El futuro del Conservatorio Castella es un reto que deben definir los sectores interesados en mantener su carácter cultural.
María del Carmen Gutiérrez, Alejandra Bonilla y Allen Cordero, padres de estudiantes del Conservatorio Castella, hicieron un llamado a la comunidad nacional para que se integre al Foro.
El fantasma de la privatización ronda una de las cunas del arte en nuestro país, y es el principal desvelo de la Asociación de Madres y Padres de Estudiantes del Conservatorio Castella (AMPECC). Por eso solicitan a la comunidad nacional integrarse al «Foro Castella».
Hoy, cerca de 1.200 alumnos del Conservatorio y miles de los que han pasado por allí desde 1953, transitan un camino con poca información sobre el futuro de esa entidad.
Cabe recordar que el Conservatorio Castella inició labores en 1953 y fue fundado por el maestro Arnoldo Herrera González, Joaquín García Monge y Uladislao Gámez, quienes aprovecharon el legado testamentario de Carlos Millet de Castellá, para crear un conservatorio de música, un centro de arte en donde las futuras generaciones educaran sus vocaciones artísticas.
Millet estipuló en su testamento el sitio de la construcción y la forma de administración del legado «en beneficio de la comunidad». Cuando se refirió a la Asociación Conservatorio Castella -creada- en 1956 afirmó: «si se disuelve la asociación, todas las obras existentes pasarán a poder de la Universidad de Costa Rica o al Estado, siempre y cuando se comprometan a mantener el Conservatorio al servicio de la comunidad».
Con el fallecimiento de Arnoldo Herrera en 1996, se inició un proceso de cambio. A principios de 2001 la Junta Administrativa de la Fundación Castella (que nació en 1979 y tenía 17 años de no operar, ya que en ese tiempo no se escribió ni siquiera un acta) denuncia supuestas fallas administrativas y malos manejos financieros; esto desembocó en el despido del director Sergio Herrera Ulloa (hijo de Herrera González).
En este contexto, en octubre del 2000 un grupo de padres de familia creó la AMPECC ante el temor de un supuesto afán de privatizar la institución. Ellos, junto con el gobierno estudiantil, gestionan ante el Ministerio de Educación Pública que se ratifique el carácter público del conservatorio, lo que no han obtenido aún.
Al respecto, María del Carmen Gutiérrez, secretaria de la junta directiva de AMPECC, comentó que «hay una falta muy grande de información. Nosotros hemos querido que don Abel Pacheco nos reciba o la misma Ministra de Educación, Astrid Fischel, pero no hemos recibido respuesta».
En febrero del año pasado se emitió un decreto en el que se ratifica que el Conservatorio Castella no es una entidad privada y ratifica su carácter público; pero, la ley se hace necesaria para institucionalizar su figura.
Actualmente los padres de familia pagan a la institución una cuota solidaria de servicios complementarios de ¢18.000 al mes, la cual posibilita otorgar un sistema de becas.
Según su modelo de enseñanza, desde los 7 años el niño elige el área en que se quiere especializar y arma su propio programa. Hay una carga básica, pero cada uno elige su rumbo. Los jóvenes se pueden especializar en música, teatro, danza, o artes plásticas.
SUPUESTA PRIVATIZACIÓN
«El plan progresivo de privatización empieza con la apropiación de las instalaciones del conservatorio por parte de la Fundación. En marzo de este año traspasan a su nombre los terrenos ubicados en la Sabana y en Barreal de Heredia, cuyo costo asciende a más de ¢100 millones» denunció Alejandra Bonilla, de la Comisión Pro autonomía del Castella.
AMPECC agregó que aquí medió un procedimiento anómalo, ya que la fundación no tuvo propiedades registradas a su nombre hasta marzo de este año. El año pasado solicitaron la inscripción de estas y el Registro no aceptó el traspaso, por una anotación basada en una resolución de la Sala Constitucional que dice que esto se debe llevar a juicio ordinario y dirimir allí quiénes son los verdaderos propietarios.
A pesar de la anotación, este año los terrenos fueron inscritos a su nombre. Se sabe que las fundaciones pueden coadyuvar, pero eso es muy diferente a ser propietarios, porque la institución educativa es del Estado.
«Los terrenos se compraron con bonos agrarios, las aulas las construyó el gobierno con dinero del Ministerio de Obras Públicas y Transportes, y partidas específicas. Todos los costarricenses de hoy y hace 50 años hemos ayudado a construir el Conservatorio como una obra para el desarrollo cultural del país,y ahora no permitiremos que los frutos queden en manos privadas» advirtió Bonilla.
PROYECTO DE LEY
Allen Cordero, presidente de AMPECC, argumentó que ante la falta de una resolución definitiva de las autoridades, ellos tocaron las puertas del Congreso.
«En el tiempo del maestro Herrera, en materia académica funcionaba un modelo autónomo dictado por don Arnoldo. En ese modelo educativo no tenía injerencia el Ministerio de Educación, pero como era un modelo sin normativa, ahora abogamos por rescatarlo dándole un marco institucional».
El 2 de agosto se presentó ante la Asamblea Legislativa un proyecto de ley que ratifica el carácter estatal y autónomo del Conservatorio. Actualmente lo estudia la Comisión de Asuntos Sociales.
Según Cordero, se pretende que la entidad continúe con ese carácter público, y que tenga autonomía en aspectos de orientación académica. Los asuntos los resolvería un Consejo Colegiado integrado por profesores y estudiantes.
Bonilla dijo que en días pasados «el Presidente Abel Pacheco planteó una salida salomónica, que era convertirlo en una institución semi-estatal, pero eso no progresa».
El temor de los padres de familia es que al perder su carácter estatal, esta institución especialista en la formación artística, varíe sus programas educativos, y se pierda el acceso democrático que permitía que algunos sectores de escasos recursos pudieran llegar a ella.
El Foro Castella impulsado por la AMPECC, ya cuenta con el apoyo de organizaciones sociales, sindicatos, ONG, movimientos estudiantiles, artistas, el Sindicato de Educadores Costarricenses, APSE y el Consejo Nacional de Trabajadores Bananeros, quienes en su pronunciamiento de apoyo afirmaron que «la educación artística y pública no es solo interés del Area Metropolitana, sino de todos los sectores costarricenses».
Para integrarse al Foro Castella:
Teléfono 294-0230
