Apuntes sobre el péndulo de la historia

 A propósito de la sempiterna invisibilización delfeminismo revolucionario.“La era está pariendo un corazón”.La Revolución Francesa que se desencadena en laúltima década del siglo XVIII tiene su clímax imponentecon la toma de la Bastilla y el posterior aguillotinamientode la aristocracia y el clero parasitarios ysu régimen absolutista de Versalles, que hundía en lamás espantosa miseria al […]

 A propósito de la sempiterna invisibilización del
feminismo revolucionario.
“La era está pariendo un corazón”.La Revolución Francesa que se desencadena en la
última década del siglo XVIII tiene su clímax imponente
con la toma de la Bastilla y el posterior aguillotinamiento
de la aristocracia y el clero parasitarios y
su régimen absolutista de Versalles, que hundía en la
más espantosa miseria al llamado vulgo, bajo las cadenas
mentales de la Iglesia y el filo de la espada, desangrándolo
con tributos rapaces. Proeza que consumó
a fondo la dictadura revolucionaria de Robespierre,
Marat, Danton y los “montagnards” de izquierda.
Gesta en la que, con una frecuencia pasmosa, se
ignora o se subestima completamente el hecho que,
al mismo tiempo, un rico afluente de esa oleada histórica
revolucionaria (en el paroxismo de la revolución
democrático burguesa, en su hora heroica y audaz), lo
constituye el feminismo de la primera hora. Afluente
que también levanta su digna cabeza revolucionaria.
“Paso a la mujer trabajadora” (León Trotsky. El
Programa de Transición, 1938).
En efecto, en ese caldo de cultivo podemos encontrar
también el árbol genealógico del primer feminismo
moderno, desde Georges Sand y las heroicas
pescaderas parisinas (que son la vanguardia de la toma
militar de Versalles), cuya deriva más consecuente florece
con el feminismo obrero socialista posterior del
siglo XIX, que manifiestan líderes magníficas como la
comunera fusilada Luoise Michel, Flora Tristán, Clara
Zetkin, La Rosa “Roja” Luxemburgo, Ines Armand
y Alexandra Kollontai, entre otras.
Feminismo rebelde y subversivo igualmente traicionado
por la dupla de la burguesía y la burocracia
stalinista, y su defensa a ultranza de los privilegios
que les reporta el patriarcado.
Este feminismo consecuente no nace de ninguna
academia ni claustro universitario, ni ONG, sino
que es expresión teórico política de un movimiento
social vivo y de luchas obreras femeninas ejemplares,
que deben confrontar e integrar la lucha contra el
yugo doble de la explotación de clase, impuesta con
saña por el capitalismo y la lucha contra la opresión
de género, impuesta ancestralmente por su gemelo
de yunta: el patriarcado.
Ambas dimensiones medulares de este conflicto
estructural (de clase y de género) se refractan y combinan
al interior del movimiento obrero y popular,
por medio de la correa de transmisión de los agentes
pequeñoburgueses, burocráticos y patriarcales, en el
seno mismo del movimiento obrero y socialista.
Desde la huelga de las obreras de Petrogrado
que inició la revolución de Octubre de 1917 en Rusia,
hasta el levantamiento de las 10.000 costureras
en Estados Unidos, que encabezó la gran dirigente
sindical inmigrante: Clara Lemlich, así como la
anarcocomunista Emma Goldman, “abuelas” todas
precursoras del pensamiento y la obra en la segunda
posguerra, que expresan gigantes figuras como Lolita
Lebrón, Angela Davis, Clara Fraser y Gloria Martin.
“Dum spiro spero” (mientras haya vida hay esperanza).
Pese a toda la brutalidad y podredumbre capitalista-
imperialista en curso; en medio del nuevo
ascenso revolucionario que hoy se gesta y desarrolla
frente a nuestros ojos, las “primaveras” revolucionarias
y huelgas obreras del Medio Oriente y el Magreb,
las peshmergas kurdas, las perseguidas y escarnecidas
mujeres de la resistencia palestina y egipcia,
las revueltas en curso en Hong Kong, la emergencia
de un nuevo movimiento obrero en la costa meridional
de China, las huelguistas y okupas de Europa, las
Ante las “inexactitudes transgénicas” con que Valdez
et al. intentan fundamentar la ponencia de
“Creación de una Comisión Institucional de Biotecnología
y Bioseguridad Agropecuaria” (VUS-14,
goo.gl/JadNX5), me encuentro en la obligación de
rebatirlas para conocimiento, tanto de la comunidad
universitaria como de la sociedad costarricense
en general, y en especial para los plenaristas del VII
Congreso Universitario que tendrán que decidir sobre
esta próximamente.
En breve, la situación de los cultivos transgénicos
después de casi 20 años, es la siguiente: N.° de cultivos
= solo 11, de los cuales 4 acaparan casi 100% del
área cultivada (maíz, soya, algodón y canola). Uso
principal del maíz y la soya transgénicos = agrocombustibles
y alimento para animales (no para paliar el
hambre del mundo). N.° de países que los cultivan
= solo 27 (dos menos que en el 2011); donde solo
5 países abarcan 90% del área cultivada. Características
transgénicas de casi 100% del área cultivada
= resistencia a herbicidas (86%, principalmente al
cuestionado glifosato, goo.gl/9vCdpZ) y a larvas de
mariposas y escarabajos. Costo para obtener un cultivo
transgénico = ca. de US$ 135 millones (>100
veces al de otros métodos de fitomejoramiento).
Los cultivos resistentes a herbicidas no son una
buena idea, porque sus residuos tóxicos terminan
en los alimentos que nos llevamos a la boca (goo.gl/
j9YQdY). Además, por un efecto de presión de selección,
con el tiempo estas dos supuestas ventajas se
pierden a los pocos años en virtud del surgimiento de
resistencias (goo.gl/2PF6LM, goo.gl/joQiwt).
Según evaluaciones internacionales, no es cierto
que estos cultivos estén “… ligados a mejorar la productividad
(…) con un menor precio y mayores beneficios”,
como lo aseguran Valdez et al., sino todo
lo contrario (goo.gl/0NP5H1, goo.gl/4Ggg23).
Así también resulta falsa la afirmación generalizada
de que se pueda lograr un cultivo transgénico “en
mucho menor tiempo que el requerido por métodos
convencionales”, omitiendo referirse a la existencia
y ventajas de otros métodos de mejoramiento (goo.
gl/3jCVGi).
En cuanto a proyectos de cultivos transgénicos
en la UCR hay que decir que, después de poco más
de 20 años solo se ha logrado obtener un arroz y un
maíz transgénicos que difícilmente llegarán a manos
de los agricultores, dado que –entre otras cosas– no
completaron las etapas requeridas. Los proyectos
de melón criollo y tiquizque no pasaron de sus fases
iniciales. A pesar de lo anterior, y sin tener un solo
producto que ofrecer a la sociedad costarricense
que financia estas “investigaciones aplicadas”, están
trabajando ahora en la obtención de frijol, café
y tempate transgénicos, sin antes haber consultado
a los agricultores y consumidores, y a espaldas de las
señales negativas crecientes por parte de los mercados
internacionales (goo.gl/u3lJK5, goo.gl/y6aJxk).
Igualmente engañosa es la insinuación que hacen
los autores de la ponencia al sugerir que el Consejo
Universitario (CU) está a favor de estos cultivos. En
el pronunciamiento al que hacen referencia (“A propósito
de los transgénicos en Costa Rica”) omiten
mencionar que este acordó: “Solicitar al Gobierno
de la República declarar la moratoria al cultivo de
variedades transgénicas en Costa Rica, hasta que se
autodefensas mexicanas (como la de Olinalá, Guerrero,
que encabeza, la comandanta Nestora Salgado,
presa por el narco gobierno de Peña Nieto), las comunidades
zapatistas, y las y los estudiantes del Instituto
Politécnico y de la UNAM que hoy, tal como
ante la masacre de Tlatelolco de 1968, se levantan,
así como las mujeres de los pueblos originarios de
América Latina, África y Oceanía, las trabajadoras
maquileras sobre-explotadas de India, Bangladesh,
Pakistán, Haití, El Salvador y Honduras, las luchadoras
por vivienda digna y del Movimiento de los
Sin Tierra, las obreras de las fábricas recuperadas
(como las ceramistas de Neuquén, Argentina) y de
las asociaciones de lucha campesina, las jóvenes estudiantes
chilenas y colombianas en lucha por la educación
pública y transformadora y en general, todas
las decididas y valientes luchadoras obreras y populares
del mundo. Confiamos se conviertan en la levadura
y el fermento de una nueva oleada de liderazgo
y movimiento feminista socialista contemporáneo.
Apostamos con optimismo en ese sentido.

[delipress_optin id="134623"]

Otros Artículos

El quinto grafiti –el de la alquimia siglo XXI, podemos encadenarlo con lo que es y lo que no es, pero que a la vez ...

Se están cumpliendo los 50 años del establecimiento de los Servicios de Orientación en Costa Rica. Se inició en algunos centros educativos en la Sección ...

Cada profesión cuenta con cierto marco metodológico para producir conocimiento y, hasta cierto punto, para tomar decisiones dentro de su ámbito de acción. Las profesiones ...

El proyecto del Laboratorio Portátil permite a estudiantes de colegio utilizar equipo de laboratorio de alta tecnología, para analizar –por ejemplo− muestras de ADN.

Querido amigo: ¿Te acordás dónde escuchamos por primera vez algo de Joaquín Sabina? Al menos yo lo recuerdo como si fuera ayer. Estábamos en aquella ...

La tercera edición terminó con una gala de clausura en la que se premió a filmes nacionales e internacionales. Muchos de los premios quedaron

Un grupo de jóvenes indígenas Bri-bri se manifestaron ayer en la Fiscalía de Asuntos Indígenas para pedir la liberación del dirigente comunal Sergio Rojas,

En conmemoración de los veinticinco años de fundados los colegios científicos costarricenses (CCC), el Dr. Víctor Buján, uno de sus principales gestores, rememora, en Página ...
Semanario Universidad