La muerte del joven negro Michael Brown desató una ola de protestas en la comunidad de Ferguson, en el Estado de Misuri. (Foto: http://www.librered.net)
En pleno corazón de Estados Unidos, en las orillas del río Misisipi, la pequeña localidad de Ferguson es escenario, desde el pasado 9 de agosto, de protestas contra el asesinato de un joven negro, Michael Brown −de 18 años−, en manos de la policía.
En Ferguson, un barrio a unos 20 km de St. Louis, la mayoría de los residentes son de raza negra, pero sólo tres de los 53 policías de la localidad son negros. La comunidad local acusa al cuerpo policial de racismo.
Después de 6 días de que el joven negro Michael Brown murió por los disparos de un policía, las manifestaciones en la comunidad de Ferguson se mantenían. (Foto: www.razon.com.mx)
Brown, que debía asistir el lunes siguiente a su primer día de clases de una carrera técnica en la universidad, fue asesinado el sábado con disparos por la espalda hechos desde un carro policial, en medio de “circunstancias poco claras”, según medios locales.
La policía asegura que un agente encontró a Brown en la calle junto con otro hombre y que uno de los dos habría intentado robarle su arma al policía, lo que parece ser un hecho bastante improbable. Lo cierto es que, según un testigo del incidente, Michael Brown no tuvo ningún altercado con el policía.
Un testigo citado por un medio local dijo que el policía estaba en su vehículo e intentó retener al joven a través de la ventana. Brown logró soltarse y comenzó a correr; entonces, el agente salió de su patrulla y le disparó varias veces en el pecho y en la cabeza, a pesar de que, al parecer, tenía las manos en el aire.
ESCENARIO MODESTO
“Los vecinos de esta calle tranquila, con edificios bajos de ladrillo, poblados mayoritariamente por afroamericanos con pocos recursos, acusan a la policía de actuar frecuentemente con motivos racistas”, comentó un corresponsal del diario español El País, presente en el lugar.
La muerte de Brown “ha liberado una ira y un rencor enquistados durante mucho tiempo”, agregó.
La tensión venía aumentando desde hace tiempo en la zona, afirmó un hombre de unos 40 años, al lado de una farola repleta de osos de peluche, globos y cartones en recuerdo de su muerte.
“No confiamos en la policía. A algunos de los vecinos les da miedo que si cuentan lo que vieron en los disparos sufrirán consecuencias”, externó una mujer treintañera, refiriéndose al caso y citada por el mismo corresponsal de El País.
“Booker, reverendo de la iglesia metodista africana de Saint Paul −otra ciudad dormitorio de esta zona−, encabezó la tarde del 13 de agosto una caminata de “paz, amor y plegarias”, a lo largo de un kilómetro de la avenida, que concluyó en el epicentro de las protestas: la esquina de la calle en la que murió Brown. Un día antes, otros reverendos negros organizaron caminatas y vigilias en honor al joven, “lo que parece ser una suerte de competición entre iglesias y organizaciones de la comunidad negra”, agregó el corresponsal.
El martes 12, el reverendo negro Al Shaprton, activista de derechos humanos influyente en la zona, había aparecido en una conferencia de prensa con los padres de Brown, en las afueras del Palacio de Justicia de St. Louis, para pedir una investigación objetiva del caso y que revelara el nombre del agente involucrado en el caso.
OBAMA
Con la crisis en pleno desarrollo, después de cuatro días de protestas que amenazan con adquirir trascendencia nacional, el presidente Barack Obama prometió una investigación a cargo del Departamento de Justicia.
“Sé que los acontecimientos de los últimos días han encendido fuertes pasiones (…) exhorto a todos en Ferguson, Misuri, así como al resto del país, a recordar a este joven a través de la reflexión y el entendimiento”, expresó Obama, sin que sus palabras contribuyeran a detener las protestas.
Por otra parte, hubo advertencias de que la situación tomaría cariz nacional. “El Departamento de Policía de Los Ángeles, California, alertó por posibles desmanes en la ciudad después de que la policía mató a tiros a un joven negro de 24 años, en circunstancias que no aparecen del todo claras”, publicó el periódico La Red.
Tres días después de la muerte de Brown, otro hombre murió a manos de la policía de la ciudad. Fuentes policiales confirmaron que cerca de la 1 a.m. se produjo un tiroteo con hombres enmascarados y uno de ellos murió en el incidente.
BBC Mundo puso en su sitio en Internet un corto video sobre los disturbios en la localidad, el cual tituló “Los violentos disturbios raciales en Misuri” (www.bbc.co.uk/mundo/video_fotos/2014/08/140814_video_disturbios_misuri_eeuu_ch.shtml).
El corresponsal de El País, al describir el ambiente la semana pasada, señaló que a las 5 p.m. los cinco carriles de Florissant −una amplia avenida con algunos establecimientos comerciales y humildes casas a los lados− estaban ya cortados por un grupo de unas 300 personas, en su mayoría afroamericanos, que coreaban: “¡No nos movemos!”, “¡Sin justicia no hay paz!”, y portaban pancartas e imágenes en homenaje a Brown.
“Casi a las 6 p.m. –agregó– la policía quiso demostrar que se le había agotado la paciencia: cuatro imponentes vehículos blindados de las fuerzas especiales del condado se plantaron frente a los manifestantes. De los vehículos descendieron una cincuentena de agentes −a simple vista ninguno era afroamericano− con indumentaria militar y con un rifle de largo alcance al hombro. Encima de cada vehículo había un tirador posicionado apuntando a los manifestantes”. Más tarde, se desataron nuevamente protestas violentas y varios manifestantes fueron detenidos.
IDENTIDAD
Pese a la intervención de Obama, la policía de Ferguson se ha negado a revelar la identidad del oficial involucrado en el caso de Brown, lo que ha aumentado la tensión.
La policía alega que ha habido amenazas en contra del oficial, lo que la llevó a resguardar su identidad. Se trata de un funcionario con seis años de antigüedad y que, por ahora, se ha trasladado a funciones administrativas.
Ante esa realidad, el grupo de piratas informáticos Anonymous dio a conocer el nombre del policía que mató a Brown, pero los medios de prensa, en general, han evitado repetirlo, en espera de confirmaciones oficiales. En un video de casi tres minutos, Anonymous denunció la represión policial en Ferguson y convocó a nuevas protestas.
El grupo, que al parecer ya disponía de toda la información sobre el expediente, amenazó con divulgar la fotografía del agente y más tarde su domicilio, si la policía seguía guardando secreto sobre su identidad.
Mientras se desarrollaban estos acontecimientos, un comunicado de prensa de la Policía Nacional informaba el pasado miércoles en Panamá que “oficiales de la Guardia Nacional de Misuri ofrecieron una jornada de capacitación a funcionarios de los estamentos de seguridad (de ese país), en misiones por casos de tragedias aéreas o navales, rescates, incendios y ayuda médica especializada”.
También aquí, en Costa Rica, el Ministerio de Seguridad Pública daba a conocer el lunes 11 que tres oficiales del Servicio Nacional de Guardacostas y el jefe de prensa de dicho ministerio participaban en un ejercicio multinacional patrocinado por el Comando Sur de Estados Unidos, denominado PANAMAX 2014, que se desarrollaba en Jacksonville, Florida, en Tucson, Arizona y en la Base de San Antonio, del 2 al 16 de agosto.
La nota decía que el objetivo del encuentro, que reunió a 17 naciones, era asegurar la defensa del canal de Panamá ante cualquier hecho violento que se presente en la zona.
