Un análisis planteado por un experto internacional sobre la situación económica y actuarial del régimen de Pensiones de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM) de la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS), plantea que el sistema es sostenible.

Además, señala que esta discusión se ha convertido en un tema politizado y no técnico, sobre todo entre la Superintendencia de Pensiones (SUPEN) y la institución, y no ha quedado clara la sostenibilidad del régimen.

El régimen de pensiones de IVM experimentó una serie de reformas en el 2005 para estabilizar financieramente el sistema para los siguientes 25 años, luego de llegar a un acuerdo tripartito entre empresarios, trabajadores y gobierno.

La reforma también incluyó compromisos políticos para extender la cobertura del sistema de pensiones a los trabajadores independientes.

En este sentido, señala el documento -el cual se hizo público al circular por medios electrónicos desde hace varias semanas- que los cálculos actuariales de la CCSS coincidieron y fueron avalados por expertos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y afirma que el informe contratado por la SUPEN a la empresa Nathal Actuarios y Consultores, fue derrotado técnicamente.

Adicionalmente, el análisis plantea que la SUPEN ha venido impulsando un proyecto de ley que reduciría las comisiones que cobra el Sistema de Recaudación (SICERE) a todas las operadoras de pensiones y que es administrado por la Caja, pues según la entidad, esas comisiones son muy elevadas y busca generar otras alternativas para recaudar los aportes.

El experto se pregunta si este proyecto será una forma de abrir espacio para introducir otros entes que cobren comisiones, a pesar de que la CCSS es el recaudador más eficiente de pensiones en Latinoamérica.

Además, argumentó que de lograr la SUPEN regular las comisiones que fija el SICERE,  se debe hacer una modificación constitucional y asegura que se trataría de una afectación directa a los afiliados, como desempleados temporales, mujeres con licencia de maternidad, discapacitados temporales, emigrantes, y trabajadores lanzados a la economía informal.

Como conclusión establece que la SUPEN ha experimentado una derrota técnica y no ve la razón por la cual se empeña en respaldar sus análisis con respecto a la sostenibilidad de pensiones.

El documento acepta que la Caja tiene problemas que deben solucionar, pero afirma que la entidad se ha visto expuesta a gran cantidad de políticas irresponsables, que malograron sus prácticas de sana gestión y que los cambios que experimentó el régimen se debieron a procesos de concertación social y se deben respetar.

De acuerdo con Luis Chavarría, secretario general de la Unión Nacional de Empleados de la Caja y la Seguridad Social (UNDECA), este es un tema que han denunciado los sectores sociales, pues la CCSS está siendo objeto de fuertes ataques de personas que están interesadas en desprestigiar los servicios, tanto de salud como de pensiones, con propósitos bien definidos.

“En el caso del régimen de IVM, creo yo, que están tras el traspaso de los recursos a las operadoras privadas, ya que lógicamente los fondos que estas administran cobran un porcentaje de intereses para generar ganancias. En este sentido, no podemos permitir que el principal director de la SUPEN continúe haciendo constantes ataques al sistema”, dijo el dirigente de la UNDECA.

Chavarría señaló que la SUPEN eventualmente se podría beneficiar, ya que la entidad cobra un porcentaje por mantener la supervisión de los fondos de operadoras de pensiones privadas y supervisar el IVM significaría triplicar sus ingresos.

Por su parte, Agustín Páez, miembro de la junta directiva de la Caja, aseguró que el documento lo dejó sumamente impresionado y le dio mucha tranquilidad al ver que expertos consideran que el régimen de IVM sigue siendo sostenible.

“En el momento en que leí el informe me di cuenta que se daba un apoyo a la Caja Costarricense del Seguro Social y que se planteaba que las cifras de la entidad y la OIT eran correctas”, comentó Páez.

Asimismo, el superintendente de pensiones, Edgar Robles, aseguró que este documento no era oficial, sino que se trataba de un correo que se había distribuido a través de la red, por lo cual no se referiría (véase recuadro “Situación del régimen de IVM es crítica”).

GERENCIA CONTINÚA INVESTIGACIÓN

Por otra parte, hay que recordar que se han dado una gran cantidad de cuestionamientos sobre la utilización y el manejo de los recursos del Fondo de IVM, por autoridades de la Gerencia de Pensiones.

Ante esta situación la junta directiva de la Caja tomó la decisión de abrir una investigación en diciembre pasado y hace unos días acordó ampliar por cuatro meses la investigación que se lleva a cabo a lo interno de la Gerencia de Pensiones de la Institución.

Esto, luego de conocer un informe presentado por Dinorah Garro, gerenta de Pensiones interina, en el cual se cuestiona la gestión administrativa a lo interno de la entidad.

“Hemos dado seguimiento constante a las investigaciones que se llevan a cabo con la separación del gerente de Pensiones, Miguel Pacheco, y estamos atentos a que se realice un proceso transparente y profundo para detectar todas las aparentes anomalías que se venían dando”, dijo Chavarría.

Sobre este particular, el directivo Agustín Páez explicó que ya se cuenta con un informe preliminar, pero quienes están llevando a cabo la investigación requieren de un poco más de tiempo.

No obstante, manifestó el directivo, a lo interno de la Junta están contentos, ya que van por el camino correcto y consideran que la situación del régimen de Pensiones no es tan difícil de resolver.

“Creemos que la principal razón de los problemas de IVM tienen que ver con la deuda que el Estado ha acumulado a través de los años, pues ha puesto presiones sobre el sistema. No hay indicios de que exista un peligro inminente o severo sobre las pensiones y los derechos adquiridos de los cotizantes a través del tiempo”, puntualizó Páez.

De forma preliminar, detalló el directivo, el informe lanza indicios de que las cifras estimadas por el estudio actuarial de la Caja y el de la OIT son correctos y que las estimaciones de sostenibilidad hasta el 2036 se van a mantener.

“Claro, queremos estar seguros en un 200%, y por eso continuaremos con el proceso de investigación durante cuatro meses más. Las señales son auspiciosas y buenas”, indicó Páez.

Jerarca de la SUPEN:

Situación del régimen de IVM es crítica

En una corta entrevista con UNIVERSIDAD, el Superintendente de Pensiones, Edgar Robles dio a conocer su criterio con respecto al Régimen del IVM.

Cuál es su posición con respecto al documento que ha estado circulando por medios electrónicos?

-Es un documento esencialmente retórico que no presenta cifras, estudios o evidencia de lo que afirma, que ya de por sí es falso en su gran mayoría. Por ejemplo, es una mentira que la SUPEN haya aprobado comisiones que mejore los ingresos de las operadoras de pensiones, al igual que es falso que la comisión de recaudación de SICERE de la CCSS sea baja, pues las cifras de todos los sistemas de América Latina muestran que Costa Rica tiene los costos de recaudación más elevados. Si le quitamos estos puntos al documento, el resto de la argumentación queda en el aire y se disipa lo que la SUPEN  considera que es una cortina de humo para tapar los verdaderos problemas de sostenibilidad del Régimen de IVM. El sinsabor que deja este documento es que sea un funcionario de la OIT el que realice un análisis tan vago del tema, lo cual le hace perder credibilidad a esa institución.

En relación con los ataques infundados, tanto personales y como hacia la SUPEN, se está considerando emprender una demanda legal en los Tribunales de Justicia por difamación.

En su criterio, ¿cuál es la situación actual del Régimen de Pensiones de IVM?

-Es una situación crítica, pues desde ya se están tomando recursos de la reserva para pagar pensiones, cosa que la SUPEN consideraba que iba a pasar hasta el año 2015 y la CCSS hasta el año 2028. A pesar de que el año pasado se incrementó la tasa de aportación en 0,5% de los salarios, no se percibe una mejora en los ingresos del Régimen de IVM, los cuales están siendo castigados por las bajas tasas de interés, por el incremento en el desempleo y subempleo, y por la dinámica en la afiliación en donde se están sustituyendo trabajadores asalariados por trabajadores independientes, los cuales cotizan con un menor porcentaje y con un menor salario. Añadido a esto, no ha existido un control de los gastos pues a pesar de la crisis que el país experimentó hace dos años, los gastos nunca se contrajeron y por el contrario siguen creciendo por encima del 20%. Esto significa que aparte del problema actuarial de sostenibilidad, también ha existido un problema de gestión.

Algunos sectores cuestionan la posición de la SUPEN y aseguran que la entidad lo que busca es establecer mayor control en el régimen de IVM de la Caja.  Cuál es su posición al respecto?

-Es correcto, nuestros esfuerzos van encaminados a ejercer un mayor nivel de control sobre un Régimen que nunca se ha acostumbrado a rendir cuentas a sus dueños, o sea, a los afiliados cotizantes.