Más de 40 objetos, inspirados en tradiciones religiosas de muy diversas procedencias, componen la exposición O’Culto (Objetos de Culto), que el artista Carlos Poveda inauguró el pasado 14 de julio en la Sala No. 2 del Museo de Arte y Diseño Contemporáneo (MADC).
Poveda parte del lenguaje artístico propio, desarrollado a lo largo de su carrera para adentrarse en la estética del pensamiento religioso y al hacerlo invita al público a interpretar e incluso “inventar” ante los objetos mostrados, con lo cual logra de hecho transgredir la rígida lógica religiosa, según la cual las verdades son únicas e incuestionables.
Durante una conferencia de prensa, Poveda expresó que “lo hermoso de esto no es solo lo que yo produzca, sino lo que la gente inventa sobre el trabajo”. Tras reconocer que esa reflexión puede ser “religiosa”, manifestó que “tengo respeto por todas las religiones y culturas”.
Así, declaró a UNIVERSIDAD que difiere del concepto de religión, en el sentido de que deja espacio abierto a la imaginación del espectador.
Mencionó que una de las principales satisfacciones, que encuentra en O’Culto, es que el arte no solo tenga un fin “culturizante”, sino que sea un medio poderoso de comunicación de mensajes, que van desde lo político hasta lo estético, de manera que sirve para “reflexionar y alimentar la mente de los espectadores”.
Además, expresó que gusta de inventarse una narrativa detrás de cada pieza: “es parte de la diversión; el arte se hace una vivencia”.
SUMA DE UNIVERSOS
Poveda es un artista autodidacta, que se zambulló en el mundo del arte desde finales de los años 50, cuando entró en contacto con el legendario Grupo 8, conformado por artistas como Felo García, César Valverde, Rafa Fernández y Néstor Zeledón.
“Su trabajo fue mi primera escuela; me fascinó y también me influenció su actitud contestataria”, dijo el artista en una entrevista con UNIVERSIDAD en el 2004, sobre una exhibición antológica de su trabajo que bajo el título “Imaginario Irreverente” se mostró en el Museo de Arte Costarricense (MAC).
Hoy, 7 años después y a propósito de O’Culto, el artista se considera un producto del encuentro cultural en una Costa Rica que en la década de los 50 y 60 apenas empezaba a descubrir el arte moderno.
“Antes que nada soy un investigador de la estética. Desde mi periodo más temprano ya era un irreverente y descubrí un universo gráfico a través de trazos y manchas”, agregó.
Sin embargo, su trabajo evolucionó más allá de la creación pictórica bidimensional y avanzó hacia el ensamblaje y la escultura, de manera que -según sus propias palabras- encontró otro universo, esta vez de texturas. Comenzó así a construir objetos, de manera que de dibujar o pintar pasó a atornillar o pulir.
Detalló en ese sentido, que comenzó a trabajar la figura de los árboles y de ahí continuó hacia el tema de la alimentación: “otro universo de posibilidades se abrió al elaborar alimentos sobre platos” y la experiencia recogida con ellos es que “no solo llegan a la gente visual o culturalmente, sino a sus mismas entrañas”.
Todos esos universos que Poveda se abrió a lo largo de su carrera se encuentran visibles en O’Culto, donde se conjugan elementos como el acero inoxidable, la fotografía, polietilenos, maderas y resinas diferentes.
Recordó que todo surgió durante un viaje a un país al norte de Europa, en el que observó una gran fila de gente y al acercarse comprobó que esperaban para llegar a una mesa, donde un cura tenía una cajita que destapaba ante cada persona, las cuales se acercaban y besaban algo. Nunca supo qué contenía la cajita, pero esa experiencia sumada al impacto que le provocan situaciones como las autoflagelaciones, las personas que se cuelgan con ganchos que atraviesan su piel o las intervenciones corporales, “abrió todo un nuevo universo para reflexionar”.
“Fuego primigenio” es la pieza que abre la exposición, la cual a continuación está dividida en diferentes partes. La primera se denomina “Íconos” y en ella se exploran ciertas figuras humanas que no son sugeridas figurativamente, sino que se insinúan “a partir del misterio que encierran; cada persona que lo vea va a inventar que las figuras tienen halos, por ejemplo”, acotó.
La segunda parte es “Reliquias” y presenta los objetos exhibidos en espacios restringidos, como nichos. En “Amuletos y Talismanes” se encuentran piezas como báculos de poder, árboles cósmicos, o figuras humanas que el artista denominó “shamanes”. Es en esta sección donde se aprecia más claramente una influencia multicultural.
Finalmente, ante “Ofrendas y exvotos”, Poveda reconoció el puente conceptual entre su trabajo anterior y su nueva propuesta, pues tienen cabida los platos con ofrendas de “alimentos”.
Tras destacar que en la construcción de esos “alimentos” recurre tanto a materiales frágiles como resistentes, añadió que con ellos aborda “la abstracción que se le dona a lo invisible” y explicó que trata de no excederse en los colores y formas de las piezas.
De hecho, algunos de esos trabajos obedecen a una estética minimalista con predominancia del color blanco, desarrollada por medio de sus dibujos y pinturas de paisajes, en una etapa temprana de su producción artística.
Respecto al proceso de elaboración, indicó que a veces quema las piezas con un soplete, o les arroja arena casi en el momento mismo de la fundición.
“A partir de tratar el tema de los alimentos, vienen a mi mente las ofrendas que se han hecho desde las culturas antiguas, hasta lo que conforma la magia del mundo actual”, puntualizó.
Poveda siente satisfacción de que “a través de mi concepto de manualidad y sensibilidad surjan estos objetos y me siento contento de ser un vínculo para que los espectadores puedan percibir la magia y pasar un momento grato, a pesar de que algunos objetos transmiten un mensaje fuerte”.
Artes ocultas
O’Culto se instaló bajo la curaduría de María José Chavarría y estará abierta al público hasta el 14 de setiembre. Esta exhibición ocupa las salas 2, 3 y 4 del MADC, cuyo horario es de lunes a sábados de 9:30 a.m. a 5 p.m.; los lunes la entrada es gratuita. Para mayor información se puede visitar el sitio en Internet: www.madc.cr, o se puede llamar al 2257-7202.