Pruebas científicas, aplicadas a ciclistas en un experimento, demuestran que las bebidas energéticas no varían el desempeño de atletas. Esto en el marco del XI Simposio Internacional de Ciencias del Deporte.
Si usted creía que por consumir uno de esos atractivos envases de bebidas energéticas, lograría tener una mayor capacidad física para cumplir su rutina de ejercicios, es mejor que deseche esa idea porque dos recientes investigaciones coinciden en señalar en que no se producen cambios considerables en el rendimiento físico de atletas.
La primera, realizada por los costarricenses Mónica Umaña Alvarado y José Moncada Jiménez de la Escuela de Educación Física y Deportes de la Universidad de Costa Rica (UCR), se efectuó con ciclistas masculinos y consistió en comparar los resultados obtenidos entre un grupo de atletas que consumió una determinada bebida energética comercial y otro que consumió bebidas placebos (sustancias que carecen de acción terapéutica pero que producen efecto en las personas a las que se les suministran al creer, estas personas, que si poseen acción).
Los resultados fueron invariables en el tiempo promedio total entre los dos grupos a lo largo de tres pruebas intermitentes de 50 kilómetros, situación que se repitió en el esfuerzo promedio percibido en los deportistas entre un tratamiento y otro.
El otro estudio, desarrollado por el mismo Moncada en compañía de Adriana Carvajal Sancho, reveló, de igual manera, que determinada bebida energética comercial no tiene efectos variables en el rendimiento físico de los atletas. Esta se amplió al campo cognitivo para demostrar que tampoco afecta en el estado mental.
Las pruebas se realizaron con la misma técnica de dos grupos, uno al que se le suministró una bebida energética y otro al que se le dio a tomar una bebida placebo. Se aplicaron a 20 deportistas entrenados, quienes debían realizar una carrera de salto largo sin impulso, correr 100 metros planos y hacer fuerza prehensora de mano. También se hicieron tres evaluaciones cognitivas, que consistieron en medir el tiempo de reacción, la memoria a corto plazo y la escala de estados de ánimo.
Los efectos de bebidas energéticas sobre el rendimiento físico y cognitivo de atletas, fueron dados a conocer en el XI Simposio Internacional de Ciencias del Deporte, el Ejercicio y la Salud, organizado por la Escuela de Educación Física y Deportes de la UCR. Allí también se analizaron temas como el mercadeo en el deporte y la recreación, características físicas que se repiten en los finalistas olímpicos y el humor como medio de una vida sana.
El evento, que cerró la penúltima semana de octubre, se realizó en la Ciudad de la Investigación de la sede central de la UCR, con la presentación de conferencistas nacionales e internacionales de Brasil, Venezuela, México, España y Alemania.
En esta ocasión se desarrolló con el apoyo del Ministerio de Educación Pública con el fin de mantener su carácter didáctico y de capacitación para profesores y estudiantes de educación física en todo el país, aseguró Yamileth Segura, miembra del comité organizador.
La temática del simposio fue interdisciplinaria, abierta a áreas de interés aplicadas al deporte, la nutrición, el ejercicio, el acondicionamiento físico, la fisiología y la salud, entre otros. Todo centrado en cómo abordar y adaptar el contenido de la salud a las clases para que hacer conciencia en incluir el ejercicio como parte del estilo de vida cotidiano.
OTROS TEMAS
Las ciencias del movimiento humano, el efecto positivo de la natación en enfermos de asma, la mejora a través del ejercicio en la cognición de adultos mayores, ejercitación ergonómica para la oficina, adicción al ejercicio en mujeres y hasta el Tai Chi Chuan para mejorar la autoestima y la calidad de vida, son otros de los temas de mayor interés que se presentaron en el simposio.
En la conferencia expuesta por Pedro Carazo Vargas de la UCR, se conocieron los resultados de un estudio que demuestra como los adultos mayores pueden mejorar su capacidad mental al realizar algún tipo de actividad que incluya el componente aeróbico o de oxigenación a la mayor frecuencia semanal posible y con intensidad moderada en sesiones no mayores a los 75 minutos de duración.
De igual manera, en el taller impartido por Ligia Salazar Chavarría del Centro de Tai Chi Bambú Dorado, se dio a conocer la capacidad del Tai Chi Chuan (técnica de relajación que se basa en artes marciales) para cambiar positivamente la autoestima y el autoconcepto de las personas. Las personas en práctica de este arte logran aprender un estilo de vida, que integra factores de salud mental, hábitos de actividad física y un mejor manejo del estrés cotidiano.
