Dos victorias en 14 partidos confirman que este es el peor torneo de la Universidad de Costa Rica desde su regreso. Mientras Jonathan Hansen (amarillo) celebra el penal del triunfo, Jorge Ramírez (6, blanco) y José Mena (2, blanco) lamentan la ventaja que dejaron ir en Heredia (Foto: Club Sport Herediano).
En los últimos 20 minutos de juego el equipo deja escapar la ventaja.
Con cada fecha que transcurrre, las opciones de clasificación disminuyen para el equipo de la Universidad de Costa Rica en el torneo de Verano. Los triunfos, cuando llegan, aparecen a cuentagotas, y mientras el equipo celeste se estanca en sus puntuaciones, la distancia con el piso de clasificación sigue aumentando.
Si bien es cierto en casa rara vez pierden un compromiso, tampoco consiguen ganar, y por lo tanto allí no pasan de obtener un punto por juego en casa. Todavía si se hiciese la “media inglesa” (ganar en casa y empatar afuera), aunque sea invertida (empatar en casa, pero ganando afuera), se podría compensar y tener buenas opciones para pelear un boleto en semifinales. Pero no.
Más bien, cada salida del Ecológico o del Colleya Fonseca (sus dos casas durante todo el torneo 2014-2015, tomando en cuenta que el Ecológico nunca se habilita para recibir a Saprissa, Herediano o Alajuelense, y tampoco para partidos nocturnos o en época lluviosa) suele significar una nueva derrota para las huestes académicas. Esto hace que el equipo universitario permanezca estancado en la penúltima posición del Torneo de Verano con solamente 13 unidades en ya 14 jornadas, producto de solamente dos victorias, siete empates y cinco derrotas.
De los siete partidos jugados en casa el equipo solo ha ganado un compromiso, empatado cinco y perdido otro, lo cual le depara 8 de las primeras 21 unidades disputadas, y de paso le convierte en el segundo peor anfitrión del torneo, sólo por encima de Belén, con los 6 puntos que ostenta en este Torneo de Verano.
Y afuera, su balance cae a otro triunfo, dos empates y cuatro derrotas, para únicamente cinco puntos. Solo Municipal Pérez Zeledón y los belemitas han conseguido peores balances fuera de casa. Los generaleños solo tienen los tres puntos que sacaron en el Ecológico en la primera fecha. Todo lo demás lo han sacado en Pérez Zeledón y eso es lo que los tiene con buenas opciones de clasificar. El cuadro herediano, como se reseñó, todavía no consigue puntos fuera de “su” estadio, el Rosabal Cordero. Ni contra el verdadero dueño de la casa.
VENTAJAS QUE SE ESFUMAN
La última de las caídas se dio el domingo 22 de marzo en el Eladio Rosabal Cordero de Heredia, cuando el equipo académico confirmó dos fenómenos muy recurrentes en este torneo. Uno, que casi nunca consigue sostener una ventaja hasta el final, y el otro, que los últimos 20 minutos son los más fatídicos, ya que ahí es cuando reciben varios goles claves.
Víctor Gutiérrez y Allan Duarte firmaban lo que parecía ser un “Rosabalazo” debido a que ganaban 0-2 a un Herediano inyectado por su reciente victoria 3-0 sobre el América de México, a mitad de semana por la Liga de Campeones de la Concacaf.
Sin embargo, luego de que Juan Vicente Solís dejó ir un tercer gol para los académicos, se vino una espectacular reacción herediana y el desplome universitario. Dos goles de Jonathan Hansen y otro de Elías Aguilar, en medio de las dos anotaciones del argentino, devolvieron a la realidad a un cuadro universitario que todavía sigue esperando un triunfo a domicilio luego de seis salidas. Su último triunfo fuera de casa data desde el 25 de enero del presente año, cuando dieron cuenta del AS Puma en el Estadio Municipal de Pérez Zeledón. Ese día se impusieron 0-2.
Pese a ello, este no es el primer partido que los celestes dejan ir ventajas. Contra el Club Sport Uruguay dejaron ir otra distancia de dos goles en los últimos minutos, para al final obtener un empate 2-2. Contra el As Puma Generaleña, en el estadio Ecológico, también dejaron ir una ventaja de un gol en el minuto 72, y finalmente empataron 1-1.
Además, si bien es cierto han permitido solamente 17 anotaciones, apenas llevan 15 a su favor, por lo que su buena defensa se ve neutralizada por su falta de gol, clave básica para pensar en ganar un partido.
Para empeorar las cosas, la distancia en relación con la cuarta posición, compartida entre el Herediano (3°) y Pérez Zeledón (4°) ya subió a nueve unidades, cuando solo faltan 24 por disputar. Y a estos equipos hay que agregarles otros que les respiran en la nuca, como Uruguay y Santos (21 puntos ambos), Cartaginés y As Puma (18 cada uno) y Carmelita (17), clubes que todavía pueden ingresar en la carrera por las semifinales, si bien es cierto felinos y lecheros primero tienen que alejarse de la última posición de la tabla general acumulada.
ITINERARIO COMPLICADO
El itinerario faltante para los dirigidos por José Giacone de aquí a que termine el campeonato se antoja complicado.
El miércoles recibirá a las 3 p.m. a un Limón FC urgido de puntos, ya que llega como colista de la tabla general acumulada con 31 puntos. Los caribeños, además de un triunfo propio, esperarán que AS Puma y Belén no consigan la victoria en sus partidos a mitad de semana frente a Santos y a Carmelita, respectivamente.
Y el sábado la escuadra celeste tendrá que viajar al estadio José Rafael “Fello” Meza de Cartago para enfrentarse a las 8 p.m. a un Club Sport Cartaginés también urgido de puntos y de triunfos, pero con la finalidad de terminar de meterse en zona de clasificación.
Luego de ello, se le viene un abril harto complicado a los universitarios, pues su itinerario incluye otros tres juegos en casa, ante Santos de Guápiles, Uruguay de Coronado y Belén, y tres de visita, entre ellos dos viajes a Alajuela y un tercero a Tibás, en fechas por confirmar.
