La propuesta desarrollada por el Ministerio de Educación Pública (MEP) que busca reorganizar y armonizar el calendario escolar con el curso lectivo y que establece como eje principal la trimestralización del período académico en escuelas y colegios, será puesta en marcha, únicamente si la comunidad educativa toma acuerdos en ese sentido.
Así lo confirmó el ministro Leonardo Garnier, quien aclaró a UNIVERSIDAD una serie de puntos que han sido cuestionados sobre el fondo de la iniciativa.
Diversos sectores han hecho énfasis en que la propuesta generaría una serie de problemas, como que los docentes perderían cinco días de vacaciones, que afectarían a las familias, sobre todo en el área rural y que producirá una mayor carga académica.
“Vamos a seguir discutiendo la propuesta con la comunidad educativa, sobre todo con directores, docentes y estudiantes; mi idea es que la gente llegue a conocer bien la iniciativa y se enteren con claridad sobre lo que estamos proponiendo”, manifestó el ministro Garnier.
El jerarca rechazó que el plan reduzca los días de vacaciones, que los docentes tengan que laborar en tiempo de descanso, o que se recorte el contrato de interinos cada tres meses, como han afirmado ciertos sectores.También señaló que las pruebas de recuperación que se realicen serán al ingresar a lecciones, por lo que los docentes no tendrán que trabajar en su tiempo de vacaciones y se habilitarán procesos de formación dentro del período lectivo.
No habrá ningún cambio curricular y solamente se tendrá que reprogramar al esquema trimestral; el calendario de pruebas nacionales continuará igual, argumentó Garnier.
A su parecer, la puesta en marcha de este proyecto dependerá de si la mayoría de gente está de acuerdo; pero, si los diferentes actores se manifiestan en contra no insistirá en su aplicación.
“Tampoco voy a dejarla de lado por lo que diga «alguna dirigencia” si la gente se muestra de acuerdo. Vamos a ver qué pasa conforme se conozca bien la propuesta”, indicó el titular del MEP.
Esta propuesta ha sido discutida entre representantes del Ministerio y miembros de distintas regiones, con docentes y directores, y se pretende extender la información a todos los actores relacionados.
GREMIOS SIN CONVENCER
De acuerdo con Mélida Cedeño, presidenta de la Asociación de Profesores de Segunda Enseñanza (APSE), no es cierto que los docentes estén de acuerdo con la propuesta del MEP, pues incluso han llevado a cabo investigaciones que muestran la molestia e incomodidad del sector hacia la iniciativa.
“Es una idea que nació de una reunión con algunos directores, pero carece de investigación y de consulta previa con todo el sector y los actores, como son padres de familia, docentes, sindicatos, asociaciones de profesores y áreas académicas”, argumentó la dirigente.
Para Cedeño, el proyecto contraviene la legislación vigente, como es la Ley de Carrera Docente en su artículo 176, que habla sobre los períodos de vacaciones de los docentes, así como el Laudo Arbitral del 2000, que brindaba una serie de beneficios a los educadores.
En su criterio, se deja de lado el abordaje de las condiciones climatológicas que tienen el país, de igual forma las jornadas laborales de las familias y las personas involucradas con el sector agrícola, que requieren de sus jóvenes para ayudar con la producción.
“Se trata de una propuesta que no va a favorecer en nada; son más exámenes y pruebas para los muchachos, más carga académica para ellos y más carga laboral para los docentes; es perder vacaciones sin remuneración, favorece la deserción y no ha sido consultada con las bases”, señaló la presidenta de APSE.
Otra organización que no avala la propuesta del MEP es la Asociación Nacional de Educadores (ANDE), porque lanza más interrogantes y no resuelve las cargas laborales, ni la salud ocupacional de los docentes.
Alexander Ovares, presidente de la ANDE, señaló que las filiales tomaron la decisión de no aprobar esta propuesta.
“Para la ANDE, el uso del tiempo escolar es otro aspecto que debe reformarse, pues no se trata de cuánto tiempo están en las aulas, sino más bien, en cómo se utiliza ese tiempo”.
Alcances de propuesta
Los principales temas que cubre la propuesta del Ministerio de Educación Pública, en cuanto a la situación actual del calendario escolar y los cambios que se podrían llevar a cabo son:
-El calendario escolar está organizado en dos semestres y el curso lectivo en trimestres, lo que hace que períodos de vacaciones no correspondan a la organización del proceso educativo. La propuesta busca armonizar ambos elementos.
-Actualmente hay dos convocatorias anuales de ampliación, ambas al finalizar el curso lectivo. El MEP pretende transformar estos procesos de recuperación y ampliación, de manera que se puedan recuperar los rezagos académicos a tiempo.
-Evitar el desgaste y cansancio de docentes y estudiantes, que se presenta en el segundo y tercer trimestre, luego de vacaciones de medio año.
-Se establecerán tres períodos de vacaciones: uno al final del primer trimestre (2 semanas), otro luego del segundo trimestre (2 semanas) y otro al final del curso lectivo (5 semanas), que corresponde con la conclusión e inicio del año.
-En cuanto al período lectivo se mantienen 42 semanas, en las que se incluye 1 para los congresos de las organizaciones magisteriales, más los días feriados de ley.
Ciudadano afirma:
“La propuesta de trimestralización fue mi idea”
María José Núñez
Un ciudadano que se dice comprometido con el desarrollo del país, presentó hace algún tiempo una propuesta que buscaba distribuir el calendario escolar en trimestres, enfocada en tres ejes: hacer módulos de lecciones, dar una buena gestión y control de calidad en los centros educativos, así como capacitar a los docentes.
Herbert Contreras ha ejercido la docencia como autodidacta y hace poco se graduó en ésta área; además es ingeniero civil. Afirma que la propuesta del MEP tomó como base la suya.
En la iniciativa, que fue enviada en el año 2000, tanto al ministerio de Educación Pública, como a organizaciones gremiales y otras entidades, destacan puntos, que en su criterio, fueron malinterpretados en el proyecto de trimestralización de la institución.
“Veo deficiencias en el planteamiento del MEP; por ejemplo, no hay consenso entre los diversos sectores involucrados, lo basaron en mi documento original, pero no me llamaron para esclarecer cosas. Se insiste en disminuir las vacaciones, no queda claro cuándo ni cómo se dará la capacitación; hay muchas dudas”, manifestó.
Contreras sostuvo que una iniciativa de esta índole debe contemplar el establecimiento de módulos del período escolar, donde se deje espacio para actividades extracurriculares, deportivas y cívicas.
También plantea el trimestre sabático, es decir, que toda institución capacite a sus trabajadores en tiempo laboral efectivo, facilitándoles un trimestre de formación cada cierto tiempo.
Mencionó también que la aplicación de los 200 días efectivos de lecciones ha sido un fracaso en el sistema costarricense, además que es necesario aplicar un sistema eficiente para el manejo administrativo de la entrada y cierre de clases.
Por su parte, el ministro de Educación Pública, Leonardo Garnier, aseguró que en efecto el señor Contreras había presentado una propuesta con características similares, previamente a la iniciativa del MEP.
“De hecho la idea de que las vacaciones calcen con los trimestres no es ninguna idea particularmente novedosa u original, es más bien un tema de sentido común y muchos países lo han aplicado”, dijo el jerarca.
No obstante, Garnier indicó que la propuesta del MEP fue producto de una serie de reuniones con docentes y directores de diversos centros educativos y no fue tomada de la versión del señor Contreras.