La Caja Costarricense del Seguro Socia (CCSS)l estimó en ¢9.1 millones los gastos en que incurrió para atender a los montadores y “toreros improvisados” que participaron de las corridas de todos en Zapote y Belén este fin y principio de año.
Según informó este miércoles la entidad, en el hospital Calderón Guardia se atendió a 43 personas con un costo de ¢7.6 millones, en el hospital San Vicente de Paúl de Heredia la atención de 14 personas costó ¢1,1 millones y en la clínica Carlos Durán, el tratamiento de cuatro personas se valoró en ¢283 mil.
El gerente Financiero de la CCSS, Gustavo Picado, aseguró que los costos de la atención de estas personas serán facturados y se les hará el cobro que corresponde a cada uno. Estas personas deberán realizar los trámites respectivos ante las aseguradoras para pagarle a la CCSS.
Picado recordó que actividades como las corridas de toros requieren para que les permita funcionar, de una póliza de seguro que dé cobertura total de los gastos de atención médica de las personas afectadas en sus establecimientos.