Johnny Araya, Alcalde de San José.

El hecho de que no solo se podría ampliar la cantidad de torres de telefonía celular, sino que se abriría la posibilidad para construir otro tipo de infraestructura de telecomunicaciones, son las principales preocupaciones alrededor de una reforma planteada por la Alcaldía de San José al “Reglamento de Telecomunicaciones y Afines” de este cantón.

A lo anterior se suma la falta de una “clara justificación” de la propuesta, así como que solo se atienda específicamente lo relativo a la infraestructura de telecomunicaciones, pero que no se establezca nada respecto al tema de la salud de los habitantes y que buena parte de la población aún no conoce la iniciativa, criticó Daguer Hernández, regidor del Partido Acción Ciudadana (PAC) en ese Concejo Municipal.

El regidor llamó la atención al hecho de que la reforma adiciona el término “infraestructura, estructura o equipo para telecomunicaciones” desde el artículo 1. “Es la gran modificación; se trata de un término que aún no tengo claro a qué se refiere a nivel técnico, pero parece referirse a lo que se procede a regular en el resto del reglamento: cables, conductos y demás”, apuntó.

“Me imagino que por la alta densidad de población de San José, algunas empresas de telecomunicaciones han requerido instalar más antenas u otras formas de ampliar su señal; entonces se incluye en la reforma algo que todavía desconocemos, porque en otras municipalidades no se han hecho este tipo de modificaciones para que tengan mayor cobertura”, explicó.

Según Hernández, “si uno lee detenidamente, ve por dónde va la procesión y puede ser que el reglamento tenga el propósito de meter una cantidad de torres nuevas”.

Recordó que hace alrededor de un mes se presentó una moción para votar la propuesta, y desde entonces los diferentes regidores analizan el proyecto,  aunque aún “no se ha organizado ningún foro ni actividad, ni ha venido nadie a explicarnos por qué se va a cambiar el reglamento”.

Por su parte, el alcalde Johnny Araya defendió la necesidad de la reforma pues el reglamento debe ser actualizado (Ver recuadro).

En febrero pasado, Araya informó al diario La Nación que la empresa de telefonía celular Claro había ofrecido $1 millón (unos ¢503.340.000 a ¢503,34 el dólar) para financiar la organización de los Juegos Centroamericanos que se realizarán en marzo del año entrante.

“NO SE HA INFORMADO”

El actual “Reglamento de la Municipalidad de San José de ubicación y otorgamiento de licencias constructivas para infraestructura de telecomunicaciones” fue publicado en La Gaceta en setiembre del 2010 y en él no se menciona específicamente ninguna medida de protección a la salud de los habitantes, más allá de establecer que el interesado en construir este tipo de obras debe contar con permisos de diversas instituciones, como el Ministerio de Salud o el Ministerio de Ambiente, Energía y Telecomunicaciones (MINAET).

La reforma -denominada “Reglamento de Telecomunicaciones y Afines”- se puede acceder en el “blog” personal de Hernández (http://daguerhernandezvasquez.blogspot.com/2012/08/reforma-reglamento-de.html).

Ese texto cita que un informe de Auditoría Interna de la Municipalidad del año pasado detectó “debilidades” en el reglamento vigente y que además la Dirección de Regulación y Seguimiento mediante el oficio DRyS-027-2012, solicitó específicamente reformar el inciso H del artículo 20 del reglamento actual, el cual se refiere a las obligaciones de los propietarios de infraestructuras para telecomunicaciones.

La nueva propuesta tiene como objetivo general integrar la ubicación de “infraestructura, estructura o equipo para telecomunicaciones” al contexto del Plan Regulador, así como establecer los requisitos necesarios para optar por las licencias constructivas.

El inciso 2 del artículo 2 de la reforma establece que a través de los requisitos del Certificado de Uso de Suelo (CUS), las “entidades competentes” garanticen “la coexistencia de las infraestructuras, estructuras o equipo para telecomunicaciones respecto al entorno urbano y ambiental, de manera que no representen daño o riesgo a la población”.

Hernández insistió en que “no se ha informado a la población” y que tiene implicaciones especiales, pues “incide en la salud de la gente”.

Añadió que al comparar artículo por artículo el reglamento vigente y la reforma planteada, “como abogado encuentro medidas extrañas, como que se refiere a cables conductores, aéreos y subterráneos”, lo cual -según dijo- no se menciona en el reglamento de Montes de Oca -por ejemplo-, ni en el vigente para San José. “¿Para qué cable en una antena y por qué se regulan estos tipos específicos? Esto podría deberse a que se quiere meter otro tipo de obra de la que ya se tiene y nadie me ha contestado estas preguntas”, acotó.

“Las modificaciones buscan llenar lagunas”

El alcalde de San José, Johnny Araya, atendió por escrito consultas que le planteó UNIVERSIDAD. A continuación se ofrece un resumen de sus respuestas.

La reforma es bastante amplia, de hecho lo que se propone es un reglamento completamente nuevo. ¿A qué obedece la necesidad de plantear la reforma?

-Se plantea en aras de actualizar el instrumento en razón a la experiencia que se ha alcanzado en las áreas técnicas y operativas. Este es un Reglamento que nuevamente se ha trabajado directamente con la Sección de Permisos y Patentes, de manera que las modificaciones buscan llenar lagunas e interpretaciones del instrumento que se han subsanado mediante directrices internas.

¿Cuáles son los principales aspectos que contempla que no están presentes en el reglamento vigente?

– El trabajo es integral. Entre los principales cambios se encuentran el replanteamiento y ampliación de conceptos y lenguaje técnico, la división del tratamiento del proceso constructivo (obra menor u obra mayor según dimensiones), la regulación de instalación de equipo accesorio asociado a las telecomunicaciones. También se fortalece el concepto de equipo o infraestructura para telecomunicaciones, se propone un procedimiento consolidado para la autorización de patentes comerciales, se incluye la mimetización de torres y antenas en zonas residenciales bajo una premisa de ser autorizadas en dichas áreas vía excepción y se proyecta la creación de una base de datos y registro municipal, entre otros.

¿Se ha informado debidamente a la comunidad al respecto?

-El reglamento está en proceso de reforma, lo cual implica necesariamente el cumplimiento de la audiencia pública que conlleva el artículo 43 del Código Municipal, ante lo cual estimo que el proceso que se sigue es el adecuado, y en su oportunidad se estarán recibiendo observaciones.

¿Por qué la Municipalidad de San José no ha encontrado oportuno en el reglamento vigente ni en la propuesta incluir alguna mención al derecho humano a la salud, como sí lo han hecho otras municipalidades, por ejemplo Montes de Oca?

-El derecho humano a la salud es un tema muy amplio, este se encuentra regulado por el municipio de manera indirecta y delimitado a nuestro ámbito competencial; ello lo apreciamos desde el momento en que se exige en el reglamento el cumplimiento de todos requisitos de obra mayor u obra menor del Plan Director Urbano; así mismo el artículo 9 de la propuesta dispone la posibilidad de denegar la ubicación de este tipo de equipo debidamente motivada en razones de contaminación ambiental, ornato urbano, oportunidad y conveniencia institucional; o bien en su numeral siguiente sólo para mencionar algunos ejemplos, al establecer como condicionantes la aprobación previa del Ministerio de Salud, Oficina del Ambiente de la MSJ, MINAET-SETENA.

Como se aprecia, el tema salud se encuentra claramente delimitado a lo largo del reglamento al margen de nuestras funciones, competencias y atribuciones; no se puede dejar de lado que el Ministerio de Salud es el ente rector en materia de salud pública.

¿Para cuándo considera que debería quedar aprobada la reforma?

-El Despacho del Alcalde elevó esta propuesta al Concejo Municipal desde el día 31 de julio del corriente. Se espera que en cualquier momento sea aprobado y publicado concediendo audiencia pública. No debiera dilatarse más de un par de meses de aquí hasta su publicación como reglamento;  sin embargo, el lapso que tarde en aprobarse depende del honorable Concejo Municipal, así como cualquier cambio que se incluya en su versión final de la propuesta.