Sebastián Vettel, alemán, piloto de Red Bull y bicampeón mundial.
Una reacción desafiante y casi salvaje del joven piloto alemán, Sebastián Vettel de Red Bull, en los últimos grandes premios de la Fórmula Uno (F-1), le permitió sobrepasar en la clasificación mundial al español, Fernando Alonso Díaz de Ferrari, quien se veía con el título en su bolsillo.
El Gran Premio (GP) de Italia, que fue la prueba 13 de un total de 20 de la temporada, tenía al español como líder indiscutible de la campaña con 169 puntos, 29 más que el germano. Sin embargo, el demonio al volante que es Vettel ganó cuatro premios en forma consecutiva en Singapur, Japón, Corea del Sur y la India, y rebasó Díaz, el dos veces campeón del mundo.
Desde hace varias temporadas, Red Bull domina las pistas del automovilismo mundial, no en vano el pasado domingo conquistaron en el GP de los Estados Unidos su cuarto título mundial consecutivo en categoría constructores. De esta manera, la combinación entre Red Bull y Vettel ha sido letal para las otras marcas, incluyendo a la legendaria Ferrari, ícono del automovilismo italiano que ha cedido posiciones a pesar de firmar a un talento como Díaz.
En el Gran Premio de Abu Dhabi que se corrió el domingo tras anterior, Fernando Alonso le recortó a Vettel tres puntos, pero el piloto de Red Bull los recuperó el pasado domingo en Austin (Texas), al entrar de segundo al podio, detrás del inglés Lewis Hamilton; mientras que Alonso ocupó la tercera posición.
Hamilton, campeón del mundo en 2008, firmó su cuarto triunfo de temporada, tras ser primero en Canadá, Hungría e Italia, en este premio corrido en el nuevo Circuito de Las Américas.
La Fórmula Uno regresó a los Estados Unidos, que vio acción de nuevo después de Indianápolis 2007.
El tercer lugar para el español de Ferrari no es malo, si se parte que Vettel ganó la posición de salida y Alonso salió de sétimo, por lo que los analistas proyectaron que el alemán se coronaría en los Estados Unidos. Hoy los entendidos dicen que Alonso “salvó la primera bola de partido”, o el match point que se canta en el tenis, pero la pura realidad es que está al borde del K.O.
HABLAN LOS RIVALES
Vettel, campeón de los dos últimos mundiales, no dudó en manifestar que ve su tricampeonato mucho más cerca, al obtener el segundo lugar en Austin y al recuperar las tres unidades que le quitó Alonso en Abu Dhabi. Subido en el podio y al lado de Hamilton, Sebastián dijo que “ha sido increíble esta prueba” y recordó que su primera carrera como piloto de la F-1 fue en los Estados Unidos.
“En este país, debuté y ahora cumplí en Austin mi carrera número cien. Estos satisfecho con el equipo; orgulloso de haber ganado el Mundial de Constructores y ahora, el domingo, iremos por el de pilotos. Cada vez estamos mejor, lo veo muy cerca”.
En la otra acera, Alonso demuestra que no se rinde, que el Mundial aún no termina y en Austin expresó que viaja a São Paulo (Brasil) con todas las posibilidades de ganar el título.
“Ha sido otro día bueno para nosotros; hemos intentado salvar los muebles después de una semana bien difícil. No fuimos rápidos el viernes ni sábado, ni en la calificación, de manera que nos jugábamos todo en la primera vuelta. Teníamos que ganar muchas posiciones para colocarnos cuartos o terceros o de lo contrario caer al noveno o décimo lugar que era la despedida del título, y lo logramos”, comentó.
“Creo que perder tres puntos con respecto a Sebastián en un fin de semana en que Ferrari no iba rápido y ellos volaban es algo positivo. Llegamos a Brasil con todas las posibilidades del mundo”, agregó el asturiano.
Otro detalle que llama la atención para el circuito de Interlagos, que se correrá en el Autódromo José Carlos Pace de São Paulo, es que tanto Vettel como Díaz van por una marca histórica del inmortal piloto brasileño, Ayrton Senna, que capturó en 1991 su tercera corona a los 31 años y 213 días.
Si Vettel gana su tercera corona consecutiva, pulverizaría con 25 años y 145 días el récord de Senna. Díaz no se queda atrás, porque intentará no solo tomar revancha y que el destino le devuelva lo que Vettel le quitó en 2010, cuando en Abu Dhabi el alemán le arrebató el título en la última carrera de temporada, sino que el piloto de Ferrari si logra el tricampeonato, lo ganaría con 94 días menos que el mito paulista, quien yace en el cementerio de Morumbi, no muy lejos de Interlagos.
CÓMO QUEDAR CAMPEÓN
Para que Fernando Alonso destrone a Sebastián Vettel, tienen que darse estas combinaciones al terminar la carrera en Interlagos: Alonso debe quedar de primero y Vettel de quinto o más abajo; Alonso debe ser segundo y Vettel, octavo o más abajo; o Alonso debe ser tercero y que Vettel no supere el décimo lugar.
Un dato curioso es que, en este circuito de São Paulo, Fernando Alonso se coronó doble campeón mundial en los años 2005 y 2006, ambos con Ferrari, pero sin ganar la competencia.
Es en Brasil donde Díaz ha cosechado sus mayores éxitos, lo que no deja de ser motivante para el dramático cierre del próximo domingo, en una carrera donde las condiciones meteorológicas también pueden jugar un papel relevante y aumentar la presión sobre los contendientes, porque entonces entran en juego la calidad y resistencia de los neumáticos, detalle vital de los grandes premios automovilísticos.
Vettel, el “pequeño Kaiser”, suma 273 puntos; Alonso, 260; Kimi Raikkonen de Lotus, 206; el inglés Lewis Hamilton de McLaren, 190; y el australiano, Mark Webber de Red Bull, 167.
Todo el drama, la adrenalina y la pasión del automovilismo se trasladan a São Paulo, con este duelo entre dos grandes que se quedó para el cierre de temporada.
