Instituto de la UCR señala que las tasas de interés se mantendrán altas y la inflación llegará a sus niveles más bajos en mucho tiempo.
Aunque se empiezan a ver las primeras señales de recuperación de la crisis, la economía costarricense se contraería entre un 1% y 2% al final de este año, según estimó el Instituto de Investigaciones en Ciencias Económicas (IICE) de la Universidad de Costa Rica (UCR).
Este será uno de los pronósticos que el IICE presentará trimestralmente al país, como parte de un proyecto a cargo de los investigadores Luis Diego Rojas y Rudolf Lucke, y encabezado por el director del instituto, Max Soto.
Soto explicó que la economía ha dejado de ser un asunto de expertos para ser del interés de todas las personas, puesto que de esta depende la posibilidad de conseguir un empleo y conservarlo, solicitar un préstamo y pagarlo; y encontrar las mejores alternativas para hacer rendir más su dinero.
“Para tomar decisiones adecuadas, no basta con saber lo que pasó, sino que se debe tener un panorama de lo que va a pasar. Queremos poner en manos de los costarricenses nuestras estimaciones trimestrales de las principales variables económicas”, comentó Soto.
MERMA LA CRISIS
Rudolf Lucke explicó que para estas estimaciones se construyó un modelo “macroeconométrico” de predicción a corto plazo, del cual se desprenden las estimaciones de crecimiento, inflación, tasas de interés, desempleo y otros.
Las proyecciones se construyen a partir de información disponible como el pronóstico de déficit del gobierno, el ingreso disponible, la inflación externa, las estimaciones del Banco Mundial, y el aumento de los precios del petróleo.
En relación con el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), Lucke aseguró que este indicador muestra un deterioro desde el último trimestre del 2008 hasta marzo (primer trimestre 2009) de -4,8%.
A pesar de este panorama, el IICE prevé una leve recuperación de la economía, por lo que al finalizar el año se espera que la contracción del PIB se ubique entre el -1% y -2%, la cual es menor a lo observado en el dato interanual de los otros trimestres (ver cuadro).
En el caso de la inflación, Lucke afirmó que se han dado las variaciones de precios interanuales más bajas en mucho tiempo, lo que podría generar que alcance entre un 4% o 5% al finalizar el año, menos de la mitad del 13,9% del año anterior.
Sobre este punto el economista explicó que generalmente las señales económicas pueden tardar en llegar a la gente, por lo que muchas personas aún no sienten esta reducción en el crecimiento de los precios.
“Vemos que los precios que caen son de alimentos y bebidas, no tanto como para que se pueda ver una rebaja, lo cierto es que los precios crecen a un ritmo mucho menor”, señaló Lucke.
El investigador añadió que el índice de precios de la canasta básica, mediante el cual se mide la inflación, data de mucho tiempo atrás. Muestra de ello, explicó que son una serie de productos que se consumen actualmente, cuyos precios no son considerados en esta medición, lo cual afecta el resultado final de la medición.
“Entiendo que el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) está trabajando en la actualización de esta canasta”, acotó Lucke.
En el caso de las tasas de interés, el estudio del IICE señala que mantendrán un comportamiento similar al de los últimos meses, lo que las ubicará entre un 10.5% y 12% al finalizar el año.
Ello implica que las personas que poseen créditos en colones continuarán con el pago de las altas cuotas que los aquejan desde el inicio de año, y la situación no cambiará a menos de que el Banco Central haga algo en su política monetaria, explicó.
Lucke añadió que hay una restricción en la liquidez de la economía (el dinero circulante), lo cual hace que los bancos capten colones mediante la imposición de altas tasas de interés.
En el caso de la estimación del desempleo, el especialista recomendó no hacerla trimestralmente. El especialista estima que al cerrar el 2009 este índice oscile entre un 6% y 7%, mientras que el registro anterior fue de 4,6%.
Economía al vaivén de lo externo
Una de las novedades que dará el informe trimestral que empezará a realizar el IICE es la evaluación de cómo se comportaría la economía bajo la influencia de factores externos en distintos escenarios.
Una de esas simulaciones se realizó bajo el supuesto de que la economía de los Estados Unidos no decreciera un 2,4% como lo ha estimado el Banco Mundial, sino que su crecimiento sería del 0%, un panorama algo más favorable.
En este caso, el crecimiento del PIB costarricense mostraría también una leve mejoría, para ubicarse entre el -0,75% y -1,8%, al mismo tiempo que la inflación alcanzaría el 5% o 6% al cerrar el año.
En el caso de las tasas de interés estas podrían ubicarse entre un 10,2% y 12,5% y el desempleo prácticamente no sufriría de ningún cambio en esta estimación, ni en ninguna de las siguientes.
Para Lucke este comportamiento hipotético muestra cuánto afecta a la economía costarricense lo que pase en su principal socio comercial, y su dependencia a lo que suceda en ese país.
En el segundo escenario, los investigadores plantearon que el Banco Central aplicara una política monetaria expansiva en la que aumente la cantidad de circulante (dinero) en la economía a un ritmo del 10% trimestral.
La estimación muestra que el crecimiento del PIB prácticamente no sufriría ningún cambio respecto de la estimación actual, pero la inflación crecería al menos un 0,5% más de lo esperado y las tasas de interés estarían entre el 10,2% y 12,5%.
Para el tercer escenario se supone que el déficit fiscal (la diferencia entre los ingresos y los gastos del gobierno) ya no sea de un 2,8% como lo ha indicado el Ministerio de Hacienda; sino que la política sea más restrictiva en el gasto y se fije un tope de déficit del 1%.
En este escenario, la reducción en el gasto del gobierno supondría un mayor deterioro para el PIB, que decrecería entre 1,5% y 2,5%, mientras que los demás índices permanecerían iguales a la estimación actual.
Lucke recordó que estas proyecciones se realizan en un contexto de crisis internacional que en Costa Rica se refleja en una reducción de las exportaciones y el turismo, así como en el ingreso de capitales externos, mientras que la demanda se ve reducida ante el saldo negativo del crecimiento económico y esto a su vez reduce de manera importante la cifra de las importaciones.
El economista indicó que el Índice Mensual de Actividad Económica (IMAE) mostró un deterioro importante desde el cuarto trimestre del año anterior, pero para los periodos finales de este año se espera una reacción positiva de la economía.
Lucke destacó que el gobierno ha aplicado una política fiscal “contracíclica” al fomentar el gasto para reactivar la economía, pese a que la política económica ha sido pasiva, indicó.
El investigador reconoció que las estimaciones del IICE no se distancian mucho de lo proyectado por el Banco Central, aunque aseguró que se utilizaron métodos distintos.
Explicó que si el Banco Central tomara la decisión de presionar por la baja en las tasas de interés lo lograría fácilmente y ello cambiaría las estimaciones presentadas.
