Los funcionarios del Segundo Circuito Judicial en Goicoechea no pueden llegar en bicicleta al trabajo, como sí lo hace este cuidacarros en los alrededores del edificio. (Foto: Katya Alvarado)
La administración del Segundo Circuito Judicial de San José, ubicado en Goicoechea, prohibió a una de sus funcionarias llegar al trabajo en bicicleta, pese a los beneficios ambientales y de salud que conlleva este medio de transporte.
La funcionaria Diana Rodríguez se vio sorprendida cuando al llegar por primera vez a su trabajo en bicicleta, con el objetivo de reducir sus tiempos de desplazamiento y mejorar su salud, la administración le envió un correo prohibiéndole volver a llegar en bicicleta.
Pese a que la funcionaria envió consultas a la Comisión Ambiental del Poder Judicial sobre su caso, fue hasta el mismo día en que UNIVERSIDAD hizo consultas por medio de la Oficina de Prensa, que a Rodríguez se le llamó a una reunión para darle solución a su problema.
“PROHIBIDO LLEGAR EN BICICLETA”
El 11 de febrero, la funcionaria Rodríguez decidió llegar por primera vez a su trabajo en bicicleta, dado las ventajas que esto le representa tanto en tiempo de llegada, como en salud física y el evitarse el estrés que provocan las largas presas de vehículos en horas de la mañana.
Al llegar, se dio cuenta de que el edificio del Segundo Circuito Judicial en Goicoechea no cuenta con un sitio para aparcar las bicicletas, mientras que al intentar ingresar al edificio en busca de un lugar para guardar el vehículo, le fue prohibida la entrada.
“Luego de una discusión ingresé y aparqué mi vehículo dentro del edificio, en una zona que se utiliza solo por las noches (turno extraordinario); a medio día recibí un correo del administrador del despacho, en el que se me indicaba que solamente se me autorizaba a ingresar la bicicleta por ese día, y se me negaba introducirla en adelante”, comentó Rodríguez.
Ese día, ella recibió un mensaje por correo electrónico de Andrey Rojas, administrador del Juzgado Penal Turno y Juzgado de Flagrancia del Segundo Circuito Judicial, en el que se le indicaba que “a partir del día de hoy no hay permiso de ingresar al edificio en bicicleta, tal y como se autorizó el día de hoy. Gracias”.
Rodríguez recurrió a la ayuda del administrador del Segundo Circuito Judicial, Fernando Retana, para pedirle un lugar en el sótano para estacionar la bicicleta, pero le respondió que en el edificio están terminantemente prohibidas las bicicletas y “no se autoriza el ingreso al sótano”.
Para el abogado Jorge Mora, de la Asociación Regional Centroamericana para el Agua y el Ambiente (ARCA), organización que trabaja en la promoción de la bicicleta como medio de transporte amigable con el ambiente, el Poder Judicial y todas las instituciones públicas están obligadas a brindarles espacios de parqueo, tanto a sus funcionarios como a los usuarios.
Según el artículo 118 de la Ley de Tránsito, el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) está obligado a promover lugares adecuados para estacionar las bicicletas en edificios públicos.
Consultado por este caso, el administrador del Segundo Circuito Judicial, Fernando Retana, dijo a UNIVERSIDAD que a Rodríguez se le permitió en primera instancia guardar su bicicleta en el edificio, pero se le indicó que no se podía en futuras ocasiones, pues este no cuenta con condiciones para que todos los funcionarios lleguen en este medio de transporte.
“La compañera en mención solicitó permiso para poder parquear en el sótano; sin embargo, no contamos con espacio; al respecto y con el fin de que ella y otros compañeros puedan utilizar este tipo de vehículo para desplazarse, tenemos proyectado para la primera quincena de marzo realizar en la parte norte, cerca de la caseta, un aparcadero de bicicletas”, detalló Retana.
Rodríguez confirmó que sostuvo una reunión con la Administración, en la que se comprometieron a habilitar un espacio para el adecuado parqueo de las bicicletas.
