Los estudiantes de primer ingreso entran en marzo con grandes expectativas sobre lo que van a ser sus primeros cursos dentro de la Institución, pero a la vez con grandes miedos infundados por experiencias ajenas y comentarios en redes sociales. Para contrarrestar esta situación, la Escuela de Estudios Generales, la Oficina de Orientación y los diferentes Centros de Asesoría Estudiantil (CASE) de la Universidad de Costa Rica (UCR) abrirán puertas, junto con el inicio de clases, a los diferentes servicios de ayuda académica.
La oferta de los distintos órganos académicos de la Universidad incluye asesoría individual, sesiones de repaso, talleres de orientación, banco de exámenes, tesineros, estudiaderos, tutorías individuales y grupales.
Los estudiaderos comenzaron en 1995 dando apoyo para el curso Cálculo 1001 y, desde entonces, han crecido sin detenerse. Para 2014, ya son muchas las facultades que se han apropiado de su metodología.
Este centro de apoyo académico gira en torno al estudiante. La dinámica consiste en que los estudiantes lleguen a estudiar y resuelvan ejercicios o prácticas junto con estudiantes avanzados que han tenido buen rendimiento en esos cursos, quienes dan apoyo y ayudan a identificar los vacíos de conocimiento.
“No trabajamos con docentes porque manejamos un ambiente de complicidad”, aclaró Ana Yancy coordinadora del Centro de Asesoría Estudiantil del área de Ciencias Agroalimentarias. En este proyecto se procura que los estudiantes encuentren un espacio cómodo para interacciones sociales, además de compartir la materia, sus preocupaciones y expectativas.
Actualmente, los CASE que están desarrollando el servicio son Ciencias Básicas, Letras, Ciencias Sociales e Ingeniería; no requiere de inscripción y se maneja por horarios continuos.
Los tesineros, como hijos del proyecto, se manejan bajo la misma dinámica: los estudiantes de Filología brindan el apoyo para “redacción, ajustes de estructura y estilo”.
También se le recomienda al estudiante pasar por diferentes modalidades de ayuda académica pues la metodología no funciona para todos. “A un estudiante que con facilidad pierde la concentración se le recomienda que estudie en la biblioteca y se acerque al estudiadero como centro de consultas, y se recomienda la tutoría para aquellos que han perdido dos o tres veces un curso”, expresó Yolanda Gutiérrez coordinadora del CASE de Ciencias Básicas.
En este momento, las escuelas se encuentran en proceso de inscripción de los facilitadores. Si desea información sobre la inscripción, los cursos que se van a impartir y los horarios, puede consultar al CASE respectivo a partir de la tercera semana de marzo.
