Vicente Del Bosque, técnico de España, jugó contra Italia sin delanteros en la Eurocopa; Daniel Casas podría repetir la fórmula en el Saprissa.
El uruguayo Daniel Casas, nuevo director técnico del Deportivo Saprissa, podría tener la solución táctica para empezar el campeonato.
Preocupado porque la dirigencia del equipo no encuentra un centro delantero que pueda cumplir como lo hicieron años anteriores figuras como Evaristo Coronado, Guillermo Guardia y Álvaro Saborío, el entrenador charrúa de los tibaseños insinuó, el día que lo firmaron, que tiene en mente jugar con tres mediocampistas creativos, dado que en la mitad del campo, al Saprissa le sobra mano de obra, mientras que escasea en ataque, más si Jairo Arrieta fue vendido a la MLS, no pegó del todo el Alejandro Tanque Castro y fue un fiasco el argentino Gustavo Tortugol Fernández. También se marchó al fútbol estadounidense, Josué Martínez.
Para resolver este problema táctico, nada más y nada menos que Vicente Del Bosque, el director técnico de la selección campeona del mundo y monarca de la última Eurocopa —España—, le ofrece a Daniel Casas una solución: jugar el campeonato sin línea delantera. Sí, sin línea delantera.
El famoso Bigotón inventó un nuevo sistema táctico y lo puso en práctica en el primer partido de los españoles en la nueva edición de la Eurocopa (que se juega en Polonia y Ucrania) contra los tetracampeones del mundo, Italia. En ese partido, la Furia Roja formó con un 4-1-5 y salió sin delantera.
Para el juego inaugural de España, Del Bosque formó con Casillas en el marco; Arbeloa, Piqué, Ramos y Alba como defensas; Xavi Alonso como medio de marca y juntó en la cintura a cinco de sus futbolistas más talentosos y creativos, dispuesto a marear y despedazar la retaguardia italiana. Sin embargo, ese choque entre las dos potencias del Viejo Continente terminó empatado 1-1.
Jugaron en la cintura española: Cesc Fábregas, Xavi Hernández, Andrés Iniesta, David Silva y Sergio Busquets; y adelante: nadie.
Los tres delanteros natos que llevó Del Bosque a la Eurocopa se quedaron sentados: Fernando El Niño Torres, Álvaro Negredo y Fernando Llorente. Esto provocó una polémica en la prensa deportiva española tras conocerse la formación.
EXPLICACIONES TÁCTICAS
Cesc Fábregas, que fue la inesperada novedad del once español y que fue ubicado por su entrenador como un “nueve falso o retrasado”, marcó el gol del empate contra Italia y calentó el debate en todo el entorno futbolístico de España, extrañado de que la Furia Roja jugara sin un centro delantero nato.
Iniesta, Fábregas y Silva se presentaron un poco más adelantados ante la defensa italiana y Del Bosque lo explicó de esta manera.
“Buscamos la seguridad con el balón ante un rival que nos iba a presionar y debíamos de tener jugadores que combinaran bien, tuvieran posesión del balón y profundidad. No era conveniente quedarnos estacionados ante un rival que sabe marcar”, explicó don Vicente al final del encuentro.
«Cesc es un centrocampista muy especial, porque no es un delantero centro al uso, pero sí tiene mucha y buena llegada. Además, nos daba superioridad en el centro del campo y no dábamos referencia al contrario. Tiene sus cosas positivas y negativas y hemos tratado de utilizar aquello que creíamos que era lo mejor», continuó el técnico en su análisis de la decisión de jugar sin un “9”.
Ese fue el plan del técnico para el partido frente a Italia. Su sorpresa de la alineación estuvo arriba y el debate sobre quién sería el punta y que tuvo en vilo a la prensa deportiva ibérica se resolvió a favor de Cesc.
Un “falso” nueve y movilidad en un centro del campo de exquisitas cualidades técnicas, con Xavi Hernández, Sergio Busquets y Xabi Alonso más atrás, y con David Silva, Andrés Iniesta y Cesc. Un ataque sin zonas fijas, con libertad de acción para estos tres últimos, dispuestos a generar todos los espacios y dilemas posibles a la novedosa defensa italiana de tres centrales de Cesare Prandelli.
La creatividad, la llegada y la inteligencia ofensiva del medio campo de la Roja contra la competitividad y la fortaleza atrás de la zaga azzurra, que solo recibió dos goles en sus diez duelos en la clasificación para Polonia y Ucrania y que respondió con experiencia, colocación y convicción a la fórmula de España.
SAPRISSA A IMITAR
El Deportivo Saprissa se presenta a la pretemporada con una nómina repleta de mediocampistas. Se retiró la máxima figura en esa zona, Walter Centeno; antes se había marchado Alonso Solís e incluso dejaron ir a Armando Alonso, hoy con Alajuelense.
Sin embargo, inició Saprissa la preparación para el nuevo torneo con un cajón inundado de mediocampistas: Yeltsin Tejeda, David Guzmán, José Carlos Cancela, Mauricio Castillo, Fernando Paniagua, José Luis Cordero, Luis Diego Cordero, Deiver Vega, Juan Bustos Golobio y Manfred Russell.
Prácticamente un equipo de fútbol completo, pero todos son volantes, de manera que a Daniel Casas le puede sonar muy bien ese experimento que tuvo el técnico de España y que puede marcar una revolución en el fútbol moderno, que de por sí se viene anunciando cada vez que se varían las formas del juego.
Aquel viejo 3-2-5 de los años 50, se convirtió en el famoso 4-2-4 (se eliminó un delantero); luego se pasó a un 4-3-3 (se eliminó un delantero); continuó con el 4-4-2 (se eliminó un delantero) y hoy se juega con diferentes variantes defensivas, pero con solo un delantero, como lo hizo Costa Rica en Italia 90, con Claudio Jara aislado adelante.
Viene ahora Vicente Del Bosque a decir que se puede jugar sin delantera. Si España, el mejor equipo del mundo lo hace y entonces… ¿por qué no el Saprissa, que como España, está repleto de hombres, figuras y talento en el línea medular, y no tiene delanteros?
¿Se adelantó Casas a la idea de Del Bosque cuando insinuó que Saprissa podía jugar con tres volantes de llegada? ¿Qué les parece un Saprissa con Yeltsin Tejeda en el papel de Xavi Alonso y luego Cancela, Cordero, Castillo, el otro Cordero y Vega como los cinco volantes de ataque?
España parece que le iluminó al Saprissa la ruta táctica para el nuevo campeonato.
