La Comisión Nacional de Prevención de Riesgos y Atención de Emergencias (CNE) desplegó un operativo humanitario para atender a los más de 1.200 migrantes cubanos en tránsito hacia el norte del país.
Entre sus acciones, la CNE activó los Comités Municipales de Emergencia de los cantones guanacastecos de Liberia y La Cruz, así como el Comité Regional de Emergencias, los cuales en conjunto coordinaron todas las operaciones de planeamiento y asistencia.
Estos organismos se encargaron de la planificación de las actividades de atención a la crisis humanitaria a través del suministro de alimentación, albergue, cobijas, espumas y atención médica en coordinación con entidades de salud.
En primera instancia, los lugares que acogieron a los migrantes fueron el Centro Pastoral de La Cruz en el que se atendió a 80 personas y el Colegio Nocturno en el que se ubicaron a 370.
Así mismo, se previó la ubicación de albergues en zonas aledañas para la protección de cerca de 800 cubanos que aún permanecen en el puesto migratorio de Peñas Blancas .
Por su parte, en Liberia el Comité Municipal de Emergencias también empezó a actuar en favor de la habilitación de nuevos albergues y prever una posible atención de la población extranjera.
La CNE además busca sumar esfuerzos con instituciones operativas y organismos internacionales tales como el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) y la Organización Internacional de la Migración (OIM) con el fin de atender este caso en particular.
Las acciones se empezaron a llevar a cabo a partir de la negativa de Nicaragua de aceptar el paso del grupo de migantes a su territorio.
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