento.
PRINCIPALES AFECTADOS
Los deportistas nacionales son los que más pierden, es la visión conjunta de la mayoría de representantes de los comités deportivos encargados del área técnica.
El retraso de las finales de los juegos presupone todo un nuevo orden en los planes de los deportistas que competirían en las 15 disciplinas en Cartago 2005.
Todos los atletas estarían obligados a variar sus entrenamientos para lograr que el punto máximo de su curva de rendimiento coincida con el periodo designado para la competencia.
De igual manera, se socavan las expectativas de competencia de esos atletas y disminuyen las ilusiones de triunfo, aclaró Oramas.
Además, si los juegos pierden imagen ante los medios de comunicación y ante el público, disminuyen las opciones de promocionarse a muchos atletas de deportes no tradicionales que cuentan con estas competencias como sus únicas vitrinas.