Aunque de entrada y con base en datos estadísticos duros, la Selección Nacional de Voleibol Playa femenina −representada por Karen Cope y Natalia Alfaro− obtuvo tres derrotas en igual cantidad de partidos, con un solo set a favor y seis en contra durante el Campeonato Mundial 2015 en Holanda queda la impresión de que las nacionales consiguieron superar las expectativas que sobre ellas se tenían, y que con mayor rodaje internacional los resultados pueden mejorar.
Ella compartieron una llave de juegos con otras tres parejas que, si bien no han sido nunca campeonas mundiales, tenían un mayor rodaje mundial a cuestas: las alemanas Kira Walkenhorst y Laura Ludwig, las eslovacas Natalia Dubovcova y Dominika Nestarcova y las polacas Jagoda Gruszczynska y Karolina Baran.
Las europeas mostraron su mayor roce ante las ticas y tanto teutonas como eslovacas necesitaron solo dos sets para acabar sus juegos contra las ticas. Sin embargo, las polacas sí tuvieron que trabajar tiempo extra para dejarse la victoria ante las nacionales, quienes las forzaron a jugar los tres sets.
Aun con los resultados negativos, las costarricenses hicieron un buen papel, pues ganaron puntos en momentos determinantes del juego y se plantaron ante las potentes escuadras europeas, a pesar de que todavía les falta trabajo físico y mayor precisión, dado que varios errores facilitaron que los partidos se definieran desde mucho antes.
Jugadoras demandan más regularidad
En territorio holandés, Natalia Alfaro expresó la necesidad de participar con más frecuencia en fechas de tours mundiales si se quiere lograr una mayor trascendencia internacional. “Estos tres equipos que nos topamos (Alemania, Eslovaquia y Polonia) vienen de jugar todas las fechas del tour mundial anteriores a este evento. Se necesita estar evolucionando con ellos si se quiere aspirar a más”, afirmó la jugadora herediana en declaraciones a la Federación Costarricense de Voleibol (Fecovol).
Alfaro agregó que “fue una gran experiencia para nosotras. Lo positivo es que cerramos con un buen juego; ahora, a cambiar el chip y enfocarnos en Juegos Panamericanos”.
Por su parte, Karen Cope mencionó a la Fecovol dos puntos en los cuales se debe mejorar, si se quiere progresar ahora en territorio canadiense: “aprender a llevar el marcador y cerrar lo mejor posible”.
Cope también mostró su agradecimiento a la afición que desde Costa Rica se hizo sentir con su apoyo hacia ellas, previo a su participación mundialista. “Nada como la motivación. ¡Qué mejor cuando viene de personas tan lindas y cercanas a nosotras, que también se han sacrificado y nos han acompañado durante todo este proceso!”, agregó en el perfil de Facebook de la Fecovol.
Por su parte, la entrenadora Ingrid Morales se limitó a catalogar el paso mundialista como “una experiencia maravillosa y de muchísimo aprendizaje”.
Ahora, sin tiempo más que para descansar unos días y volver a montarse en el avión hacia Canadá, para los Juegos Panamericanos Toronto 2015, las costarricenses tendrán que enfrentarse a las chilenas Francisca Rivas y Pilar Mardones, las brasileñas Liliane Maestrini “Lili” y Carolina “Carol” Horta, y las nicaragüenses Elia Machado y Lolette Rodríguez, con el fin de avanzar de ronda, aunque sea para la fase de eliminatoria previa a los cuartos de final.
En esta fase eliminatoria, los equipos que finalicen en segunda y tercera posiciones de cada uno de sus grupos se enfrentarán entre sí por cuatro boletos a los cuartos de final, para enfrentar en esta instancia a alguno de los cuadros ganadores de sus respectivos grupos, los cuales ya estarán sembrados en esta etapa.
El itinerario de las nacionales empezará el 13 de julio ante las chilenas, a las 10 a.m.; el 14 deberán enfrentar a las pinoleras, a las 10 p.m., y dos días después bregarán ante las poderosas cariocas, a las 9 a.m. Todos estos partidos se realizarán en el Chevrolet Beach Volleyball Centre de Toronto, Canadá.
Las costarricenses tienen como objetivo superar lo conseguido en Guadalajara 2011, cuando Alfaro −en aquel entonces con la hoy entrenadora del equipo, Ingrid Morales− fue una de las ocho parejas eliminadas tras perder ante México y Uruguay; tras derrotar a Nicaragua, finalizaron en la novena posición del torneo (entre 16 parejas), empatadas con otras tres parejas.
Las condiciones pintan para ello, ya que la chilena Rivas −aquella vez con su principal compañera, Camila Pazdirek− sucumbió en los tres compromisos; la misma suerte tuvo la nicaragüense Rodríguez en aquel momento con Amalia Hernández, aunque Rodríguez y Machado ahora hicieron un buen papel en el centroamericano.
Horta y Maestrini, por su parte, se muestran como las competidoras más fuertes del grupo, dado su mayor roce mundial. No obstante, vienen del Grand Slam en San Petersburgo, Rusia, y en él sus resultados estuvieron lejos de lo esperado, tras ser eliminadas apenas en la primera ronda.
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