Maduro dijo que los «focos violentos» han causado la muerte de 50 personas, ya que las barricadas impiden el paso a las personas enfermas que no pueden ser llevadas a los hospitales para ser atendidos, pero no aclaró si la cifra incluye las 15 víctimas mortales atribuidas directamente a la protestas.
En la jornada, el gobernante recibió el apoyo de cientos de campesinos que marcharon en Caracas, mientras que mujeres convocadas por la oposición realizaron una manifestación para exigirle a las fuerzas del orden el cese de la represión a las protestas.
Asimismo, la Fiscalía General informó que fueron detenidos cinco agentes del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin) por su presunta responsabilidad en la muerte de dos personas el 12 de febrero, cuando comenzaron las protestas contra el gobierno.
Explicó que los agentes fueron imputados por los cargos de homicidio calificado con alevosía y motivos innobles, uso indebido de arma orgánica, entre otros.
En un discurso en la concentración de campesinos, Maduro dijo que artistas famosos irrespetan a los venezolanos, al cuestionar al gobierno y su manejo de las protestas.
Aunque no mencionó nombre alguno, en los últimos días desde Madonna hasta Ricky Martin y Ana Gabriel han expresado su preocupación con la agitación política en Venezuela.
«Ahora le dio a artistas famosos por declarar contra Venezuela, por meterse con Venezuela, como si ellos pudieran determinar el destino de este pueblo que decidió hacer una revolución. Quieren opinar libremente, alegremente, siguiendo un guión. Ellos creen que porque son famosos y nos gustan sus canciones pueden cambiarle la mente a los venezolanos, se equivocan», dijo.
Artistas mundiales se han sumado a la campaña en las redes sociales «SOS Venezuela», la que también han hecho suya algunos deportistas.
En la más reciente manifestación, en el Festival de Viña del Mar, en Chile, la agitación política en Venezuela se convirtió en tema de preocupación de los artistas que participan.
Ana Gabriel fue una de las que se refirió al tema. «La libertad de Venezuela, eso es lo que queremos y pedimos», proclamó la cantante mexicana.
A la sede del gobierno llegaron campesinos tras una marcha en el centro de Caracas. Los manifestantes llevaban pancartas de apoyo a Maduro y a favor de los planes de pacificación del gobernante.
Maduro recibió el apoyo de los campesinos, horas antes de instalar lo que propuso como una conferencia de paz nacional para terminar con las protestas, en la cual la coalición opositora Mesa de Unidad Democrática (MUD) anunció que no participará.
El secretario ejecutivo de la MUD, Ramón Guillermo Aveledo, señaló que el grupo no se prestará para «lo que derivará en un simulacro de diálogo que desemboque en una burla a nuestros compatriotas».
El dirigente afirmó que el diálogo propuesto por el gobierno no tiene las condiciones «adecuadas» para efectuarse, ante la situación de agitación del país.
Mientras, una marcha de mujeres opositoras partió de la sede de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) hasta el comando regional quinto de la Fuerza Armada, ambos en el oeste de la ciudad.
Las mujeres asistieron vestidas de blanco y fueron encabezadas por la diputada María Corina Machado y la esposa del encarcelado dirigente opositor Leopoldo López, Lilian Tintori, quienes llevaban flores en las manos y una pancarta que decía «mujeres por la vida».
La multitudinaria manifestación llegó hasta el comando de la Guardia Nacional (policía militarizada), que es la fuerza que ha enfrentado las protestas y que ha sido acusada de excesos por organizaciones no gubernamentales.
Las participantes leyeron un conjunto de peticiones a la fuerza, que resumieron en «no más violencia, represión y tortura».
A su vez, Maduro negó que las fuerzas del orden estén violando los derechos humanos en la contención de las protestas.
Al contrario, dijo que quienes violan los derechos a los venezolanos son los «pequeños grupos fascistas» que instalan focos violentos y barricadas, a las cuales prenden fuego, lo que provoca enfermedades respiratorias e incluso la muerte.
Afirmó que los «focos» de violencia y las barricadas contra su gobierno impiden el paso a las personas enfermas que no pueden ser llevadas a los hospitales para ser atendidos.
Las cifras oficiales habían contabilizado 13 muertos en las protestas hasta el lunes pasado, pero Maduro informó que una persona murió hoy en la región de Carabobo cuando estrelló su moto contra una barricada incendiada y otro en el estado suroccidental de Táchira al caer de un edificio cerca de una manifestación.
«Canales como CNN dicen que el gobierno venezolano es represivo, pero no dicen que quién viola los derechos humanos son pequeños grupos que queman, que atacan», señaló. «Ya van 50 muertos productos de las barricadas y las guarimbas (protestas)», indicó.