Vigesimoprimer Informe Estado de la Nación

Administración Solís tuvo la más baja eficacia legislativa de los últimos cinco gobiernos

De 312 proyectos que presentó el Ejecutivo en sesiones extraordinarias, solamente 8 lograron aprobarse, para una efectividad de solo un 2,5%.

La cantidad de proyectos de ley aprobados por la Asamblea Legislativa durante su primer año de gestión en la presente legislatura revela una muy escasa productividad en las actuales bancadas legislativas, y señala el poco tino con el que el poder Ejecutivo ha manejado el periodo de sesiones extraordinarias.

Así se muestra en el vigesimoprimer Informe Estado de la Nación, en cuyo capítulo político se hace un análisis comparativo de lo hecho por los diputados y el gobierno del presidente Luis Guillermo Solís durante sus primeros 12 meses al frente del país, en comparación con el primer año de administraciones anteriores.

El coordinador de este capítulo, Steffan Gómez, explicó que en el análisis de los “poderes” que tiene el Ejecutivo para gobernar, se muestra un índice que mide su capacidad de afectar la agenda legislativa y Costa Rica aparece con uno de los niveles más bajos de la región.

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“Si a eso le sumamos el paso del bipartidismo al multipartidismo, vemos que el Ejecutivo ha perdido terreno. Al revisar la aprobación de leyes según si eran iniciativa del Ejecutivo o del Legislativo, se ve que en el periodo bipartidista la distribución era casi mitad y mitad; conforme se formó el multipardismo, hoy es 70% para el Legislativo y 30% para el Ejecutivo”, detalló Gómez.

Para el experto, es claro que ni el gobierno ni los diferentes partidos representados en la Asamblea Legislativa han logrado conformar las coaliciones necesarias para hacerse de una mayoría que permita gobernar, como hacen en otros países donde inclusive la cantidad de partidos es mayor.

“Francia entre 2012-2017 eligió 31 partidos políticos (577 miembros), ninguno con mayoría, pero formaron siete coaliciones parlamentarias para formar grandes bloques”, comentó.

Poca efectividad

Las barras más altas en estos gráficos representan a los políticos que más tiempo han dominado los puestos de representación y poder en los partidos políticos desde 1982.
Las barras más altas en estos gráficos representan a los políticos que más tiempo han dominado los puestos de representación y poder en los partidos políticos desde 1982.

En el caso del gobierno del presidente Luis Guillermo Solís, durante su primer año mostró una efectividad muy baja en el manejo de la agenda de proyectos de las sesiones extraordinarias (periodo que corresponde al Ejecutivo en la propuesta de proyectos), pese a ser el gobierno que mayor cantidad de iniciativas convocó para un primer año en comparación con los seis gobiernos anteriores.

El gobierno de Solís convocó en sus primeros 12 meses un total de 315 proyectos, muy superior a los 187 de Laura Chinchilla (2010-2014), 175 de Abel Pacheco (2002-2006) o los 150 de Óscar Arias (2006-2010), pero al final solo se lograron aprobar 8 proyectos de ley, para un porcentaje de efectividad solo un 2,5% (ver gráfico), el más bajo de los últimos 25 años, donde gobiernos como el de Figueres y el de Chinchilla alcanzaron cifras cercanas al 35%.

“El manejo de las sesiones extraordinarias parece no haber sido el óptimo, considerando además que está en una etapa de multipartidismo y necesita coaliciones”, valoró Gómez.

Pero el trabajo de los diputados durante este primer año tampoco se escapa de recibir una mala calificación, pues al revisar el total de iniciativas de ley aprobadas durante este primer año, se tiene que solo se registraron 47 aprobaciones, lo que está lejos de lo hecho en las primeras legislaturas de gobiernos anteriores, como los 74 proyectos aprobados al iniciar la administración Pacheco y muy lejos de los 113 votados favorablemente al inicio del gobierno de Laura Chinchilla.

Además de la baja productividad, el Estado de la Nación señala que tras realizar una consulta con expertos y sectores para preguntarles sobre cuáles son los temas que deberían ser prioritarios en la aprobación de la legislación, al compararse con lo hecho por esta Asamblea Legislativa, se muestra que el 91% de los temas relevantes quedaron por fuera.

“Si uno fuera diputado, hay un balde de temas que la sociedad civil los está pidiendo para aprobarlos y empezar a mejorar la legitimidad del Congreso, que no se están aprovechando y eso no pasa desapercibido para la ciudadanía”, añadió Gómez.


 

Sergio Alfaro, ministro de la Presidencia:

“Es evidente que la Asamblea Legislativa está muy fragmentada”

El ministro de la Presidencia, Sergio Alfaro, considera que la alta fragmentación de la Asamblea Legislativa afecta su productividad.
El ministro de la Presidencia, Sergio Alfaro, considera que la alta fragmentación de la Asamblea Legislativa afecta su productividad.

Para el ministro de la Presidencia, Sergio Alfaro, las bajas cifras de productividad que muestra la Asamblea Legislativa tanto en periodo de sesiones extraordinarias, como en sus periodos ordinarios, se deben a la dificultad que impone una alta fragmentación partidaria.

“Es evidente que esta es la Asamblea Legislativa más fragmentada que hay en los últimos 60 o 70 años. Desde hace mucho no había un Congreso tan fragmentado, no solo en la cantidad de partidos políticos, sino también, que la mayoría de partidos no son cohesionados hacia adentro, lo que hace más difícil el manejo legislativo sin ninguna duda”, dijo Alfaro a UNIVERSIDAD.

El ministro también reconoce la dificultad que existe en el país de concretar coaliciones políticas, que,  en su mayoría, han sido solo coyunturales, lo que pone cuesta arriba el trabajo de negociar y alcanzar acuerdos.

“Hay un tema importante que habría que analizar, aparte del número de leyes, y es el tipo de leyes que se están aprobando. Fui diputado y entiendo perfectamente que hay sesiones de la Asamblea en las que se pueden aprobar 40 proyectos de ley en una sola sesión, porque no tienen alto grado de conflictividad, como transferencias de propiedades”, comentó Alfaro.

El ministro considera que también se debe valorar el trabajo de avance que se realiza en los distintos proyectos de ley y no solo su aprobación final para valorar el trabajo legislativo.

Alfaro, quien es ministro de la Presidencia desde mayo de este año al llegar en reemplazo de Melvin Jiménez, asegura que para este segundo año las cifras en cuanto a proyectos serán mejores.

“Creo que de lo que pasó en agosto, los números son buenos, hubo 6 proyectos en primer debate, en un mes donde hay 11 sesiones de plenario y avanzaron 40 proyectos. Tuvimos buen agosto y no dudo que lo haremos bien en diciembre”, concluyó.


 

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