Se aproxima el 8 de mayo. La administración de los Arias Sánchez llega a su fin. Al menos formalmente, porque no hay duda de que su proyecto neoliberal y privatizador lo continuará su ahijada política: Doña Laura Chinchilla.
Pues bien, no es que uno sea malo, ni burlón, ni resentido social, ni mal educado, ni egoísta, ni nada de lo que algún neoliberal vende patrias pueda pensar. No, nada de eso. Lo que sucede es que los hechos de los Arias Sánchez nos llevan a proclamar que esta administración pasará a la historia como la más nefasta y descarada de la historia costarricense.
“Por sus hechos los conoceréis” reza la sentencia bíblica.
Es muy triste y lamentable para nosotros, los educadores y las educadoras, promover en las aulas la ética, la moral, el respeto por la jurisprudencia, la tolerancia, el compromiso por los que menos tienen, los valores y muchas cosas más, cuando las más altas autoridades “se pasan por el trasero” la legislación costarricense. Para muestra algunos botones: La Sala cuarta y la reelección presidencial, el memorándum del miedo de Sánchez y Casas, bonos chinos, Crucitas y la minería a cielo abierto, el casi regalo de la Playa Cabuyal, los dos millones de dólares en consultorías del Ministro del tugurio y el osito, los helicópteros del ICE de PPQ, las compras descaradas de La Comisión Nacional de Emergencias del señor Gallardo, concesiones de obra pública, el acueducto de Sardinal, el narcotráfico y el financiamiento electoral, los avionetazos de doña Maureen, Ofelia y la Defensoría de los Habitantes, los almuerzos y la champaña de doña Clara, 51 millones en licores, el descaro de los timbres de la Embajada en Nicaragua y el ahora diputado, las consultorías del BCIE y la Casa Presidencial, nombramiento de parientes y, por último, la compra descarada de terrenos del IDA a gente de escasos recursos por parte de quienes nos gobiernan. Y si quieren saber más de corrupción y de violación a la legislación costarricense lean “El libro oculto de los Arias” que navega en Internet, el cual considero, aunque nadie lo firme, un documento histórico de gran valo,r pues todo lo que ahí se dice se puede documentar con hechos reales.
Hay algo que no se le puede negar a esta nefasta administración. Lograron armar una estructura tan perversa y degenerada que hicieron que en la pasada campaña electoral cientos de miles de costarricenses siguieran “chupándose el dedo”. De esa forma podrán seguir vendiendo, como si fueran bienes de difunto, las instituciones del pueblo costarricense, violentando todas las leyes y silenciando cuanta corruptela cometen muchos de los suyos.
Pero, lo peor de todo es que a ellos y a ellas no les importa hacer lo que sea con el fin de lograr sus objetivos económicos. El último descaro fue la compra desvergonzada y pública que hicieron de los trabajadores de JAPDEVA. Amparados en un pequeño grupo de liberacionistas y oportunistas, los Arias Sánchez y sus jaurías empresariales, unidas a un remedo de Ministerio de Trabajo, reconocieron a un grupúsculo de dirigentes liberacionistas, que trabajan en JAPDEVA, como nueva Junta Directiva de SINTRAJAP. El pago que reciben estos dirigentes liberacionistas y del gran capital es la suma de $137 millones de dólares. Con dirigentes como estos ya sabemos lo que le espera a Limón.
Decían mis ancianos padres que “el que siembra vientos cosecha tempestades”. Seguramente por esta razón el presidente de ustedes, Óscar Arias, dice que le gustaría ser un congresista canadiense. Claro, cuando alguien se rodea de tanto desvergonzado, cualquiera corre el riesgo de que en algún momento lo apuñalen por la espalda. Por eso es mejor soñar con tirarse del barco antes de que este se hunda. Considero que don Óscar debería preguntarles a los canadienses si allá aceptarían de congresista a un individuo como él. No vaya a ser que más bien se sientan ofendidos.
Y para concluir, aunque no quiero ser “ave de mal agüero”, parece que la nueva presidenta va por el mismo camino que su maestro. Nombró en un alto cargo internacional a una persona que supuestamente, dicen algunos, chocó su carro en estado de ebriedad en pleno San José y luego, al parecer, intentó darse a la fuga. Aparte de eso, doña Laura apoyó a una serie de diputados electos todos supuestamente cuestionados por una serie de situaciones escandalosas. Como dice la sabiduría popular: “de tal palo tal astilla” o “hijo de tigre nace pintado”. Lo único que queda por decir es que la Virgen de los Ángeles se apiade de la gente honesta y pobre de este país… Amén.
