No soy profeta

Así, en la década de 1990, se producen movimientos sociales en la mayoría de los países del área, los cuales respondían a la necesidad

La historia común de nuestros pueblos hace que los procesos de desarrollo social en estos, aunque únicos en su especificidad, sean semejantes en lo fundamental: la lucha por superar las taras socioculturales y económicas heredadas de la colonia y del capitalismo cuasifeudal imperante desde la independencia hasta finales del siglo XX, cuando, con excepción de Cuba, todo un subcontinente existía en función de los intereses de los distintos imperios.

Así, en la década de 1990, se producen movimientos sociales en la mayoría de los países del área, los cuales respondían a la necesidad de sacudirse de la década perdida –la de los 80, con el finiquito del Estado benefactor, con los gobiernos autoritarios del cono sur y la guerra civil en Centroamérica. En Costa Rica primero reaccionamos los educadores, con la huelga por los derechos laborales en 1991. Después, en 1995, todo el magisterio nacional fue despojado de su sistema digno de pensiones. Aquí sufrimos el embate de los organismos financieros internacionales, del imperio norteamericano y de los gobiernos cipayos del PLUSC, más el oportunismo y la traición de una casta sindical que aún desprecia los verdaderos intereses del trabajador.

Con el “Combo ICE”, en el año 2000, sucedió casi lo mismo que con la huelga magisterial de 1995; sólo que en esta ocasión las organizaciones sociales creyeron haber triunfado en las calles. Luego el TLC, desde 2003 y hasta su “frauderendo” en octubre de 2007, preparó la caída electoral del PLUSC, la cual debió haber sido defendida aún en las elecciones del 2006, cuando Liberación Nacional ganó una elección fraudulenta  que el Partido Acción Ciudadana (PAC) no supo defender, quedando pospuesta su derrota para 8 años después.

Las esperanzas depositadas por un pueblo que quiere cambios estructurales en el manejo de la cosa pública, incluida la justicia socioeconómica -básicamente el sector que se  opuso al “Combo ICE” y al “TLC”- en un gobierno alternativo, hasta hoy, parecen desvanecerse. En su momento quisimos ser profetas (ver Semanario UNIVERSIDAD No. 2032, “Dios me haga profeta”); mas los nublados que opacan la gestión de Luis Guillermo Solís nos indican que la historia prefiere los hechos, y estos nos dicen que la tierra prometida neoliberal nunca llegó y que para lograr un cambio favorable al pueblo trabajador, aún falta camino por recorrer.

[delipress_optin id="134623"]

Otros Artículos

Este libro, que ha causado revuelo glo-bal tanto en redes sociales como en otros medios más serios y reposados de opinión y reflexión, finalmente apareció ...

La Contraloría General de la República (CGR) rechazó el refrendo de la nueva adenda (N°6) al contrato de concesión de la ruta 27 San

Préstamo con el Banco Mundial permitirá el desarrollo de iniciativas de impacto educativo y social.La Universidad de Costa (UCR) le apuesta a la innovación,

El evento más importante del 2014 fue el que no ocurrió: Europa no pudo resolver sus ya largos problemas económicos, políticos y sociales. “Pongo

Desde tu azul... descubrí mi mar...Marco Antonio Castro RodríguezCuentos2012

Pocas veces la crítica y el comentario literario en Costa Rica instalan debates acalorados y afilan posiciones de confrontación.  Observo, sin embargo, una interesante

Ambos artículos (en realidad, el mismo artículo, pero publicado dos veces, con pequeñas variantes gracias a la vulnerabilidad de las revistas citadas) se presentan

El presidente Luis Guillermo Solís fue recibido por su homólogo chino, Xi Jinping, el pasado 6 de enero en el Gran Palacio del Pueblo
Semanario Universidad