Margarita Penón:» El proyecto fiscal tiene más de 700 páginas y no se ha explicado. Ciertamente cuando usted habla de impuestos, todo el mundo se siente afectado»
Con sus mentes más despejadas los diputados y las diputadas regresaron esta semana a la Asamblea Legislativa a proseguir la discusión del plan fiscal, que enfrenta diversas objeciones.
Después de año y medio la Comisión Mixta Fiscal emitió un informe el 30 de noviembre, el cual vuelve a una nueva comisión, cuya reactivación se analiza en el Plenario.
Pero economistas que han criticado este texto, como Juan Manuel Villasuso, se preguntan por ejemplo, por qué aceptar que los intereses generados por el capital financiero paguen una tasa menor que la de los salarios. Opina que si se habla de renta global, todos los ingresos deberían estar sujetos a la misma tasa impositiva.
Asesores y legisladores también vaticinan que uno de los puntos por revisarse sería el tratamiento del impuesto sobre la renta para personas físicas residentes y extranjeras, pues supuestamente estas últimos reciben mejor trato.
En una entrevista con UNIVERSIDAD, la diputada del Partido Acción Ciudadana (PAC), Margarita Penón, explicó por qué el impuesto sobre la renta a las personas jurídicas fue el más polémico. También señaló las tesis que el PAC defendió y por las que seguirá luchando en esta nueva etapa; a la vez detalló los cuestionamientos que ese partido ha hecho sobre los capitales en el extranjero y sus dudas de que verdaderamente lleguen al país.
¿Cómo quedó definida la renta mundial y qué objeciones permanecen?
-El punto más álgido de la discusión fue la renta mundial. Luchamos por algunas tesis que no fueron aceptadas y en el estira y encoge de la negociación el tema más cuestionado fue el impuesto sobre la renta a las personas jurídicas. Vino una gran discusión sobre cuál sería una tarifa impositiva que le permitiera al país seguir siendo competitivo. Nosotros afirmábamos que no podíamos aspirar a competir bajando impuestos ni salarios y se dio un análisis intenso hasta acordar la tasa del 18%.
Con respecto a la renta global, ¿qué mejoras pueden hacerse en el proyecto?
-Antes las personas básicamente tributaban sobre un salario, con diferentes tarifas. En este caso la renta global implica que si tienen un salario, reciben dividendos o alquileres, todo se suma y según el monto se clasifica el rango de tasación. Un tema importante es que las personas con capitales fuera del país, al igual que las empresas, al declararlos van a pagar sobre los intereses que reciben por esos capitales.
El PAC ha cuestionado cómo se regulará la tributación sobre esos dineros que están en el extranjero y si verdaderamente llegarán al país.
– Pienso que tributariamente no podemos garantizar la recaudación. El proyecto incluye reformas para que ésta sea más eficiente. No es tan importante preguntarnos si se va o no a recaudar con el esmero que quisiéramos, pues existe una legislación y le corresponderá a la Dirección Nacional de Tributos hacer los convenios de doble imposición necesarios para esto. Hay convenios de información que ya funcionan con algunos países, que implican que si usted pone dinero en Estados Unidos, al no cobrarse allá el impuesto sobre esos intereses, ellos le hacen firmar un documento que dice que no paga impuestos allá y esa información se transmite a la tributación aquí. Esto será un proceso paulatino hacia la recaudación efectiva de la renta mundial.
¿Cómo se puede mejorar esta parte del plan, sobre el pago de las empresas extranjeras?
-Se argumentaba -falsamente, creo yo- que estas reglas del juego de gravar las rentas pasivas en el exterior, ahuyentaría los capitales. Eso no es cierto para una empresa seria, que tiene un capital sano, bien organizada, y que tributa en algún lugar del mundo. Si se tributa en otro país y el impuesto es menor que aquí, se paga la diferencia entre ambos y si es mayor allá, no tendrá que pagarse aquí. Se definió la excepción a la persona extranjera que viene al país y moviliza su capital, pues lo que tributan son los intereses. Se incluyó una cláusula que le permita venir y tener un período de 3 a 5 años durante los que está exenta, pero a los 5 años debe declarar su capital. Si no se reporta el capital, cuando la administración tributaria la detecta se impondría el impuesto de renta global, de un 30%.
¿Y qué tipo de presiones han surgido durante el trámite?
-Muchísimas, creo que hay gran desconocimiento. Este es un proyecto que tiene más de 700 páginas y no se ha explicado. Ciertamente cuando usted habla de impuestos, todo el mundo se siente afectado.
¿Qué otros sectores van a luchar porque se incorporen sus pedidos ahora?
-Por un lado la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones de la Empresa Privada (UCCAEP) querían que en la renta mundial se gravaran las rentas a la hora de repatriarlas. Nos parece que eso más bien ahuyentaría los capitales, porque para qué van a traerlos, mejor dejarlos rodando por el mundo. Queremos atraer el capital extranjero, pero la pregunta es de qué tipo.
¿Está de acuerdo sobre la forma en que quedó lo de las cooperativas?
-En esta época de concentración de la riqueza, el espíritu cooperativo es una alternativa que es necesario fortalecerla. La discusión se dio porque algunas cooperativas se han desviado un poco del acto cooperativo y al negociar con terceros están incurriendo en otro tipo de actos que sí serían sujetos a gravámenes.
¿Cómo se puede dar un ejemplo de estas ventas a terceros?
-La Dos Pinos. El jugo de naranja, por ejemplo, no es producido por las personas cooperativistas, ellas lo compran fuera y allí hay un intercambio que es mercado abierto. Se definió que las cooperativas pagarían un monto sobre las ventas a terceros, recursos que irían a un fondo de desarrollo social.
¿ Este proyecto volverá a una comisión?
-Mi percepción es que con el fin de recibir las mociones debe reconstituirse la comisión para dictaminar eso e iría de nuevo al plenario para ser sometido a votación, por lo que yo no auguro un rápido trámite.
No son sólo impuestos
Los sectores sociales que participaron en la comisión hicieron aportes sustantivos al plan, que lo hacen más que un paquete tributario.
-Existiría un sistema de información pública sobre la administración tributaria y para exigir rendición de cuentas. Se enlazan diferentes entidades que ahora intervienen separadamente y se crean auditorías de calidad del gasto público.
-Se establece un ligamen muy fuerte entre los procesos de planificación de mediano y largo plazo y la designación de presupuesto y directrices de gasto público.
-Se definen como prioridades de gasto salud, educación y programas de combate a la pobreza. Por ejemplo, se garantiza que el Ministerio de Hacienda deberá girar el 6% para educación y los funcionarios serán penados con cárcel si no cumplen. También se garantiza el giro total de los recursos asignados a FODESAF, pero ligado a la reformulación de programas que los sacarían del clientelismo político.
Fuente: Margarita Penón, diputada PAC y Mauricio Castro, abogado de ANEP.
