Durante su primer año de gobierno, la administración Solís Rivera maniobró para mejorar la recaudación fiscal del Estado y procuró contener el crecimiento del déficit fiscal del país, pero no logró detener el deterioro de este déficit o el estancamiento de indicadores macroeconómicos clave.
A inicios del 2014, cuando el ahora mandatario Luis Guillermo Solís buscaba la presidencia, el Banco Central emitió su pronóstico macroeconómico para el año con una sombría predicción: el país cerraría el 2014 con un déficit fiscal equivalente al 6% del Producto Interno Bruto (PIB).
Cuando llegó diciembre, el ministerio de Hacienda a cargo del actual vicepresidente, Helio Fallas, pudo dar una noticia diferente: el crecimiento esperado se contuvo y el déficit llegó al 5,7% del PIB que, aunque más bajo, es todavía 0,4% mayor que un año antes.
Al tiempo que mejoró los ingresos, la administración Solís Rivera no pudo lograr que la economía del país diera un giro positivo.
Se están haciendo esfuerzos, pero parece que no están dando resultadosPablo Sauma, Observatorio del Desarrollo
En los 12 meses que lleva esta administración, los indicadores de crecimiento del PIB, de desempleo y el Índice Mensual de Actividad Económica (IMAE) muestran una economía con cierta estabilidad en algunos indicadores macro, pero sin la chispa necesaria para aumentar el empleo y revitalizar la economía.
«Se están haciendo esfuerzos, pero parece que no están dando resultados y eso a pesar de que una de las críticas (de empresarios) ha sido el precio de la estabilidad de la electricidad y eso ha estado estable», señaló Pablo Sauma, economista y director del Observatorio para el Desarrollo de la Universidad de Costa Rica.
Ciertas señales dan inicios de cambios en el manejo de las finanzas públicas por parte del equipo de Solís. La inflación ha tendido a la baja y la variación interanual a abril del 2015 fue de 1,81%, muy por debajo del piso de la meta que tiene fijada el Banco Central (que oscila entre 3 y 5%).
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A pesar de la limitación en el crecimiento del déficit fiscal, diversas instancias políticas y administrativas han hecho críticas al presupuesto aprobado por el Gobierno para este año y los gastos hechos durante el 2014. Precisamente, el paso del proyecto del Presupuesto Ordinario por la Asamblea fue uno de los puntos más complicados de la actual administración.
En su Memoria Anual del 2014, la Contraloría reprendió el nivel de gasto del Gobierno Central y señaló que es urgente recortar en ciertos rubros para poder mantener el país estable.
«El continuo crecimiento de la deuda a un ritmo mayor que la actividad económica, origina que la relación Deuda/PIB se incremente 1,5 puntos porcentuales con respecto al 2013, ubicándose en un 56,7% del PIB», señala la Contraloría General de la República.
Indicadores
En febrero, el Instituto Nacional de Estadística y Censos reveló que la tasa de desempleo durante el último trimestre del año pasado había alcanzado el 9,7%, poco más de 220.000 personas que buscaban trabajo y no lo encontraban.
Un año antes, este indicador estaba en 8,3%, aunque en 2012 el desempleo cerró en 9,8%.
Además, más gente está trabajando menos horas de las que quisiera. Ese índice, llamado subempleo, llegó al 14,2% en el último trimestre del año pasado, 2% más que a finales del 2013.
Estamos buscando el fomento al emprendedurismo, a las pymes (pequeñas y medianas empresas) y a la producción nacionalWelmer Ramos, minstro MEIC
El ministro de Economía, Industria y Comercio, Welmer Ramos, señaló que su cartera está tomando medidas para potenciar el emprendedurismo, la empresariedad y las cadenas productivas, para así facilitar el empleo a personas con menos escolaridad, quienes en su criterio tienen menos oportunidades de conseguir trabajo.
«Hemos fomentado de manera exitosa la atracción de inversión extranjera de alta tecnología, pero las empresas captan mano de obra con menos escolaridad y ahí hemos tenido un ritmo de crecimiento más lento y eso se refleja en un aumento en el desempleo», explicó.
«Por estamos buscando el fomento al emprendedurismo, a las pymes (pequeñas y medianas empresas) y a la producción nacional, mejorando los valores de aquellas actividades que captan trabajo con menos especialización«, agregó.
A pesar de esto, el ministro aseguró que está satisfecho con la labor realizada por el equipo económico del Gobierno en materia económica.
«En términos gruesos, este país ha tenido estabilidad macroeconómica. Hemos tenido un buen ritmo de crecimiento, ha habido confianza empresarial y estabilidad en cuanto a precios y tasas de interés, lo que ha sido una política deliberada del Gobierno y hemos llevado a buen recaudo la inversión extranjera directa», aseguró el jerarca.
En la Asamblea
Parte de la discusión sobre las finanzas públicas pasó por la Asamblea Legislativa, que debe aprobar el presupuesto del Gobierno Central, pero no el de las instituciones autónomas. El dinero que recibe el Central es apenas un tercio del gasto estatal.
A finales del año anterior, la propuesta del Poder Ejecutivo para el Presupuesto Extraordinario del 2015 no recibió el aval de los diputados y fue aprobado por un trámite que posteriormente la Sala Constitucional calificó como inconstitucional.
El Gobierno ha luchado para impulsar una agenda de legislación enfocada en la lucha contra el fraude y la evasión fiscal, pero que ha tenido poco éxito entre los legisladores.
Desde julio de 2014, el ministro de Hacienda presentó un proyecto de ley de lucha contra el fraude fiscal que permita reforzar los controles tributarios y reducir los portillos legales que facilitan la evasión y elusión fiscal.
Se estima que la Administración deja de percibir ¢8.000 millones mensuales por la no aprobación del Proyecto. De acuerdo con las estimaciones de Hacienda, de haberse aprobado en octubre del 2014, el Fisco habría recibido casi ¢50.000 millones a marzo del 2015.
La economía en el informe anual de Solís
Estas son algunas de las menciones al tema económico que hizo el presidente Luis Guillermo Solís, en su discurso del 1 de mayo:
Logramos que el déficit fiscal cerrara en 5,7%, del PIB y empezamos el 2015 con la menor tasa de déficit de los últimos años.
Estas y otras acciones tienen como resultado el más bajo incremento del crecimiento del gasto de los últimos seis años, cuyo indicador del 2014 se sitúa en 9,3% frente a 13,4% del 2013.
La actividad económica creció en el 2014 un 3,5%, tasa insuficiente para salir de nuestros rezagos (…).
En 2014 logramos la atracción de 39 nuevos proyectos (…) cuya inversión permite la generación de 10.200 nuevos empleos.
El país merece y necesita mejores tasas de crecimiento, una reducción del déficit fiscal de al menos tres puntos al final de mi Gobierno, acelerar su conectividad, mejorar las condiciones de competitividad de su economía y acelerar la formación del recurso humano que sigue siendo, hoy, nuestro principal atractivo como punto focal de atracción de inversión extranjera directa.
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