Se inicia la segunda parte del curso lectivo, más de un millón de estudiantes vuelven a llenar las aulas y los pasillos de nuestras instituciones con sus risas y sus caras sedientas de conocimiento.
¡Y qué suerte que vuelvan, que no se queden a mitad de camino, donde se pierden la ilusión y la esperanza!.
El Programa Avancemos ha reducido la deserción de colegiales, gracias a él, en el último año, 3000 estudiantes lograron mantenerse en las aulas. Y reconociendo su relevancia, el gobierno incorporó dentro del Plan Escudo la ampliación de los beneficiarios a 150.000 mil para este año.
Pero convencido de que todavía había que hacer más, para que hasta los jóvenes de más bajos recursos pudieran seguir estudiando y labrando su futuro, he presentado un Proyecto de Ley para darle rango legal al Programa Avancemos. Se trata del Proyecto “Ley para Promoción de la Erradicación del Trabajo Infantil y Adolescente mediante el Derecho Real de acceso a la Educación”, expediente 17 405.
Este proyecto garantiza la sostenibilidad presupuestaria al programa y propone algunas reformas para facilitar a sus beneficiarios el acceso a estudios superiores. Porque el objetivo es precisamente que el Programa Avancemos deje de ser una Política de Gobierno, y se convierta en una Política de Estado.
La idea nació hace un año cuando inicié la búsqueda de un mecanismo que contribuyera con la erradicación del trabajo infantil y adolescente en nuestro país.
Tras varios análisis llegué a la conclusión de que el Programa Avancemos, implementado por el Premio Nobel de la Paz Dr. Óscar Arias Sánchez, constituye una herramienta eficaz, aunque no la única, para acabar con este depredador de los sueños de muchos menores, llamado trabajo infantil.
El Proyecto mantiene el esquema tal y como fue diseñado por esta administración, es decir, como una ayuda económica a familias pobres, vulnerables y en riesgo, contribuyendo a mantener a los adolescentes dentro del sistema educativo para que concluyan la secundaria. También se mantiene al IMAS como responsable de la administración de los recursos destinados a tal fin.
Pero lo más novedoso es la incorporación de elementos que faciliten la continuidad de los beneficiarios del programa en estudios superiores, mediante una norma para que el INA le dé prioridad dentro de sus ofertas educativas a los beneficiarios de Avancemos graduados de secundaria.
Además se incluyen reformas a la Ley del CONESUP para que las universidades privadas que soliciten permiso de funcionamiento a partir de la entrada en vigencia de la Ley, incluyan un porcentaje de acuerdo con su capacidad de población estudiantil, para que estos beneficiarios puedan ser considerados de manera prioritaria, para el otorgamiento de becas completas. Asimismo, se reforma la Ley de FONABE para que también sean considerados de forma prioritaria para el otorgamiento de becas para estudios universitarios.
El presente proyecto, también, modifica la Ley de la Comisión Nacional de Préstamos para la Educación CONAPE, para que esta institución tenga oficinas en todo el país para que sea más accesible a los jóvenes de las zonas rurales.
Para finalizar recordemos el pensamiento del ilustre libertador Simón Bolívar: “Las naciones marchan hacia el término de su grandeza con el mismo paso con que camina su educación”.