Pese a la escasa colaboración de la empresa privada, los taekwondistas costarricenses siguen dando grandes demostraciones de talento y constancia en competencias internacionales.
El taekwondo es la disciplina marcial más practicada en Costa Rica, sobre todo por la proyección que le da a sus competidores de ir a Juegos Olímpicos.
El taekwondo es un deporte antiquísimo, sus orígenes se remontan alrededor de los años 50 antes de Cristo. En ese entonces era conocido como Taek Kyon y desde el principio fue muy influenciado por otras artes marciales, como el Karate japonés, del cual asumió sistemas y movimientos.
Este deporte, originario de Corea, se desarrolló paulatinamente, adquiriendo gran cantidad de adeptos. En 1957 fue bautizado con su nombre actual, Taekwondo (arte del puño o la patada o forma de vida con los pies y las manos).
En los años 60, apoyado con demostraciones alrededor del mundo, el taekwondo asumió gran relevancia gracias a su espectacularidad y se constituyó en 1973 la Federación Mundial de Taekwondo, la cual fue reconocida por el Comité Olímpico Internacional, en 1980.
El taekwondo alcanzó niveles sobresalientes en las Olimpiadas de Seúl 1988, cuando se constituyó en un deporte de demostración y se consolidó en las de Australia 2000 cuando pasó a ser deporte olímpico.
Se trata de un deporte espectacular, lleno de emociones y capaz de capturar el interés de cualquier persona, pero que aún no puede dar sus mejores golpes, debido a la falta de patrocinio. No obstante, los puntos se ganan peleando y los dirigentes del taekwondo se dieron a la tarea de ganar el combate con sus mejores movimientos.
Como el orden empieza en casa, la dirigencia se dio a la tarea de transformar la actual Asociación, en la Federación Costarricense de Taekwondo con el fin de organizarse mejor, atraer más participación y establecer una regulación más rigurosa. Ya todos los documentos se presentaron y será en unos tres o cuatro meses cuando se dé la transformación.
En estos momentos, la Asociación se compone de unas 40 agrupaciones y el número podría incrementarse, poco a poco, con el cambio, pues los grupos más pequeños serán beneficiados e incluso podrán aportar seleccionados.
«En estos momentos muchas personas se aprovechan del desorden imperante y sacan beneficios económicos sin gozar de las condiciones necesarias para hacerlo. La idea con establecer reglas y orden es terminar con esas acciones y borrar la mala imagen que algunos pocos han creado», comentó Pablo Alfaro, presidente de la Asociación Costarricense de Taekwondo.
Alfaro no se equivoca, pues existen al menos cinco mil taekwondistas activos en el país, de los cuales un 20% suele estar presente en los campeonatos nacionales, aunque el interés de la asociación es que cada escuela envíe un listado con el número de alumnos y algunos detalles de éstos, para disponer de datos más precisos al respecto.
Semejante número de practicantes benefician al deporte, pues a la hora de seleccionar, la exigencia es mucho mayor, de no ser así no se habrían ganado dos medallas de oro y dos de platas en los Juegos Centroamericanos y una de oro y dos de bronce en los Juegos Centroamericanos y del Caribe.
Además, los taekwondistas tienen muchas oportunidades de demostrar sus condiciones en campeonatos nacionales, procesos de selecciones y la promoción anual de cinturón negro (en el nivel interno), en los campeonatos Panamericanos y Mundiales de Taekwondo, así como certámenes como las Olimpiadas, Juegos Panamericanos, Centroamericanos y Centroamericanos y del Caribe.
ROCE INTERNACIONAL
Por ejemplo, para el 19 y 20 de julio está programado el Campeonato Nacional Infantil y Juvenil, el Panamericano del 13 al 16 de agosto en República Dominicana, el Mundial en Alemania del 24 al 27 de septiembre, los Juegos Centroamericanos Juveniles en octubre y del 11 al 13 de diciembre, en Francia, las eliminatorias para clasificar a los Juegos Olímpicos.
«Pese a tantas actividades, la falta de apoyo económico nos limita mucho las posibilidades de conseguir logros más sobresalientes, pues pese a la calidad con la que contamos, es muy difícil desarrollar programas firmes y duraderos», destacó Alfaro.
Costa Rica centra su interés en el trabajo del clasificado a los Panamericanos; Christopher Moitland (más 80 Kg.), sin olvidar a Paul Jiménez, (menos 80 Kg.), Kenneth Rodríguez (menos 68 Kg.), así como en los juveniles Hans Porras y Leonardo Mora.
«El taekwondo es el deporte de corte marcial más practicado en el país, sin embargo necesitamos crecer más y para eso necesitamos el apoyo de los medios de comunicación para interesar a más gente», acotó Alfaro, quien ya contabiliza tres años como jerarca de la Asociación y quien tiene la academia Yin Yang en Tibás.
Alfaro destacó que el taekwondo gana prestigio al ser deporte olímpico y porque sus reglas son las mismas en todo el mundo, no como otras disciplinas que suelen tener muchas estilos.
«Las principales metas del taekwondo son: crear la federación, establecer un reglamento, capacitar instructores y clasificar atletas a una Olimpiada», concluyó Alfaro.
SUS LEYES
Un combate de taekwondo suele ganarse por puntos, aunque también existen otras posibilidades de victoria como el nocaut, la descalificación, el abandono, la herida de algún participante, por la suma de puntos negativos, por la superioridad marcada del rival o por decisión arbitral.
Los puntos se suelen obtener con mucha dificultad; se puede sumar un punto por dar un puñetazo o una patada al centro del cuerpo, dos por patada a la cabeza o un salto con puñetazo a la cabeza y tres unidades por salto y patada a la cabeza.
El competidor suele perder un punto por cada tres llamadas de atención o un punto por golpear debajo del cinturón. Un control tan detallado solo puede ser llevado a cabo por seis árbitros (es el promedio), cuatro en las esquinas (escriben los puntos), uno al centro y el central en la mesa.
Para estructurar los combates se suelen fijar tres categorías: la C con un round, la B con dos y la A con tres. Cada round detenta una duración de dos minutos. El peso de los competidores (8 diferentes) es muy importante a la hora de conformar las categorías. El peso en la rama masculina va de menos de 50 a más de 80 kilogramos y las mujeres de menos de 43 a más de 70 kilogramos.
La evolución del taekwondista se define por medio del color del cinturón, el cual se obtiene por medio de un examen o en competencia. En la disciplina existen diez grados (colores del cinturón) que van del blanco al negro. Después de conseguir el cinturón negro vienen los dan, otros diez en total.