Después de estrenarse en el Teatro Nacional, Salomé continúa la temporada en La Aduana.
Una coproducción de la Compañía Nacional de Teatro, la Compañía Nacional de Danza y el Teatro Nacional abre la temporada 2009. Se trata del texto Salomé de Oscar Wilde, reinventado sobre las tablas por Luis Carlos Vázquez, director del montaje.
Así, el año de la CNT arrancó con el estreno de esta obra en el Teatro Nacional el pasado 4 de marzo. Ahora se trasladó al Teatro de La Aduana donde estará hasta el 3 de mayo.
Salomé está basada en el relato bíblico de la muerte de Juan el Bautista, decapitado por causa de Salomé -hija de Herodías-, quien pidió su cabeza como regalo luego de realizar un baile que agradó al rey Herodes Antipas.
El texto de Oscar Wilde agrega elementos al relato, pues en el texto hay un profundo enamoramiento de Salomé por el profeta. Luego de que este es decapitado, Herodes -tetrarca de Judea- ordena la muerte de la protagonista.
Esta obra, llevada en diversas ocasiones a distintos formatos como el cine, el teatro, la ópera y la danza es un texto que ofrece gran libertad de creación.
Por este motivo, se sumaron al director Luis Carlos Vásquez, el director de la Compañía Nacional de Danza, Humberto Canessa y el compositor Carlos Escalante, con lo cual logró de una obra multidisciplinaria en la que se mezclan el teatro, la música y la danza.
Salomé es encarnada por Rocío Carranza, quien debuta como protagonista. Como coprotagonistas aparecen: Pablo Rodríguez, como Jokaanan; Rodrigo Durán Búster como Herodes Antipas y Roxana Campos, como Herodías.
El elenco de la CNT lo completan 16 actores y actrices, a los que se suman once bailarines de la CND, en las coreografías de Humberto Canessa.
LA HISTORIA
El mito de Salomé trata de una hermosa mujer, que después de realizar un baile que agradó a su tío Herodes Antipas -tetrarca de Judea-, pidió como regalo la cabeza del profeta Juan El Bautista.
Según escribe Vásquez sobre el texto, “se dice que el pedido de la cabeza del profeta, no fue una idea exclusiva de Salomé, sino una estrategia política del mismo Herodes Antipas, quien urdió dicha treta, para que el pueblo no lo culpara de decapitar a Juan El Bautista, sino que ese odio se volcara sobre la perversa Herodías, quien había persuadido a su hija Salomé que lo hiciese”.
La amenaza de ser despojada de sus privilegios si no se prestaba al juego de Herodes convierte a Salomé en una víctima de la intriga.
Cuenta la historia que Herodías -madre de Salomé- había sido mujer de Herodes Filipo, a quien su hermano Herodes Antipas se la arrebató. Herodías pasó entonces a ser esposa de Antipas, Tretarca de Galilea y Perea.
Con el tiempo, Herodes Antipas perdió el interés y comenzó a mirar con pasión a su sobrina Salomé, de quien el tetrarca se aprovecharía desde entonces.
Según Vásquez, Oscar Wilde “convierte el destino de Salomé y de Juan en un gran poema dramático, donde aparecen la tragedia, los celos, el amor lujurioso de Herodes por su hijastra y sobrina Salomé, el abuso del poder, el poder absoluto, la ambición y la obsesión de una mujer que se despoja de sus siete velos para realizar el primer strip tease, reseñado en La Biblia”.
El texto de Oscar Wilde fue publicado en 1891 (en francés) y se dice que su estreno fue accidental, pues en tiempos del autor, el Lord Chamberlan de Londres prohibió el estreno de la obra, por lo que tuvo que estrenarse en Francia.
Aunque la razón oficial de tal prohibición fue que se trataba de una “intervención” a un texto clásico, se dice que fue porque sumaba la crítica religiosa a la política, al tratar el tema del poder absoluto y las tiranías.
El director de la obra asegura que este montaje es el fruto de una obsesión suya desde la niñez, que más tarde se convirtió en un reto personal de trabajar en ella.
Las funciones de Salomé son de jueves a sábado a las 8:00 p.m. y los domingos a las 5:00 p.m. Las entradas tienen un costo de ¢3000 general y ¢1.500 estudiantes y ciudadanos de oro.
