Ríos Montt recibió una pena de 50 años de cárcel por genocidio y 30 por delitos contra los deberes a la humanidad, indicó la magistrada que preside el Tribunal A de Mayor Riesgo.
El militar retirado fue acusado por el Ministerio Público (MP) de ser responsable, por su jerarquía en la cadena de mando dentro del Ejército de Guatemala, de la muerte de 1.771 indígenas ixiles en 15 matanzas ejecutadas en comunidades del departamento de Quiché (Norte).
El MP solicitó el jueves, cuando el juicio entró en su fase de conclusiones, una condena de 75 años de cárcel.
Ríos Montt, quien fue jefe de Estado de facto entre 1982 y 1983, cuando ocurrieron las matanzas documentadas, se declaró inocente el jueves. «Su Señoría, me declaro inocente. Nunca tuve la intención ni el propósito de destruir a una etnia nacional», declaró con la mirada dirigida a la presidenta del Tribunal.