En las últimas semanas se ha planteado reiteradamente en algunos medios de comunicación que hay carencia de especialistas en la Caja y que esto es un problema que debe resolverse urgentemente, inclusive trayéndolos del exterior.
El Estudio de Necesidades de Especialistas Médicos para la CCSS-Proyección 2006-2017 realizado por el CENDEISSS, indica claramente que esa brecha se ha estado cerrando y que las necesidades de especialistas de la CCSS han venido llenándose gracias al convenio CCSS-UCR.
Lo anterior resulta más claro cuando vemos los datos que recoge un informe de auditoría llevado a cabo por la CCSS en 2010, basado en ese estudio de necesidades. El informe evalúa las necesidades de Anestesiólogos, Psiquiatras y Radiólogos. En el caso de los primeros, por ejemplo, la diferencia entre los especialistas necesarios y los formados, pasó de -27 en el 2006, a -2 en el 2010. En ese mismo estudio, la proyección necesaria para el período 2012-2014 era de 14 especialistas y solamente en el 2012 la UCR formó 20 anestesiólogos. Si contamos los que se graduarán en el 2013 y 2014, ya se dispondría de un número mayor al requerido.No hay motivos para un recurso de amparo. El Posgrado en Especialidades Médicas graduó un total de 909 especialistas entre los años 2005 y 2011. De este total, 500 habían cursado previamente sus estudios de Medicina en la UCR, mientras que 396 procedían de diferentes universidades privadas del país (288 graduados de la UACA y UCIMED juntas). Si a las cifras anteriores añadimos 13 egresados de universidades extranjeras, alcanzamos un total de 409 especialistas procedentes de entidades diferentes a la UCR, un 45% del total de graduados.
Esto lo recalco en contraposición al recurso interpuesto por el Señor Rector de la UCIMED, el cual se encuentra en estos momentos en revisión en la Sala Constitucional y en el que se indica que se le está negando el derecho a la educación a egresados de instituciones privadas. La admisión al programa está basada en criterios de calidad y no en la instancia de estudios de procedencia.
También se ha utilizado el término monopolio en este contexto, menospreciando la vocación social bajo la que operan las entidades públicas. La UCR y la CCSS firmaron un convenio desde 1976, y desde esa época ambas instituciones han trabajado en forma conjunta para lograr una formación de excelencia en los especialistas médicos. El convenio ha permitido también atender los requerimientos de la Caja en diferentes áreas, y todo el proceso se ha llevado a cabo siguiendo criterios de accesibilidad, compromiso con la sociedad, y ausencia total de fines de lucro, los cuales siempre han caracterizado el comportamiento de estas instituciones públicas.
Uso de los bienes públicos por intereses privados. Es interesante preguntarse por qué, si las universidades privadas pueden establecer contratos con los hospitales privados y efectivamente ya lo han hecho (Especialidad en Dermatología, que la UCIMED impartió en una única promoción en el Hospital CIMA), no han continuado por esa vía. Una posible explicación podría ser que esta opción resulta altamente costosa.
Tanto la Caja como la UCR son instituciones públicas y aunque su quehacer es distinto, su propósito es el mismo: ambas velan por el interés público, el bienestar de la sociedad costarricense.
Ahora que el futuro de la formación de especialistas está en manos de la Sala Constitucional, apelamos a los Señores Magistrados para que salvaguarden los principios de la reforma social en que se fundamentan los programas conjuntos de la CCSS y la UCR.
Por nuestra parte, nos comprometemos a demostrar ante cualquier instancia que lo requiera, la pertinencia de mantener y fortalecer el Convenio entre ambas instituciones y la capacidad del Programa de Posgrado en Especialidades Médicas de la UCR de atender las necesidades de formación de especialistas que tiene el país.