En el orden usual, Saray Córdoba González, Carla Jara Murillo, Sandra Araya Umaña y Bruno Lomonte Vigliotti, miembros de la comisión especial del Consejo Universitario. (Foto: Andrea Jiménez)
Se busca que el acceso abierto incremente la visibilidad y presencia en Internet de la investigación científica de la UCR.
Una comisión especial del Consejo Universitario analiza la conveniencia de que la Universidad de Costa Rica (UCR) cuente con una política de acceso abierto que responda a las exigencias del desarrollo científico y la adecuada divulgación de la producción del conocimiento a la sociedad costarricense.
El órgano colegiado le estableció a dicha comisión como plazo máximo el 14 de junio del 2014 para que presente el informe.
Al solicitar el estudio, el Consejo Universitario tomó en consideración que la UCR invierte muchos recursos públicos en actividades académicas, cuyo producto principal y visible es la publicación científica, por lo que una forma de retribuir la inversión que hace la comunidad costarricense es lograr que las publicaciones sean de acceso público.
La comisión es coordinada por Saray Córdoba González, miembro del Consejo Universitario, y con ella trabajan Bruno Lomonte Vigliotti, del Instituto Clodomiro Picado, Carla Jara Murillo, del Instituto de Investigaciones Lingüísticas, y Sandra Araya Umaña, de la Escuela de Trabajo Social.
Según recordó Córdoba, el tema de acceso abierto surgió hace 12 años, como parte de un movimiento mundial, debido al excesivo costo de las revistas científicas que limitaba el acceso a ese conocimiento científico.
La primera declaración sobre el tema –comentó– fue la de Budapest, según la cual el acceso abierto es el derecho que tienen las personas de consultar, descargar, traducir y copiar toda la información que está en Internet, sin barreras legales ni comerciales, siempre que se reconozca la responsabilidad de sus autores.
Destacó que, en ese sentido, existen tres principios fundamentales: el primero, todo lo que se financia con fondos públicos debe ser de acceso público; el segundo que, a más apertura, más innovación y mayor desarrollo; el tercero, el conocimiento es una construcción social que se da a través del tiempo.
En la UCR, las acciones concretas en este campo las ha implementado la Vicerrectoría de Investigación, por medio del Repositorio Institucional Kérwá, pero la Universidad carece de políticas generales que conduzcan al autodepósito de las publicaciones que se generan como producto de la investigación financiada por la Institución.
VENTAJAS DEL ACCESO ABIERTO
En criterio de Saray Córdoba, la experiencia ha demostrado que el acceso abierto incrementa la visibilidad y presencia en Internet de la investigación científica, lo que, a su vez, promueve la eficiencia, la innovación y el progreso científico.
Asimismo, permite un mayor impacto de las investigaciones, pues son más citadas y descargadas, y facilita un acervo científico único, de fácil acceso, que sirve para evaluar la producción científica institucional de una manera más eficiente.
Actualmente, existen cerca de 340 universidades en el mundo, agencias financieras de investigación y entidades gubernamentales, internacionales y privadas, que tienen como mandato disponer en acceso abierto su producción científica. Además, muchas editoriales de revistas han decidido respetar los mandatos institucionales de acceso abierto al posibilitar en el repositorio institucional el depósito de artículos publicados por ellas.
Córdoba destacó que, de aprobarse en la UCR una política en ese sentido, esta Institución sería la primera universidad centroamericana en dar este paso tan importante.
