Al cumplirse el 30 aniversario de la construcción de la Plaza de la Cultura y el edificio de museos del Banco Central, la exposición “Punto y contrapunto” pretende hacer ver a los visitantes la importancia integral que tiene el conjunto arquitectónico construido en 1982.
La exhibición estará abierta en el Museo del Banco Central a partir del 23 de noviembre y todavía no se ha establecido una fecha de cierre.
El curador de la exhibición, Andrés Fernández, resaltó que uno de los elementos que más destacan es que desde el primer día en que se inauguró el Teatro Nacional surgió una preocupación por dotarlo de un entorno acorde con las características de la obra.
En ese sentido, si bien se tardaron 80 años en construir la Plaza de la Cultura, la aspiración se manifestó desde un principio, lo que revela la trascendencia del conjunto social de ambas edificaciones.
La investigación que sustenta a la muestra contempló aspectos históricos, arquitectónicos y constructivos, para darle al observador una perspectiva de conjunto de tan singular inmueble.
El propósito es que los visitantes aprecien cada detalle de la forma en que fue construida la Plaza de la Cultura —que contempla el edificio en que se albergan los museos del Banco Central—, así como sus características de índole arquitectónica.
De acuerdo con Fernández, hasta ahora el edificio de la Plaza de la Cultura no ha sido valorado en su justa dimensión, ya que tiene “muy altos valores desde el punto de vista arquitectónico, urbanístico y estructural”, los cuales —en la mayoría de los casos— son pasados por alto por quienes asisten a observar las distintas exposiciones.
“Para la fecha en que se creó, es un edificio adelantado a su tiempo y hay que destacar que es el único construido para albergar de manera deliberada a un museo. El resto de los museos fueron ubicados en edificios creados para otro fin”, dijo.
Para Fernández, quien es historiador de arquitectura, el edificio es una verdadera joya que conviene observar con detenimiento. “Es una proeza estructural para el momento en que fue hecho y no ha sido superado en el país, pese al avance de las tecnologías”, acotó.
Recordó que la primera piedra se puso el 15 de septiembre de 1976 y un año después se comenzó la construcción que por fin fue inaugurada en 1982. La obra estuvo a cargo de Jorge Bertheau, Edgar Vargas y Jorge Borbón.
Sobre el inmueble ya existía una investigación histórica realizada por Vivian Solano, la cual en opinión de Fernández es de gran valía. Lo que hacía falta era una valoración arquitectónica y estructural que permitiera entender los entretelones que llevaron a los diseñadores a optar por el edificio que finalmente construyeron.
La editorial Phaidon Press Limited le comunicó recientemente a los Museos del Banco Central, que el edificio fue incluido en el atlas que recogerá las 800 principales edificaciones en el mundo, levantadas entre 1900 y 1999.
En ese sentido, Fernández lamentó que, una vez más, primero es necesario un reconocimiento en el exterior, para que el costarricense valore la calidad de sus construcciones y edificaciones.
NUEVA MIRADA
Uno de los objetivos de la exhibición “Punto y Contrapunto” es que a partir de ahora, quienes vayan a disfrutar de las joyas de los Museos del Banco Central tengan conciencia de que están en un edificio que se constituye por sí mismo en una joya más.
Por tal motivo, la exposición —que arranca este 23 de noviembre— centrará su interés en detalles de cómo son los pisos y otras áreas de carácter constructivo.
Además de ello, se incluyen elementos relevantes sobre los triángulos y las maderas utilizadas en el edificio de la Plaza de la Cultura, todo con el afán de que el inmueble sea valorado en toda su dimensión.
De esta manera, a lo largo de la exhibición se ubicará información que les permita a los visitantes disponer de elementos que expliquen qué tipos de materiales conforman el conjunto arquitectónico y cómo están desplegados en la edificación.
El desafío es que la exposición cree conciencia en el valor arquitectónico, urbanístico y estructural de la Plaza de la Cultura. Para facilitar esta tarea se colocarán fotografías y un plano que contribuya a ver mejor la edificación, cuya propuesta se adelantó a su tiempo.