La Corte Internacional de Justicia ordenó hoy el retiro de personal militar y civil en la isla Calero, como parte de las medidas cautelares solicitadas por Costa Rica ante la incursión de Nicaragua en esa zona fronteriza.
Por unanimidad, el tribunal internacional indicó cada parte se abstendrá de enviar y mantener agentes civiles, de policía y seguridad en la zona.
La única excepción a esta orden se dará para permitir el ingreso de agentes civiles costarricenses “encargados de la protección de medio ambiente”, que deben solicitar una autorización previa.
La CIJ rechazó la solicitud costarricense de que se detengan las labores de dragado en el río San Juan, siempre y cuando los trabajos que se realicen no agraven la situación del daño ambiental y las tenciones entre ambas partes.
Los jueces internacionales aclararon que el dictado de estas medidas cautelares no afecta de forma alguna la resolución por el fondo que deberá realizar la CIJ posteriormente.