El gobierno suspenderá desde mañana la entrega de visas temporales de tránsito a los nuevos migrantes cubanos que lleguen al país, luego de que fracasara este viernes un nuevo intento por crear un “corredor” que permita su paso por Centroamérica hacia los Estados Unidos.
La decisión fue anunciada por el presidente de la República, Luis Guillermo Solís, a su regreso de la reunión del Sistema de Integración Centroamericana (SICA) en San Salvador, en la que Costa Rica decidió retirarse de las entidades políticas del sistema alegando “falta de solidaridad” de países como Guatemala, Belice y Nicaragua.
La directora de Migración, Kattia Rodríguez, detalló que hasta el viernes se levantó una lista con 2053 migrantes cubanos que se encuentran en Paso Canoas, a las cuales se les darán las últimas visas de tránsito extraordinarias, que se suman a las 5.889 que se han entregado hasta el momento.
“Por favor no lleguen a territorio costarricense, si lo hacen, serán deportadas”, dijo el presidente Solís a los migrantes cubanos que estén en camino hacia Costa Rica, tras asegurar que el país no cuenta con las condiciones para recibir y atender a más personas.
El presidente reiteró que los migrantes cubanos que se encuentran ya en Costa Rica con una visa no tendrán problema para permanecer más tiempo en el país mientras esto se solucione, e indicó que tampoco su gobierno valora deportarlos a Cuba, como sí lo haría con las nuevas personas que intenten cruzar la frontera.
El mandatario se mostró visiblemente molesto por el rechazo en el SICA de una propuesta que sintetizó El Salvador antes de entregar al presidencia Pro Tempore del sistema, en la que se establecía la posibilidad de habilitar el paso por la región de los migrantes para que lleguen a su destino.
“Se los dije a los colegas presidentes, Costa Rica no puede participar en esas condiciones, en un sistema que ignora la solidaridad entre los integrantes del sistema, no todo pueden ser declaraciones y palabras en papel”, criticó Solís.
El gobierno aclaró que la suspensión de sus actividades políticas en el SICA no implica una salida del sistema regional, ni tampoco dejará de participar en los entes económicos como el Sistema de Integración Económica Centroamericana (SIECA); además de que seguirá negociando con los países involucrados de manera bilateral.
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