Partido Re-Encuentro con la UNA ofrece cien propuestas de mejora.
El economista Henry Mora, aspirante a la rectoría de la Universidad Nacional (UNA) por parte del movimiento “Re-Encuentro con la UNA”, quiere llevar a esta Universidad el concepto de “universidad necesaria”, inspirándose en los deseos de sus fundadores, como Benjamín Núñez.
Mora, quien es además el decano de la Facultad de Ciencias Sociales de este centro de educación superior, admite cierta nostalgia por retomar la conciencia crítica, la transformación social y la propuesta de soluciones para los problemas de la sociedad.
En su movimiento también está la artista Elsa Flores, que se presenta como candidata a vicerrectora académica. Flores fue exdecana del Centro de Investigación, Docencia y Extensión Artística (CIDEA) de la UNA, y ha sido reconocida por sus aportes a la danza y al arte en general.
Mora explicó que el documento con sus ideas se llama 100 propuestas para la UNA, segmentadas en diversos temas. A continuación un extracto de la entrevista que Mora dio a UNIVERSIDAD.
¿Cuáles considera necesidades urgentes de la Universidad?
La UNA nunca ha tenido un plan de crecimiento ni de desarrollo de infraestructura. Se han construido tres edificios en cinco años y el campus está repartido por Heredia. Este crecimiento ha sido improvisado, por lo que hay que contar con un plan de ordenamiento.
Además, en la Universidad hay un caos de inseguridad: asaltos, hurtos, tachas de autos, violaciones, exhibiciones obscenas, delincuencia. Los robos son totalmente rutinarios, y casi que se debería declarar este tema de emergencia.
Adicional a esto prevalece el problema del interinazgo entre los funcionarios, por lo que hay que pensar en mejorar un plan de relevo.
De ser electo, ¿cuáles serán sus prioridades?
Tenemos una propuesta de acción inicial llamada 7 prioridades y 1 compromiso. Estas consisten en modificar el centralismo burocrático, promover la carrera académica, solucionar el interinazgo, inseguridad, evitar la improvisación en materia física, fomentar el respeto a la convención colectiva, impedir el acoso laboral. El compromiso es el de terminar con el atentado contra la democracia universitaria.
¿Qué propone para mejorar la vida estudiantil?
Nuestro compromiso con los estudiantes inicia por el respeto a la autonomía estudiantil, que aquí se ha violentado por injerencias indebidas en la Federación (FEUNA) y en el movimiento estudiantil como tal, particularmente en esta administración. Además, respaldar la vuelta al voto estudiantil universal, tratar el tema de la mejora de residencias y de la posibilidad de hacer un polideportivo, las becas y que haya un representante estudiantil en la conducción de la vicerrectoría académica que funcione de verdad.
¿Qué plantea en términos de misión y principios de la Universidad?
En esta coyuntura es vital fortalecer el principio de la autonomía de la Universidad, y esto lo lograremos ampliando el concepto para no vincularla solo a una relación de Universidad con el Estado, con la empresa y con los partidos políticos.
En la Universidad debe haber libertad de cátedra, pero debe entenderse como libertad académica, y que esto no sea solo para la docencia sino también para la investigación, la cual muchas veces viene dada por la agenda de las empresas.
Además, los partidos políticos han tenido su injerencia en la administración de la UNA; claro ejemplo es cómo algunos utilizan la rectoría como plataforma política, como el caso del rector. Esto ha sido ampliamente criticado. Pero incluso la Federación de Estudiantes ha tenido infiltración de la juventud liberacionista, lo cual dirige muchas de sus acciones o luchas.
¿Qué opina sobre las recientes irregularidades en admisión de la UNA?
La situación se ha manejado terriblemente mal; no puedo referirme al fondo del asunto, porque según la Contraloría Interna el informe fue declarado confidencial, aunque mucha gente lo tiene.
¿Considera que el documento debería ser público?
Sin duda. Ese tipo de secretismo y confidencialidad le hace daño a la Universidad. La administración se queja de que no hablemos de eso, pero el daño se lo están haciendo cuando las cosas no se hacen transparentes. Incluso ya la funcionaria afectada hizo pública su denuncia.
¿Debería hacerse algún tipo de reforma al sistema de admisiones para evitar esto?
Siento que antes que nada la Universidad debe ser transparente en toda su comunicación interna. No sé si será necesaria una reforma al sistema de admisiones, porque si los hechos son ciertos, el asunto es que se violentó el debido proceso y ya funcionarios particulares han puesto un recurso de revisión para que se retome el caso. Fueron actos que rayan con la corrupción, el que se acepten hijos de funcionarios sin tener los requisitos pero utilizando los recursos del Estado. Hubo por lo menos complacencia de parte de las altas autoridades de la Vicerrectoría Académica.
Ojalá pudieran ponerse en línea las agendas de los órganos colegiados de la Universidad; solo haciendo público y no privado este tipo de toma de decisiones se puede evitar la corrupción.
