La licitación para administrar los EBAIS genera inconformidades entre sectores de trabajadores de la UCR. (Foto: archivo)
Diversos sectores de la Universidad de Costa Rica (UCR) reaccionaron negativamente ante la noticia de que existen tres entes privados que presentaron ofertas para administrar los Equipos Básicos de Atención Integral de Salud (EBAIS), los cuales forman parte del Programa de Atención Integral de Salud (PAIS) que dejará de ser administrado por la UCR a partir del próximo 14 de febrero.
Estos sectores están representados principalmente por el Sindicato de Trabajadores de la UCR (SINDEU), la Federación de Estudiantes de la UCR, los trabadores actuales del PAIS, entre otros grupos, quienes han creado un frente para buscar que la Universidad mantenga la administración de estos EBAIS.
Los tres oferentes actuales para la licitación son ASEMECO, que concursa por el Área de Salud de Curridabat; COOPESIBA, por el Área de Salud de Montes de Oca; y la UNIBE, que ofreció servicios por las dos áreas de salud anteriores, más la de San Juan-San Diego-Concepción, según información proporcionada por Rosa Climent, gerente médica de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), en una carta a Marcela Zamora, miembro de la Junta de Salud de Montes de Oca.
Rosemary Gómez, secretaria general del SINDEU, explicó a UNIVERSIDAD que, desde el 2009, este sindicato junto con trabajadores del PAIS ha solicitado, a las autoridades universitarias de turno, que la UCR atienda el servicio de los EBAIS e incluso plantearon una clínica de salud que fuera administrada desde la UCR.
“Solicitamos que el convenio (UCR-CCSS) se mantuviera, porque es un convenio que tiene 15 años, donde se han desarrollado proyectos de investigación, docencia y acción social. Cerrar el programa significa cerrar la posibilidad para que estudiantes realicen sus prácticas”, comentó Gómez.
A su parecer, con esta transición de administradores de estos centros, la UCR perdería los vínculos con las comunidades, sumado a que los trabajadores actuales del PAIS están pasando por una situación de incertidumbre, ante la posibilidad de quedar desempleados luego del 14 de febrero.
Por su parte, el doctor Ricardo Peralta, médico general del PAIS, dijo a UNIVERSIDAD que lo que la mayoría de trabadores desea es que sea la UCR la que siga con este programa, y que si concursa saldría ganando con el actual cartel.
En su opinión, lo que existe por parte de las autoridades de la UCR es una falta de voluntad política para seguir con este programa.
Peralta aseguró que las condiciones actuales con las que está planteado este cartel, los puso en desventaja como trabajadores de una posible asociación, con respecto a los demás oferentes.
Agregó que, según cálculos que han hecho, se ha determinado que en promedio el costo por EBAIS con esta nueva contratación, sería más alto que con el que viene operando la UCR.
VICERRECTOR: VÍNCULOS NO TERMINAN
Consultado sobre este tema Roberto Salom, vicerrector de Acción Social de la UCR, afirmó que la finalización de servicios de administración de estos EBAIS se debió a que la UCR se vio obligada por el Consejo Universitario a no seguir con esas operaciones, al existir un déficit acumulado que mantiene la UCR con este programa.
Salom considera que la relación de acción social de la UCR con las comunidades −por medio de trabajos comunitarios y prácticas estudiantiles− no tiene por qué verse afectadas con que otro ente administre estos centros de salud.
Argumentó que la UCR está facultada a seguir brindando estos servicios, ya sea por medio de los EBAIS, o bien directamente con la comunidad, y nada impide hacerlo, porque en el pasado ya lo ha hecho; por ejemplo, citó la atención odontológica por parte de la Universidad.
“La proyección de la UCR no se acaba porque se acabe el PAIS; lo que se acaba es la figura de que sea la Universidad la que se echa sobre sus espaldas la administración del servicio, cosa que no le corresponde, no es la vocación de la Universidad. Su vocación es el campo académico, la docencia, investigación y acción social, no es el administrar servicios de salud propiamente dicho”, alegó Salom.
Sobre la posibilidad de que en su momento los mismos trabajadores del PAIS se unieran para administrar estos centros, recordó que “se les propuso que hicieran una asociación para que asumieran los centros, pero no se mostraron interesados, no actuaron con la rapidez con que debieron haber actuado. Nosotros (la administración) hasta asesoría buscamos con el Instituto Nacional de Fomento Cooperativo y estamos dispuestos de ayudarlos”.
Mientras tanto, la gerente médica de la CCSS, Rosa Climent, negó que con el actual cartel de licitación se ponga en desventaja a otros entes privados o que los precios que se estén pagando sean mayores a los que se les pagaba a la UCR.
“En una licitación lo que tenemos son términos de referencia, los cuales el proveedor de servicios tendría que asumir. Nosotros (la CCSS) hacemos comparación de precios y asignamos. No podemos pagar más de lo que cuesta un área de salud, de acuerdo a la Contraloría General de la República”, aseveró.
De acuerdo con Climent, nunca existió un acercamiento de trabajadores de la UCR para seguir administrando estos EBAIS cuando termine el convenio, y antes de que finalice el contrato se hacía necesario sacar a concurso estos servicios.
Reiteró que la CCSS estaba dispuesto a seguir con los servicios de la UCR, pero fueron las autoridades universitarias las que de no quisieron seguir con el convenio.
“El contrato que habíamos hecho estaba planteado para seguir con la UCR, hasta que llegó una nota del rector diciendo que ellos no tenían ningún interés en continuar con la CCSS. No nos dejó mucha opción, más bien tuvimos que correr”, añadió.
Con el actual cartel, se disminuirían de 45 a 36 los EBAIS en las áreas de salud de Montes de Oca, San Juan-San Diego-Concepción y Curridabat. Actualmente, en estos centros laboran unos 450 trabajadores, que serán cesados por la UCR el 14 de febrero.