Robótica de la UCR favorece a pequeñas empresas

Tener la posibilidad de llegar a nuevos mercados llevó a que la microempresaria Lilly Bonessa se relacionara con la UCR y obtuviera por medio

Tener la posibilidad de llegar a nuevos mercados llevó a que la microempresaria Lilly Bonessa se relacionara con la UCR y obtuviera por medio de la Escuela de Ingeniería Industrial, el diseño de un nuevo mecanismo electrónico, para aumentar la seguridad en la elaboración y empacado de productos alimenticios.

Como ella, con su empresa Pasta y Basta otras cinco pequeñas y medianas emprendimientos (pymes) han sido beneficiadas con diseños robóticos, que facilitan la producción, desarrollo y distribución de bienes.

“Recibí un prototipo para un detector de metales, que sirve para tener acceso a la certificación SSC (Consejo de Competencias Sectoriales). Esa certificación abre más mercados, pues nos ayuda a cumplir con normas que estandarizan la producción y, de esta forma, tener más oportunidades de exportación. El detector de metales permite una mayor seguridad del producto que se consumirá”, dijo Bonessa.

En el marco de la apertura del RobotiFest 2015, que desde hace cuatro años organiza la UCR, el coordinador del Laboratorio de Robótica de la Escuela de Ingeniería Industrial,Eldon Caldwell, detalló que esa entidad trabaja en tres líneas de acción que aporten al desarrollo económico del país.

La primera línea se centra en el desarrollo de dispositivos inteligentes para pequeñas industrias, el segundo en aplicaciones robóticas para la alimentación en flujo de materiales, y la tercera, en la elaboración de algoritmos especializados en la toma de decisiones robóticas en el campo cognitivo.

Desde la inauguración del laboratorio de robótica, en octubre del 2013 en la Sede Interuniversitaria de Alajuela, la Escuela de Ingeniería Industrial ha trabajado con cinco  pymes, en las que se ha enfocado en la realización de aplicaciones robóticas, con un precio igual o menor a los $500.

“Las personas se sorprenden de tener una aplicación robótica operando con menos de $500. La producción fabril, la interconectividad y transmisión de información se ha extendido. Es ahí cuando la Ingeniería Industrial es llamada a aportar en el tratamiento de nuevos sistemas y aplicación de diseños tecnológicos, que permitan a las empresas operar de una forma más sostenible, más económica y más funcional. Esto permite un mayor impacto social y económico para el país”, comentó el coordinador.

Según Caldwell, las empresas beneficiadas con el programa han reducido  sus costos de producción en un 35%, por medio del uso de la aplicación robótica.

MAYOR EFICIENCIA

La UCR ha utilizado en este proyecto $3.000, de los cuales $2.500 corresponden a las aplicaciones robóticas y $500 a gastos propios del proyecto.

La selección de microempresarios se efectúa en alianza con la Cámara de Industrias de Costa Rica (CICR). Graciela Montealegre, ejecutiva de proyectos de esta entidad, puntualizó que la selección de las pymes favorecidas se hace con sus asociados, quienes deben cumplir con tres criterios: necesidad definida, costo dentro del presupuesto de la UCR y que los conocimientos de los estudiantes puedan aplicarse en la empresa.

“No seleccionamos ni una empresa que no sea pyme, ni una microempresa que apenas esté empezando, pues el conocimiento de los estudiantes sobraría. Nosotros nos encargamos de estudiar que las necesidades de las pymes puedan ser cubiertas por el presupuesto de la UCR y por los conocimientos de los estudiantes”, agregó.

Otra de las alianzas que la Escuela de Ingeniería tiene para el desarrollo de proyectos es con el Centro Nacional de Recursos para la Educación Inclusiva (Cenarec), tendiente a  promover, mediante la robótica, la inserción al trabajo de personas con discapacidad.

Dentro de estos vínculos también se encuentran especialistas del Simulation Interoperability Laboratory de la Universidad Central de Florida, para el intercambio de conocimientos e innovaciones aplicadas.

El centro planea trabajar este 2015 con otras cinco pequeñas y medianas empresas, el Cuerpo de Bomberos y un proyecto de exploración robótica para escanear áreas arqueológicas.


Expo UCR mostrará avances robóticos nacionales

La robótica cognitiva pretende dotar de capacidades personalizadas a robots humanoides Nao. (Foto: Valeria García)

El Laboratorio de Investigación y Reconocimiento de Patrones y Sistemas Inteligentes (PRIS-Lab), de la Escuela de Ingeniería Eléctrica de la Universidad de Costa Rica (UCR), exhibirá proyectos de innovación tecnológica ligados a la biocomputación, la robótica cognitiva, inteligencia bioinspirada y emprendimiento científico, del 10 al 12 de abril en la Expo UCR de la Sede Rodrigo Facio.

La Expo UCR es una iniciativa que une el trabajo de las vicerrectorías (Investigación, Acción Social, Vida Estudiantil, Administración y Docencia) y las unidades académicas desde 1998, con el fin de mostrar los proyectos que desarrolla la UCR  para mejorar la calidad de vida de los habitantes del país, en áreas como ciencias de la salud, ingeniería y ciencias sociales.

El PRIS-Lab tendrá su puesto interactivo en el pabellón externo de la Facultad de Ingeniería y el objetivo será mostrar avances encontrados en diferentes áreas científicas, como la biocomputación.

En ese campo, en colaboración con la Facultad de Microbiología y la Escuela de Computación e Informática, se diseña una plataforma de análisis de datos genómicos para superar la resistencia a la terapia contra el cáncer y las infecciones microbianas.

El PRIS-Lab también exhibirá avances en robótica cognitiva. Este campo pretende dotar de capacidades personalizadas a robots humanoides Nao,  programados para jugar fútbol, actuar en una rutina con un bailarín profesional, y hasta guiar a personas, indicó Francisco Siles Canales, fundador del laboratorio y profesor de la Escuela.

Otros proyectos por presentar tienen que ver con computación científica, inteligencia bioinspirada y emprendimiento e innovación.

MANO ROBÓTICA

La UCR acaba de adquirir en Alemania una mano robótica que será parte de un robot humanoide. Su objetivo es ser un asistente del humano en acciones repetitivas, o bien, para ahorrar tiempo en una tarea determinada, como puede ser en una cocina o en una bodega industrial.

Dicha mano será anexada a un brazo robótico, y este a una plataforma móvil en la que trabajan estudiantes de la escuela. El dispositivo funciona mediante algoritmos que utilizan la percepción de los objetos o la intención de la persona para reaccionar.

El profesor Francisco Ruiz Ugalde informó que además están trabajando en la cabeza del robot humanoide, que tendrá un sensor en tres dimensiones, para determinar la forma del objeto con el que trabajará.

En el puesto de robótica habrá visitas guiadas para conocer el Laboratorio de Investigación en Robots Autónomos y Sistemas Cognitivos (Arcos-Lab), ubicado en el cuarto piso de la Ingeniería Eléctrica.


Experto japonés inspira a jóvenes

Un futuro con presencia cotidiana de los robots auguró el director del Laboratorio de Robótica Inteligente de la Universidad de Oaka, en Japón, Hiroshi Ishiguro, quien abrió el Robotifest UCR 2015, el pasado 23 de marzo, con una conferencia en la Ciudad de la Investigación.

Ishiguro es reconocido en el mundo por el diseño de robots con apariencia humana, a los que él llama “Actroid”, capaces de emular el comportamiento humano e incluso los movimientos faciales. Es autor de los libros ¿Qué es Robot? y Ciencia Android.

En su presentación, Ishiguro mostró videos con ejemplos de robots con apariencia humana en cuyo diseño ha participado y presento al público dos pequeños robots capaces de bailar y ejecutar diversos rituales.

Ante un auditorio lleno, Ishiguro explicó que su su proyecto intenta crear una “sociedad robótica” capaz de cuidar a los adultos mayores o servir de ayudante en  negocios. Comentó que los robots humanoides no son reemplazos para los seres humanos sino más bien su reflejo.

Ishiguro, considerado uno de los 15 científicos asiáticos más destacados del momento, dio el banderazo de salida al RobotiFest, un concurso internacional de robótica y tecnología abierta que pone diversos retos tecnológicos a los equipos participantes.

Las inscripciones para participar en el Robotifest ya están abiertas y la etapa final del concurso se efectuará en agosto. Los ganadores representarán a Costa Rica en el concurso Arliss, que se llevará a cabo en Estados Unidos, o harán una pasantía en Alemania.


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