de glaciares, aumento del gas CO2 por combustión de hidrocarburos fósiles, gases
de efecto invernadero, calientan la palestra nacional. En el mundo eventos extremos
como: inundaciones, sequías, incendios, nevadas, granizadas, disminución de caudales,
enfermedades, etc. que inciden (des)favorablemente en la estructura productiva
y ambiental, son consecuencia del CC causado por ese gas, según un sector de la
climatología y medios de comunicación.
Pero, en ciencia, hay que precisar de qué se habla o escribe. Cambio, como sustantivo,
modifica la situación precedente. El adjetivo climático es complicado. ¿Qué significa
el énfasis? “Es un esfuerzo de los gobiernos del mundo, para adaptarse al cambio
climático que llegó.” “Costa Rica ya lidia con los efectos del cambio climático”. Otro
artículo tratará el Cambio Climático.
De clima hay expresiones como: “Espero un partido muy intenso, disputado y con un
clima bastante pesado, ahí tenemos que ser inteligentes para manejar bien los tiempos,
debemos llevar un partido bueno por la temperatura”. “Un clima estable, caluroso y
sin lluvias será parte de la gran final del fútbol costarricense de esta noche”. “Clima de
Recife favorecerá más a Costa Rica que a Grecia”. Incluso: “Ahora ya nada es igual, el
clima cambió”. “Estamos relacionados con un ambiente que está pidiendo auxilio.” Lo
anterior parece emular los años 80 y 90 con los beneficios del ecoturismo, adoptando la
colectividad las expresiones: cuidemos la ecología, la ecología ayuda al turismo, etc.
El año pasado, quien redacta, investigando la función de los árboles en las pasturas:
servicios ecosistémicos, alimento, combustible, construcción, etc.; encontró en casi toda
la literatura gris y científica examinada los conceptos del primer parágrafo.
Retomando el clima, el que escribe, en los 80 estudiando en Turrialba, en universidades
y centros de investigación de Alemania, Estados Unidos, Inglaterra e Israel, la
invención de la agricultura, la domesticación y diversidad genética de las plantas,
encontró que ese hito de varias zonas (sub)tropicales, lo favoreció un calentamiento
en el Holoceno (~11.000 años), de causas ignotas. Asimismo, la geología, ilustra CC
brutales previos a ese periodo. El cambio es la constante de la atmósfera desde la
génesis del planeta hace 4.600 millones de años, esto es difícil para la paleoclimatología
pues la huella humana tiene solo de 2 millones de años. Además, la climatología
como ciencia, no cuenta con planetas Tierra para probar estadísticamente con grandes
experimentos sus teorías. Por ello estudia el clima antiguo.
Desde el inicio del Holoceno datos científicos apuntan que la tierra venía calentándose,
otros que se enfriaba antes que los humanos comenzaran a afectar el entorno. Un
equipo de investigadores ayudando al IPCC (Panel Intergubernamental sobre el Cambio
Climático) para su Informe Anual, analizó los promedios de la temperatura mundial en
los últimos 10.000 años y reconoció esa disparidad, que ya enfrenta a ese ente político a
un rompecabezas. Por ello, un nuevo artículo, próximo a comentar, sugiere reexaminar
datos y MC actuales que sientan al CO2 fundiendo los polos y calentando el planeta.
Abrigado al IPCC se irradia urbi et orbi esa fama del CO2, que, para el autor, aún
tiene sesgos. Como ciudadano responsable y biólogo, apoyo iniciativas para reducir la
contaminación del entorno y el derroche energético, investigar sobre energías limpias,
adoptar la agricultura sostenible, ordenar el territorio y el transporte público y exigir
motores que consuman menos y más eficientes combustibles fósiles. Sé que la creciente
población humana no reducirá ese consumo. Pero, en materia energética, transporte
público/privado, ambiente, producción agropecuaria, entre otras, los formuladores de
políticas correlacionadas, deben considerar con cuidado el tema Cambio Climático para
no afectar el desarrollo del país.