El aspirante presidencial de los infumables, señor Araya, susurra que su partido ha cometido errores y él va a corregirlos, pero el desafío no está en los errores, sino en el camino elegido desde la primera presidencia de Óscar Arias por el que se hace llamar PLN. Es la ruta del “fin de las ideologías” y del “gato eficaz”, ocurra lo que ocurra socialmente. Trocha del crecimiento económico sin cautela social alguna. Política productora de poblaciones sobrantes en todo el mundo y capaz de destruir, quizás irreversiblemente, el vigor del planeta para sostener la vida en él. ¿Qué hará con este camino Juanito? Porque tampoco es fácil contenerlo o alterarlo. Si lo pretendiera, tendría que edificar una fuerza con los rivales que él afirma liquidar con campañas del miedo de las que se jacta.
Araya narra que enfrió a Villalta arrojándole chavismos, comunismos y extremismos. Dice congelará a Solís por ser ficha nueva, o sea sin experiencia en robar. Para Juanito, no tener historial de robo y clientelismo incapacita para gobernar. Araya habla de lo que ha hecho el PLN por el país y apunta acciones de Figueres Ferrer, Oduber y Luis Alberto Monge. Pero las “figuras” del PLN de hoy tienen rostro de Eduardo Doryan, Anabel González y Figueres Jr. y en sus instituciones destaca un fosco Ministerio de Obras Públicas y Transportes. El PLN actual pone rieles al desahucio del carácter de la Caja Costarricense de Seguro Social. Como sentencian, entre otros eructos, los opulentos: “Cada quien merece la salud que puede pagar”. Se refieren no solo a individuos sino a pueblos. Contra ese camino hay que trabajar. Johnny es romero de ese camino. ¿Se atreverá? Su “campaña del miedo”, que descalifica enemigos y no opositores en justas democráticas, o sea institucionales, dice que no. ¿Le entrará a la otra lacra, el clientelismo? ¿Podrá hacerlo sin apoyarse en el PAC, el FA y en la ciudadanía decente? Araya ni siquiera acepta exista el punto. Es invento extremista.
Otra mención. Entre quienes estiman Juanito será nuevamente derrotado surge la idea de paralizar/destruir un eventual gobierno PAC sumando votos y concupiscencias de legisladores infumables, a quienes se llama de “centro derecha”. PLN, PUSC y ML sumarían 29 escaños y podrían gobernar desde el Congreso (J. Guardia: LN: 11/02/2014). Otro jactancioso ronquido de quienes desean mantener la caca existente. La Asamblea es un espacio político complejo que se debe trabajar políticamente. No es solo un rejuntado de números y mociones. En casi todos los hoy infumables existe un ciudadano honesto. Revivirlo para beneficio de todos y del mundo es por lo que vienen votando los costarricenses. Será inspirador y extraordinario lo sigan haciendo.