UNCAF le dejó a Costa Rica dos cosas: el título y la ausencia de buen fútbol en la mitad del equipo.
Wílmer López, volante de Liga Deportiva Alajuelense y mundialista en Corea y Japón, resultó irreemplazable en la UNCAF; se gestiona su retorno a la Selección Nacional y si no se da, Steve Sampson debe trabajar mucho en esa zona del equipo
Costa Rica campeonizó en la VII Copa de Naciones UNCAF celebrada en la ciudad de Panamá y acumuló su cuarta corona en este tipo de competencias.
Estas últimas sustituyeron a los Centroamericanos de Fútbol en los que la Selección Nacional barría en los años 50 y 60.
Por ahí los historiadores del fútbol recuerdan marcadores como Costa Rica 8 Panamá 1; Costa Rica 9 Guatemala 1; Costa Rica 5 El Salvador 2, poco que ver con los triunfos, todos mínimos, logrados en esta Copa de la Unión Centroamericana de Fútbol, donde Costa Rica ganó cuatro partidos por el mismo resultado de 1-0 y empató otro 1-1 con los chapines, que fueron a defender el título y lo perdieron contra los nuestros.
Con el lauro en su bolsillo, la Selección Nacional se clasificó en forma invicta para el siguiente certamen, que es la Copa de Oro, por jugarse en julio en los Estados Unidos, aunque los aires de guerra obligan a la espera por si se hace necesario una variante en la sede y en la fecha y para esta competencia, mucho más fuerte y competitiva que la UNCAF. Sin duda que el técnico estadounidense, Steve Sampson, tendrá que hacer muchas mejoras a lo interno del plantel.
A la Copa de Oro, cuyas sedes serían Boston y Miami, acudirán doce países; los tres de América del Norte, tres de América Central, clasificados precisamente en UNCAF, Costa Rica campeón, Guatemala subcampeón y El Salvador, tercer lugar; dos selecciones de El Caribe; dos representativos patrios que fueron invitados por los organizadores al certamen: Colombia y Corea del Sur y dos equipos más que saldrán de un repechaje entre dos selecciones caribeñas y Honduras, que en UNCAF, le ganó por sorteo a Panamá el acudir a esta otra instancia.
REFORZAR CINTURA
Steve Sampson tiene mucho trabajo por delante y el punto medular que se debe fortalecer en la Selección Nacional es el mediocampo, sobre todo en la parte de apoyo: los constructores, los volantes creativos o enganches entre los que defienden y los que atacan.
Si bien es cierto, la línea de ataque no fue productiva en Panamá y solo anotó cinco goles en igual número de partidos, dos de Erick Scott, uno de Steven Bryce, otro de Walter Centeno y el último, golazo de tiro libre de Alonso Solís, creemos que Costa Rica tiene potencial de ataque en algunos jugadores que no fueron convocados por el estadounidense para esta competencia o, como en el caso de Winston Parks, que fue citado, pero el Lokomotiv de Rusia, no le dio permiso.
Winston Parks, Rónald Gómez y Paulo César Wanchope, cuando se recupere de su cadena de lesiones que lógicamente lo aparta de la Copa de Oro, pues se acaba de dislocar un hombro y estuvo fuera ocho meses por una cirugía en una rodilla, son referentes para fortalecer una línea de ataque.
Ahí dos jugadores muy jóvenes, Scott y Alejandro Alpízar, firmaron su continuidad con buen trabajo en UNCAF, donde se cuenta con Andy Herron, quien no se pudo soltar en esta competencia pero reúne credenciales de goleador; están también Rolando Fonseca y Steven Bryce, jugadores polifuncionales que se acomodan muy bien en ataque.
Costa Rica puede viajar a la Copa de Oro con Gómez, Parks, Scott, Fonseca, Bryce, Alpízar y Herron y todavía tienen opción los dos jóvenes goleadores del Saprissa, Alvaro Saborío y el ahora nacionalizado Víctor Núñez y hay mucho que ver en el campeonato nacional.
Delanteros sobran. Lo que no sobró y esa fue una de las grandes debilidades de Costa Rica en UNCAF fueron balones para los delanteros; los atacantes nacionales estuvieron ayunos de pelota, de bolas que les llegaran con ventaja posicional para encarar el marco rival.
De ahí la urgencia de reforzar esa parte vital de cualquier equipo que es su cintura y hacia eso vamos.
MUCHO TRABAJO
El retiro del seleccionado de Wilmer López, el mejor volante generador de fútbol del país, dejó un vacío en el equipo; después de participar en el Mundial Corea y Japón, el volante de la Liga decidió no volver a la Selección Nacional y acompañó a Erick Lonnis y Hernán Medford en el retiro.
Sin embargo, Sampson, consciente de que López le resulta prácticamente indispensable, anda a la caza de su eventual retorno y Wílmer, últimamente ya no parece tan definido en su negativa.
Si el «Pato» López regresa a la Selección Nacional y juega la Copa de Oro, el problema en la cintura del conjunto empezaría a solucionarse, mas esto por ahora es mera especulación.
El compañero de López en el mundial fue Walter Centeno y a este le tocó ocupar su función en UNCAF, trabajo que el «Paté» – jugador del AEK de Atenas que acaparó titulares de la prensa europea tras anotarle al Real Madrid y a la Roma en sus estadios por la Liga de Campeones de Europa-, no pudo cumplir a satisfacción.
Centeno no es titular en el equipo griego y viajó a Panamá sin ritmo ni continuidad, aparte de que su fútbol habitual es mucho más de marca y más retardado que el de Wílmer, lo que trajo problemas en la generación de juego para la delantera tricolor.
Costa Rica no generó fútbol en la UNCAF, y en cada juego se presentó una división entre la solidez de la zona defensiva y los aislados y solitarios atacantes. No hubo transición de la pelota, no se dio flujo de balón y este fue el punto más negativo del equipo y sobre el que se debe trabajar muchísimo, en busca de los jugadores que lo puedan cumplir a cabalidad.
No solo falló Centeno; el técnico Sampson le dio todas las oportunidades al joven Mauricio Alpízar, que no pudo con esa carga; a Alonso Solís se le dieron algunos minutos y es injusto juzgarlo, de manera que la generación de fútbol se concentró en Rolando Fonseca, quien lo hizo muy bien como enganche ante Honduras, en el propio Bryce que juega de todo y un poco en las subidas por el carril derecho de Try Bennett. Demasiado poco.
BUSCAR TALENTO
El técnico Sampson, ya sabe que cuenta con Rolando Fonseca, pero este hombre es mejor en ataque; sabe que Centeno puede mejorar; que Alonso es una opción y que Alpízar ya tiene horas de trabajo que no acumulaba antes de UNCAF.
Otros dos hombres del entrenador, se quedaron en el país por lesiones; Rayner Robinson y Jafet Soto. Habrá que ver en entrenamientos a futbolistas más consolidados en esta posición de volante de apoyo, como Wilson Muñoz, José Francisco Alfaro, Kenneth Paniagua, Julio Víquez, Wilbert Castro, Hugo Madrigal y también volver la mirada hacia las otras selecciones, la Sub 23 y la Sub-20 donde juegan jóvenes que como Cristian Bolaños y Warren Granados pueden aportar en creatividad, y Carlos Hernández y Cristian Badilla en marca.
UNCAF le dejó a Costa Rica dos cosas: el título y la ausencia de buen fútbol en la mitad del equipo.
Es de esperar que la conquista del primero, de espacio y tranquilidad ara laborar en lo segundo.