La Asociación Nacional de Técnicos y Trabajadores de la Energía y Telecomunicaciones (ANTTEC) es de la tesis de que en el área de las telecomunicaciones quedó estructurada una red de empresas alrededor del ICE que logra captar importantes licitaciones a finales de la década de los años 80, cuando era presidente ejecutivo Antonio Cañas Mora, designado en la administración Arias Sánchez. Es por ello que presentaron una denuncia formal ante la Comisión legislativa Mixta para el Fortalecimiento y Modernización del ICE.
Tras un análisis de seguimiento y estudio de la conformación de las empresas en el Registro Nacional (ver cuadro Red atrapa al ICE), esta agrupación sindical concluye también que estas compañías pertenecen a personas que fueron en algún momento altos funcionarios de la institución.
Con la denuncia ante la comisión legislativa, ANTTEC pretende que integren este análisis hecho en el sector de telecomunicaciones en 1992 al reciente escándalo con el pago de premios y comisiones a políticos de alto nivel, empresarios, funcionarios y directivos del ICE por parte de la empresa Alcatel. Esta transnacional francesa obtuvo la licitación de las 400 mil líneas de telefonía celular, una de las mas grandes adjudicaciones que ha hecho la institución en este sector.
Según el acta número 12 del período ordinario del 24 de junio de 1992, Jorge Arguedas, presidente de ANTTEC, explicó que en 1987 se llevó a cabo un intento por privatizar el sector de las telecomunicaciones en el gobierno del expresidente Oscar Arias Sánchez.
«Cuando fracasó el intento de privatización del sector, se vinieron a dar dentro de la institución una serie de acciones para poder ir privatizando en pequeños segmentos, en pequeños servicios, la institución», comentó en ese entonces Arguedas.
EL ORIGEN DE LA RED
Ricardo Segura, miembro de la Comisión Política del FIT, explicó a UNIVERSIDAD que los orígenes de la intrincada red alrededor del ICE se remontan desde hace décadas. Sin embargo fue con la empresa de servicios celulares Millicom que se agravó el problema
En 1983, dijo Segura, el ICE había planteado una alianza estratégica con la empresa estadounidense New Hector para la telefonía celular, pero en 1985 por influencia del expresidente ejecutivo y exgerente del ICE, Antonio Cañas Mora, y Rodrigo Montealegre Mendiola aparece en la empresa Comcel y Millicom.
En 1987 Millicom logró obtener una concesión estatal para operar un sistema de telefonía celular y en abril de 1989, en el gobierno de Arias Sánchez por medio del decreto 268, inició operaciones en el país. Luego de una acción de inconstitucionalidad presentada por el Sindicato de Ingenieros (SIICE) ante la Sala Constitucional y declarada con lugar en 1993; la compañía se ve obligada a dejar de operar bajo el argumento de que las bandas de celulares son monopolio exclusivo del Estado. Tras una fuerte presión de las organizaciones sociales del ICE que pidieron su expulsión, Millicom abandona el país en 1995.
Segura indicó que para abrirle el camino a esta transnacional de los celulares se dieron violaciones en los procesos normales que debe cumplir la institución para adjudicar.
RED DE REDES
El estudio del caso Millicom llevó a la ANTTEC a descubrir nuevas relaciones de empresas que a su juicio, nacieron para ser adjudicatarias del ICE y que entre sus socios y juntas directivas se encontraban directivos de la institución en esos momentos.
Por ejemplo, Antonio Cañas Mora es reconocido por su trayectoria de 25 años en el campo de las telecomunicaciones, pero se le critica que paralelamente haya creado empresas donde aparecen sus socios y familiares, como el caso de Radio Mensajes, que participaban en las licitaciones públicas del ICE.
Arguedas sostiene que la empresa Contel (Contestadores Telefónicos), también de Cañas, habría utilizado infraestructura del ICE para ofrecer el servicio de contestador telefónico a oficinas que carecen de recepcionista y lo contrataban con esta compañía.
Elmec, recientemente allanada por el Ministerio Público, también es una empresa que participa en las licitaciones del ICE. Carlos Espinach Phillips quien fue representante de Costa Rica ante el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) en el gobierno de José María Figueres Olsen, participa de esta empresa junto con otras del Grupo Zeta.
Otras compañías que licitaban para el ICE son LASA (Lachner y Saenz) de Carlos Lachner Guier. Corporación Gerencial que daba servicios de contestadores telefónicos, también de Lachner y con la participación de Mario Burgos Céspedes como apoderado generalísimo, quien también es directivo de Radiográfica Costarricense (RACSA), directivo del ICE y dueño de Laboratorios Luz en 1992.
Aparecen también relacionadas la empresa Consorcio de Electrificación Rural S.A. que a su vez es parte de la compañía Cañas y Sequeira, socia de Corporación Gerencial que es la dueña de Contel.
La empresa de origen francés, Alcatel, para adjudicarse el mercado de líneas celulares también se incluye en la red pues dos ex funcionarios públicos del ICE ahora son parte de la empresa. Se trata de Akion Ching Chang y Armando Bonilla Porras, este último se encargó de las licitaciones dentro de la Institución.
«Nos parece que hay toda una estructura bastante bien montada y bien diseñada, para desaparecer el sector de telecomunicaciones del ICE», concluyó Jorge Arguedas.
