El Gobierno no piensa enviar a discusión ley para los indígenas, en las actuales sesiones extraordinarias.
Un grupo de indígenas de distintas partes del país permanece en las afueras de la Casa Presidencial desde los primeros días de marzo, con el fin de presionar al Gobierno para que ponga a discusión de la Asamblea Legislativa el proyecto de ley que les permitiría a sus comunidades un desarrollo autónomo.
Ellos le han pedido al Gobierno que incluya en estas sesiones extraordinarias del Poder Legislativo y que concluyen a finales de abril, el proyecto “Ley de desarrollo autónomo de los pueblos indígenas” (expediente No. 14.352). Durante los periodos de sesiones extraordinarias el Gobierno establece la lista de proyectos por discutir.
Consultados el miércoles 18 de marzo acerca del resultado de la presión que realizan contiguo a la Casa Presidencial, José Marino Delgado y José René Figueroa –ambos de la comunidad indígena de Salitre, en el cantón de Buenos Aires-, dijeron a este Semanario que hasta esa fecha era infructuosa.
Según detallaron, Alonso Luna -asesor del ministro de la Presidencia, Rodrigo Arias- les comunicó que el Gobierno no pensaba mandar el referido proyecto a discusión de los diputados en estas sesiones, pues tiene otras prioridades para la agenda.
Delgado y Figueroa dijeron que se mantendrán en las afueras de la sede gubernamental, hasta que consigan llevar a discusión legislativa dicho texto, e incluso anunciaron que pensaban traer más indígenas para que se sumen a la protesta cuando el vicepresidente de Estados Unidos –Joseph Biden- visite Costa Rica, el próximo 29 de marzo.
Los indígenas han contado con el apoyo de diversas organizaciones, como la Iglesia Luterana; Servicio Paz y Justicia; Sindicato de Empleados de la Universidad de Costa Rica (UCR); diputados de los partidos Acción Ciudadana, Movimiento Libertario y Liberación Nacional; obispo Ángel Sancasimiro; grupos de la UCR y de la Universidad Estatal a Distancia; y otros.
Delgado comentó que a este proyecto de ley se oponen algunos sectores indígenas, ya que de ser aprobado implicará la desaparición de la Comisión Nacional Indígena (CONAI), que en su opinión no defiende los intereses de los pueblos originarios costarricenses.
APROBACIÓN
El expediente 14.352 en el 2006 fue enviado a consulta de 24 territorios indígenas, por decisión de la comisión legislativa que lo analizó y en cumplimiento del Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo sobre pueblos indígenas y tribales. Una vez que lo sometieron a discusión de los aborígenes, la comisión dictaminó el proyecto positivamente y de manera unánime.
De ser aprobada esta ley, los diversos grupos indígenas podrán tener un desarrollo autónomo reconocido por el Estado, con sus propias formas de organización, representación social y administración, en el marco de sus costumbres y tradiciones.
También tendrán derecho a la propiedad de sus territorios y de los sitios de carácter espiritual, ceremonial, y cultural, así como la posibilidad de practicar su medicina natural tradicional en forma preventiva y curativa, incluido el patentamiento y comercialización de estas.
Otra opción que tendrán es la aplicación del derecho indígena, con sus propias cosmovisiones como fuentes y compatibles con el ordenamiento jurídico del país.
El indígena José Marino Delgado destacó que esta nueva legislación les dará la potestad de tomar decisiones propias en torno a su cultura y en general a todo lo relacionado con sus vidas, dentro de un sistema que reconozca la realidad multicultural de sus pueblos.