El Club de Montañismo de la Universidad de Costa Rica (UCR) celebrará el próximo 14 de junio su cincuentenario de existencia y de estar adscrito a los Programas Deportivos y Recreativos de la Vicerrectoría de Vida Estudiantil, aunque oficialmente la llegada al medio siglo lo cumplió el 26 de mayo pasado.
La conmemoración tendrá lugar en el auditorio de la Ciudad de la Investigación de la UCR, a las 7 de la noche.
Jorge Bolaños, coordinador de este grupo de aventureros desde hace 5 años, aseguró que la celebración contará con la gente “que ha tenido un rol importante en el funcionamiento del club” y lamentó que algunos de los “patriarcas” de esta agrupación han fallecido ya o que por su edad no están en condiciones para asistir a la actividad.
Los inicios del club de montañismo se dieron en 1957, como una iniciativa de estudiantes de agronomía, quienes debían cumplir con giras a las montañas de Costa Rica por demanda académica. Para inicios de 1960, ya se unían a estos viajes otras personas interesadas en explorar los espacios naturales del país los fines de semana.
Actualmente, el club cuenta con 20 miembros permanentes, entre estudiantes universitarios y egresados, profesores y administrativos de la institución, quienes organizan a lo largo del año giras quincenales y semanales a montañas y picos de Costa Rica.
“Al inicio era mucha gente del área de ingeniería. Ahora hay gente de sociología, química, agronomía. Ha habido de todo”, explicó el coordinador del club.
Bolaños asegura que ha sido más difícil convencer a los funcionarios, en tanto quienes más asisten son estudiantes jóvenes y egresados de la UCR y el Instituto Tecnológico de Costa Rica.
A lo largo de su existencia, el club ha contado con grandes figuras ambientalistas y del sector científico nacional que ya han fallecido, como Adelaida Chaverri, hija del reconocido químico Gil Chaverri, coordinadora del Club de Montañismo y propulsora desde esta agrupación de la creación del Parque Nacional Chirripó, declarado como tal en 1975. A ella se suma Alfonso Mata Jiménez, profesor de química de la UCR y asociado del Centro Científico Tropical.
PROYECTARSE FUERA DEL PAÍS
El actual coordinador de la agrupación, Jorge Bolaños, explicó que desde el año pasado los montañistas se propusieron ascender a los 47 picos mayores a los 3 000 metros de altura en la Cordillera de Talamanca, y ya han escalado veintiocho.
“Son muy difíciles, y algunos prácticamente inaccesibles. Las giras son giras muy pesadas, pero muy satisfactorias, pues los lugares son preciosos”, expresó Bolaños.
Las giras las hacen no solo a picos y montañas, sino también a cavernas, cañones, ríos y cataratas costarricenses. Para cumplir con estas metas, el club cuenta con equipo especializado para uso de sus miembros -como localizadores GPS-, que son financiados a través de las cuotas que facilitan sus miembros mensualmente. Estas oscilan entre los ¢3500 para estudiantes y los ¢8500 para particulares no egresados de la UCR.
Bolaños señala como un gran reto para los miembros de la agrupación, escalar montañas fuera del país, y menciona que varios han conseguido por sus propios medios conquistar las cimas de varios picos del continente, entre ellos el Aconcagua en Argentina o el volcán Tajumulco –en Guatemala-, el cual es la cumbre más alta de Centroamérica.
Entre los integrantes que han practicado el montañismo en el extranjero, se encuentra Gineth Soto, miembro honoraria que escaló el monte Everest en mayo pasado, sin lograr su meta máxima de llegar a la cima.
“Hay un proyecto para ver si vamos a Ecuador en noviembre próximo, a realizar un curso de rescate en montaña. También hay un curso que va de la mano con este viaje, es de ascenso en hielo para preparar teóricamente a la gente para esta ocasión”, expuso Bolaños.
El Club de Montañismo tiene reuniones regulares 2 veces al mes, en las cuales se dan capacitaciones en temas vitales para la práctica del montañismo, como el senderismo, técnicas de escalada, astronomía, salud del campista e incluso de lingüística aborigen costarricense.
