El proyecto de apertura del mercado eléctrico sigue cosechando la oposición de sectores: unos reclaman mayor protección al ICE y otros más participación privada.
La generación eléctrica sería excluida como un servicio público y se definiría como una mercancía en el proyecto de la Ley General de Electricidad que envió el Poder Ejecutivo a la Asamblea Legislativa durante las pasadas sesiones extraordinarias, según concluyó el exregulador general de la República y exintegrante del Consejo Directivo del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) Leonel Fonseca, en un análisis que elaboró sobre dicha propuesta de apertura, facilitado a UNIVERSIDAD.
Este proyecto ha sido blanco de críticas por parte de expertos en el área, al asegurar que colocaría a esa institución como un actor más en el mercado eléctrico y sin ventajas respecto de multinacionales que podrían explotar los recursos locales (Ver nota edición 1865: “Apertura eléctrica desbancaría al ICE como protagonista del mercado).
La Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones del Sector Empresarial Privado (UCCAEP) manifestó mediante un comunicado de prensa su oposición por considerar que más bien se fomenta el monopolio de la entidad y que la participación de las compañías privadas no debería tener límites. Se trató de concertar una entrevista con Manuel Rodríguez, presidente de esta organización, pero el encargado de prensa William Segura indicó que se le enviaran las preguntas por correo electrónico. El 8 de setiembre se le envió un cuestionario con cinco preguntas; no obstante, a la hora del cierre no hubo respuesta.
Por su parte, el ministro de Ambiente, Energía y Telecomunicaciones Teófilo de la Torre, aseguró a UNIVERSIDAD que este es un proyecto a favor del país en general y que se preservarían las características del ICE, que junto con un mercado mayorista que funcionaría de forma paralela a este y dinamizaría el sistema eléctrico (Ver nota aparte: “Al ICE lo mantenemos como está”).
¿LA NUEVA MERCANCÍA?
La primera crítica en el análisis del exregulador Leonel Fonseca se presenta en el artículo 10, que define el concepto de servicio público.
“Tal como sucedió con las telecomunicaciones, ‘curiosa y sorpresivamente’ se excluye la generación eléctrica como un servicio público. Al definirse como una ‘simple mercancía’ pierde una serie de condiciones y garantías para que la obtengan y disfruten todos los consumidores, sin que para ello dependa su capacidad, poder económico o lugar de residencia.
Refutó que al final de ese artículo se coloca una aclaración a la generación eléctrica aportada por el ICE y la derivada de contratos, que las define como un bien para la población, pero Fonseca la calificó como un “parche”, en el mismo artículo.
Resaltó que también se excluyen las cooperativas eléctricas y empresas municipales como un bien para la ciudadanía.
Asimismo, mencionó que es conveniente la participación de empresas de generación privadas, pero con la condición de que sean de capital costarricense en su totalidad o mayoría, con el fin de evitar el regreso de multinacionales energéticas, las cuales según su criterio, tuvieron experiencias negativas en varios países, incluido Costa Rica.
Fonseca subrayó que la propuesta de que estas compañías regresen a operar es innecesaria y una etapa superada. Además, apuntó que existe un potencial financiero bastante amplio y que no hay razón para ceder la propiedad a empresas multinacionales o gobiernos extranjeros.
También reprochó que el texto se dedique preferentemente a “promover y otorgar ventajas a los grandes consumidores, generadores privados, al mercado regional” y que casi no se mencione “la protección de los derechos de la gran mayoría de usuarios que no son grandes consumidores”.
Resaltó que se les otorga poca mención a las cooperativas de electrificación rural y empresas municipales de servicio público, que se encargan de llevar el servicio eléctrico a zonas alejadas y con un porcentaje alto de subvención.
En contraste, opinó que el papel que se le da al mercado regional es preponderante. “Si se trata de propiciar la integración eléctrica y el intercambio de energía, que en nuestro caso consistiría en colocar los excedentes que llegara a tener el Sistema Eléctrico Nacional una vez satisfechas la demanda local, no parece inconveniente. Pero en el texto aparecen condiciones y ventajas que colocan a este mercado y a su normativa como preferente o de rango parecido al nacional, lo cual no parece racional ni conveniente”.
Otro de los puntos que colocó en duda es el artículo 12, que establece la creación de un mercado eléctrico mayorista, que según el proyecto tiene el objetivo de mejorar el costo, calidad, seguridad e inversión de los servicios de esta área. Este apartado también fue objetado por las cooperativas, que aseguraron que se les impide participar junto con los generadores privados.
Fonseca aseveró que detrás de los supuestos logros que obtendría este mercado mayorista, hay un trasfondo ideológico que no necesariamente es el que brinda las mejores condiciones. “En muchos países donde se han propiciado estas aperturas siguen sin ‘disfrutar’ de tales beneficios, y por el contrario son frecuentes y conocidos los casos donde siguen los largos racionamientos y el costo de la energía por supuesto no es el más bajo”, afirmó.
Teófilo de la Torre: “Al ICE lo mantenemos como está”
En una entrevista concedida a UNIVERSIDAD, el ministro de Ambiente, Energía y Telecomunicaciones, Teófilo de la Torre, mencionó que de aprobarse el proyecto de ley general de electricidad enviado por el Poder Ejecutivo, el ICE seguiría teniendo el protagonismo actual y existiría un mercado paralelo en el que competirían las nuevas empresas. Este es un extracto:
Usted aseveró en Consejo de Gobierno que el ICE se iba a mantener como un actor fundamental dentro del sistema, pero hay sectores que aseguran que va a ser desbancado y una institución más dentro del mercado eléctrico ¿Cómo es que se puede ver afectado con la inclusión de nuevos actores privados?
Un proyecto de este tipo es polémico, dependiendo de la procedencia de las observaciones, pueden decir que es muy pro ICE y otros anti ICE, la verdad es que lo que nosotros hemos buscado es encontrar una propuesta pro Costa Rica, donde no es importante la herramienta sino los fines, y los fines son obvios, Costa Rica merece tener electricidad económica, sostenible, de calidad. Para hacer eso se necesita operadores y el país lo ha venido haciendo bien durante muchos años.
Dentro de ese juego es que la relación de la ley sitúa al ICE como un actor importantísimo dentro del gran total, pero no el único. No está en discusión si es monopolio o no, ya tiene una participación muy importante dentro de un conjunto de actores del sector eléctrico.
El proyecto de ley viene a acomodar a estos actores de la manera más eficiente posible, cada uno aprovechando sus virtudes y eliminándole sus barreras; ahí es donde hemos programado que en lugar de crear un mercado mayorista único en donde el ICE es un vendedor más, y ese es el proyecto de ley que el gobierno anterior había propuesto; recomendamos que el continúe haciendo los proyectos de generación eléctrica como en los últimos 62 años.
Cuando se dé esta reestructuración, insistiendo en el tema del ICE, ¿desea la presente administración que él quede como el actor importante que es dentro del mercado?
Sí. Al ICE lo mantenemos como está. El sector privado tiene otras reglas, le vende exclusivamente al ICE, le compra la energía y la revende. Aquí lo que hacemos es no usarlo como intermediario entre estos generadores privados y los consumidores, sino que los generadores privados producen electricidad y se la venden a las distribuidoras directamente, a través de la red de transmisión del ICE, por la cual pagan el peaje correspondiente. También los generadores privados pueden venderles a los consumidores e industrias. De esta manera, el sector privado que le vende solo al ICE va directo a distribuidoras, a través del mercado mayorista de la electricidad, que no es revuelto con este, sino que son paralelos. Esperamos que el sector privado se pelee entre ellos.
En la parte del mercado mayorista solo se incluyen generadores privados, lo que es cooperativas y otros no están ahí…
Son compradores. Si las cooperativas hacen empresas de sociedades anónimas o consorcios pueden participar también en el mercado mayorista. Por ejemplo Coneléctricas (consorcio de cooperativas) puede participar y ganar subastas, y vender energía a todas las distribuidoras dentro de las cuales están ellos mismos. El único excluido en las subastas mayoristas son el ICE y (Compañía) Fuerza y Luz, que son las dos empresas estatales y que están ubicadas en otra parte del modelo.
Otro de los aspectos que se critica es que en la parte del servicio público se menciona la parte del ICE pero no de las cooperativas, entonces ¿por qué se excluyó?
Todos son servicios públicos, excepto las transacciones en el mercado mayorista que son actividad comercial; pero la compra por parte de las distribuidoras de la generación privada es un servicio público, la producción del ICE y distribución, Fuerza y Luz…
Hace unos meses el expresidente del ICE Pedro Pablo Quirós comentó que Costa Rica estaba cometiendo un error al copiar modelos de apertura extranjeros y que el que se quería era muy español (haciendo la salvedad de que estaba hablando del proyecto anterior). ¿Cuál es su opinión al respecto tomando en cuenta que según lo que usted dice es en pro de la energía renovable?
De extranjero no tiene nada, pero las ideas vienen de observar los éxitos y fracasos de otros países. En este campo de la apertura de la producción y venta de la energía eléctrica ha habido muchas cosas buenas y malas. Hemos entrado a este esquema 20 años después de otros, por eso es que no pretendemos que haya un mercado mayorista que incluya al ICE, porque ahí sí sería un modelo hecho en España.