El presidente de la República, Luis Guillermo Solís, anunció hoy la decisión de no mantener a Iván Barrantes como asesor Ad Honorem en Casa Presidencial, tras la polémica que han desatado las relaciones comerciales de Barrantes con otras empresas y el conflicto de intereses que esto podría representar para el estratega en comunicación.
En conferencia de prensa citada este lunes en Casa Presidencial, Solís aseguró que tras escuchar y leer diversas opiniones sobre el tema, analizó el caso y decidió pedirle a Barrantes su renuncia.
“Don Iván tomó la decisión de acoger esa misma acción, cosa que celebro, porque me parece que las circunstancias hacen evidente la conveniencia de que siga desarrollando sus actividades privadas en el marco privado, no como consejero en esta Casa Presidencial”, dijo Solís.
El mandatario aseguró que Barrantes fue un “consejero respetuoso” y le agradeció su aporte, sobre todo durante la campaña política que llevó a Solís y al PAC a ganar el pasado proceso electoral.
“Nunca Iván Barrantes buscó presionarme con un proceso de decisión para favorecer a cualquier grupo de interés o presión, por tanto agradezco mucho el esfuerzo que hizo de aconsejar de manera positiva el proceso de toma de decisiones cuando fue requerido”, dijo el mandatario.
Solís aseguró que la propuesta en que estaba trabajando Barrantes para una estrategia de comunicación para el gobierno no será utilizada ya que quedó inconclusa, y dijo que le llama la atención la “virulencia” con que se ha tratado el tema, lo que considera un signo de preocupación de algunos sectores por lo que será su informe de los 100 días de gobierno.
“Hemos encontrado espacios de opacidad en la toma de decisiones, en hospitales, ministerios, en el Ministerio de Cultura, el Ministerio de Justicia, Educación, todos lugares donde se hicieron intervenciones y continuarán haciéndose otras”, apuntó.
Solís insistió en que escuchó “todos” los criterios al respecto, incluido el del diputado y fundador del Partido Acción Ciudada (PAC), Ottón Solís, uno de los más críticos sobre la permanencia de Barrantes en Casa Presidencial como asesor sin remuneración.