Movimiento Costa Rica Libre niega que provocarían choques en las manifestaciones contra el TLC.
El presidente del Movimiento Costa Rica Libre -Alberto Pinto Monturiol- expresó su admiración por el exmandatario estadounidense Ronald Reagan, cuya foto luce en su oficina.
El presidente del Movimiento Costa Rica Libre -Alberto Pinto Monturiol-, instó al sector estudiantil a «que no se embarquen» y que se informen antes de protestar contra el Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos, para que después se manifiesten sin irrespetar los derechos de la ciudadanía.
El dirigente de la agrupación de derecha, tildó de delincuentes a aquellos «diz que estudiantes» que se encapuchan para protestar y de «turbas» a grupos que han adversado dicho tratado.
En una entrevista realizada este Semanario, el abogado Pinto Monturiol explicó en su bufete el pasado 9 de noviembre, por qué el MCRL reaparece ahora en el acontecer nacional, justo cuando está de por medio la ratificación del TLC por parte de la Asamblea Legislativa, en un contexto de polarización ideológica y de efervescencia política (véase edición anterior «Resurge el MCRL».
A continuación un resumen de sus respuestas.
El nacimiento del Movimiento Costa Rica Libre (MCRL) se dio en una época en la que había una fuerte lucha contra el comunismo, pero esta ya desapareció. ¿Qué motiva ahora el resurgimiento de su agrupación?
– Tiene razón en cuanto a la lucha contra el comunismo que dieron visionarios empresarios, trabajadores, profesionales, quienes se reunieron hace más de 40 años en casas, apenas Fidel Castro tomó el poder en La Habana. Decían: nos van a encender la llama del comunismo en Centroamérica y entonces tenemos que hacer algo; así empieza nuestro movimiento. ¡Ganamos la guerra fría. Somos victoriosos! Creímos que el comunismo era una forma maligna de estilo de vida, en la que el ser humano se degradaba, en vez de darle oportunidades. En los años 80 Centroamérica estuvo en guerra y Costa Rica fue el Berlín de esa guerra -con la presencia de espías, reuniones secretas de agentes de inteligencia y -gracias a Ronald Reagan, al papa (Juan Pablo II), Lech Walessa, e incluso Mijail Gorbachev, el mundo cambió, sin que fuéramos invadidos por Nicaragua -como muchas veces se temió-. A partir de los 90, al MCRL -por la Ley de Asociaciones- nos hacen reinscribirlo y se continúa con la lucha, que no era solo contra el comunismo, sino también contra la corrupción, a favor de los valores cívicos, de la libertad y la democracia. Aquí hacen falta muchas cosas y lo hemos visto en los últimos acontecimientos: la corrupción está muy arraigada en el sistema.
Pero frente a la corrupción que trascendió en el último año el MCRL no se pronunció públicamente. ¿Por qué reviven ahora, justo cuando se discute el TLC?
-Nos afectó mucho la muerte en el 2003 de Bernal (Urbina Pinto, expresidente de la agrupación), pues era un líder. Todos quienes participamos en el Movimiento trabajamos, tenemos familia y lo que hacemos es ad honórem; después de la muerte de Bernal yo asumí la presidencia y tratamos de reagruparnos. Consideramos que este es el momento para salir y este es el primer tema (TLC) que vamos a tocar -pero no el único- y lo hacemos de una manera muy respetuosa, ya que dentro de la organización tenemos miembros que no están de acuerdo con el TLC, aunque una mayoría sí. Estamos en una democracia y debemos respetarnos; pero, es contra los sindicatos, los «diz que» estudiantes -porque no lo son quienes andan encapuchados -. Es hacia quienes causan desórdenes y quienes violan las libertades tuyas y mías, que va dirigida la publicación. Las protestas, las acciones legales, y las opiniones contra el TLC las respeto, porque todos tenemos derecho a decir y pensar lo que queramos.
¿Los grupos que promueven el TLC están financiando al MCRL?
-No. Son ciudadanos particulares los que lo financian, miembros de la junta directiva, fundadores, empresarios; algunos apoyan el TLC. Pero, nunca -que quede bien claro- hemos aceptado dinero condicionado, jamás. En eso Bernal se cuidó inmensamente, para hacer esa tribuna de libertad, independiente, que podía decirle las cosas a quien fuera. Así soy yo, y no vamos a permitir que alguien nos condicione nuestra opinión.
En el pasado al MCRL se le acusó de ser financiado por el gobierno estadounidense.
-No hemos recibido un cinco del gobierno de Estados Unidos. ¡Nunca!
¿Ni indirectamente?
– Ni siquiera. Nunca. Eso es totalmente falso. Estoy desde los 16 años en el Movimiento y jamás lo hubiéramos permitido, ni lo permitiremos.
Algunas personas aseguran que el MCRL ya no tiene la organización, ni la capacidad de antes, y lo que existe es un deseo personalista de figurar. ¿Qué hay de cierto en esta afirmación?
-Todo el mundo tiene derecho a sus opiniones, pero no creo que sea así. Creo que seguimos teniendo estos ideales de que Costa Rica puede ser mejor, de que a nuestra patria hay que defenderla, y vamos a usar los medios que el sistema democrático nos da para hacerlo, y no soy solo yo. Son miles de personas quienes pensamos así, y ha estado muy interesante la reacción (al campo pagado) de la gente y de todos los miembros del Movimiento que se han reactivado.
¿Está dispuesto el MCRL a enfrentarse en las calles contra los opositores del TLC?
-Yo diría más bien que los opositores del TLC que quieran causar violencia -no quienes marchen pacíficamente y no cometan actos delictivos, porque es lo que realizan estas turbas-que se atengan a las consecuencias legales, porque las hay, y si tal vez han sido muy benevolentes en el pasado para controlarlas, creo que el gobierno ha cambiado de actitud totalmente y el pueblo le pide seguridad contra estos actos vandálicos. El gobierno no va a permitir este tipo de cosas, porque si no se le puede ir de las manos, como está pasando en Francia. Le digo a los estudiantes: ¡no se dejen embaucar! Primero infórmense, lean sobre el TLC, y después realicen sus manifestaciones, pero respeten a la ciudadanía.
En el pasado los miembros del MCRL tuvieran una preparación paramilitar. ¿Piensan continuar con este tipo de formación?
-Yo no diría eso. Se entrenaba a los muchachos en rapel (escalada) y en cosas que aprenden en cualquier organización de rescate. Yo les daba clases de derecho constitucional, les explicaba los valores democráticos. Eso es lo que se persigue: un mejor ciudadano, y continuaremos con ello. Es darle al país algo, o protegerlo de algo que consideramos es malo. Los fines de nuestro movimiento son todos acordes con los valores democráticos costarricenses.
El Movimiento Libertario ha expresado su posición favorable al TLC, y usted es una de las personas que financia a ese grupo (¢1.323.700 entre el 2003 y 2004). ¿Es mera casualidad que estén juntos en la misma lucha a favor del TLC?
-Soy amigo de Otto Guevara y de su familia. Ideológicamente yo, personalmente -no tiene que ver absolutamente con el MCRL- sí apoyo a don Otto Guevara, y esto no me avergüenza. Por primera vez existe un partido que -más o menos- concuerda con lo que pienso; entonces participo y tal vez más adelante lo haga más activamente si la asamblea del Movimiento Libertario así lo quiere.
¿Usted cree que en el país faltan instancias para discutir temas como el TLC?
– Creo que no. ¡Sobran! Lo que falta es la voluntad. Los que se oponen están cerrados totalmente y no quieren dar la oportunidad de que el proyecto se discuta en la Asamblea Legislativa. Es una actitud antidemocrática.