Pocas horas antes de enfrentar a la Selección de El Salvador en Ciudad Quesada y solo dos días después de ser derrotada por Perú, dos goles por cero – sexta caída de la tricolor en ocho presentaciones con el entrenador interino – Rónald González, el estratega habló con UNIVERSIDAD, no para justificar la cadena de traspiés, sino en procura de un poco o mucha reflexión de parte de quienes critican y cuestionan el flojo desempeño del equipo.
“Estamos en una etapa de probar y ver; de prueba y error en la que hemos dado oportunidad de jugar, cuatro, cinco o un solo partido a los futbolistas de mejor rendimiento en el campeonato nacional, para que se muestren y le exhiban al cuerpo técnico, para bien o para mal, de que están hechos.
No se crea que la mano de obra sea de buena calidad y sobra. No es así; no son muchos los jugadores del campeonato con rango de ser seleccionados. Para cada partido de fogueo, debo aceptar que se debe negociar con los clubes que cedan, no a todos los jugadores que el cuerpo técnico ocupa, sino que tenemos que alternar las convocatorias para que no se suspenda el campeonato.
Yo en ocasiones necesito seis jugadores del Saprissa y otros seis de la Liga, pero solo tengo derecho a tres por equipo, por el pacto que existe con los clubes, una situación incómoda y nada beneficiosa para el trabajo de la Selección, favor a los clubes que se va a terminar con Ricardo La Volpe”, manifestó González.
Rónald, que dejará este cargo interino a partir del 1 de noviembre, cuando asuma La Volpe la dirección técnica del seleccionado, indica que esta es solo una de las varias piedras que topa el seleccionado en el camino de su preparación.
“Me hubiera gustado trabajar estos partidos de fogueo con la base de la selección mundialista de Egipto y algunos de los legionarios. Así enfrentamos a Argentina, cuando perdimos 3-2; siete “egipcios” y cuatro legionarios, pero después no se pudo seguir. Varios mundialistas perdieron la titularidad en sus respectivos clubes; otros se lesionaron y otros fueron fichados en el extranjero en países lejanos que dificultan sus traslados. Trasladarse de Noruega o Dinamarca a Paraguay, son más de 20 horas de vuelo. En ocasiones desistimos de la convocatoria.
He tratado de consolidar a un jugador en determinado puesto, por ejemplo, Cristian Gamboa como defensor derecho. No dejo de convocarlo, lo hago titular, pero de pronto se marcha, se complica llamarlo. Por otro lado, campeonato empieza a destacar Geiner Mora, en el mismo puesto y se le da la oportunidad. Juega bien tres o cuatro partidos, luego baja el rendimiento. Son seres humanos.
Tenemos el caso de Josimar Arias: lo convoco, se lesiona, vuelve a ser llamado y necesita de más oportunidades, porque en Perú no jugó bien.
Me interesa dar seguimiento a Giancarlo González y de repente lo banquean en su equipo. Eso pasa con otros jugadores, de manera que es complicado armar este rompecabezas. Además, se trabaja muy poco, hay pocas horas de práctica. Prácticamente es citar, al avión, viajar y jugar con un par de entrenamientos. Lógicamente no se pueden esperar buenos resultados”, agregó el entrenador.
LA MANO DE LA VOLPE
“Debo ser honesto y decir que para este par de partidos en Perú y contra El Salvador, don Ricardo nos pidió convocar a varios jugadores que él quería ver.
El fue claro al afirmar públicamente que para este par de compromisos, no le interesaba observar a futbolistas como Bryan Ruiz o Álvaro Saborío, de quien ya sabe sus condiciones.
Nos pidió citar a determinados jugadores que se desenvuelven en el campeonato nacional y entonces, toca a estos probar sus credenciales. Don Ricardo sabrá si aprobaron o reprobaron el primer examen bajo su mirada en Lima. Tendrán (tuvieron) otra prueba ante El Salvador.
A la hora buena, el cuerpo técnico valorará el comportamiento futbolístico de estos jugadores en la cancha y desde luego, su comportamiento fuera de ella. Unos siguen; otros se quedan”, afirma González.
“Esto es un poco injusto, pero así es el fútbol. Un jugador puede venir bien en su club, y se cae con el seleccionado; lo convocan por su desempeño en el campeonato pero no pega con la tricolor. Por eso, repito lo del inicio. Son partidos para ver y probar, probar y ver.
El resultado es secundario y en esto, la prensa no tiene paciencia. Me critican y dicen que el equipo de Rónald González solo ganó un partido de ocho. Primero, este no es mi equipo. Es el equipo de todos y no analizan que se deben cambiar las alineaciones y citar a muchos jugadores por las razones aquí expuestas.
En su momento no hacía falta publicarlo, pero este grupo que fue a Perú, fue convocado en su mayoría por La Volpe. Quizá yo habría citado a otros jugadores. Ahora quien manda es don Ricardo. Yo termino y a partir de enero 2011, retomó las riendas del ciclo olímpico para jugar los Panamericanos en Guadalajara”, aclaró el entrenador mundialista.
A PURA LEGIÓN
Rónald sabe y así lo asegura al Semanario, de que para las competencias oficiales del próximo año, la Copa UNCAF en Panamá en enero y la Copa de Oro en los Estados Unidos en julio, Ricardo La Volpe convocará a un 80% de jugadores legionarios.
“Esto lo hacen la mayoría de técnicos en todo el mundo; se supone que los futbolistas de cada país que juegan en el exterior, son los de mejor calidad y la cosecha de costarricenses es numerosa”.
Repasamos con el joven estratega nombres y nos salen como dos alineaciones: Keylor Navas, Esteban Alvarado, Roy Myrie, Pablo Herrera, Cristian Gamboa, Gilberto Martínez, Pablo Chinchilla, Darío Delgado, Gonzalo Segares, Bryan Oviedo, Junior Díaz, Michael Umaña, Randall Azofeifa, Carlos Hernández, Michael Barrantes, Celso Borges, Cristian Bolaños, Bryan Ruiz, Alvaro Saborío y varios más.
“Le adelanto que para el 18 de noviembre que es fecha FIFA, ya Ricardo La Volpe le pidió a la Federación un partido de fogueo. Se está tratando de firmarlo con China; los costarricenses ahí verán como el nuevo entrenador, lo jugará con un 75% de legionarios y con ellos irá a la UNCAF.
Estos ocho o nueve partidos que me tocó dirigir como técnico de la Mayor, servirán de filtro para conocer cuantos de más de 50 futbolistas que se probaron, pasaron el examen. Para esto los vemos y los probamos”, concluyó González.
